NUEVA YORK—Las galaxias lejanas y antiguas están dando a los científicos más pistas sobre una misteriosa fuerza llamada energía oscura que podría no ser lo que pensaban.
Los astrónomos saben que el universo se está separando a un ritmo acelerado y llevan décadas preguntándose qué podría estar acelerándolo todo. Su teoría es que existe una fuerza poderosa y constante que encaja perfectamente con el principal modelo matemático que describe el comportamiento del universo. Pero no pueden verla y no saben de dónde procede, así que la llaman energía oscura.
Es tan vasta que se cree que constituye casi el 70 por ciento del universo, mientras que la materia ordinaria, como las estrellas, los planetas y las personas, solo representa el 5 por ciento.
Pero los hallazgos publicados a principios de este año por una colaboración internacional de investigación de más de 900 científicos de todo el mundo arrojaron una gran sorpresa. Al analizar cómo se mueven las galaxias, los científicos descubrieron que la fuerza que las empuja o tira de ellas no parece ser constante. Y el martes, el mismo grupo publicó una nueva serie de análisis mucho más amplios que arrojaron una respuesta similar.
«No pensaba que un resultado así fuera a producirse en mi vida», afirma Mustapha Ishak-Boushaki, cosmólogo de la Universidad de Texas en Dallas que forma parte de la colaboración.
El Instrumento Espectroscópico de la Energía Oscura utiliza un telescopio situado en Tucson, Arizona para crear un mapa tridimensional de los 11,000 millones de años de historia del universo y ver cómo se agrupan las galaxias a lo largo del tiempo y del espacio. Esto proporciona a los científicos información sobre cómo evolucionó el universo y hacia dónde podría dirigirse.
El mapa que están construyendo no tendría sentido si la energía oscura fuera una fuerza constante, como se teoriza. En cambio, la energía parece cambiar o debilitarse con el tiempo. De ser así, se pondría en entredicho el modelo cosmológico estándar de los astrónomos. Podría significar que la energía oscura es muy diferente de lo que pensaban los científicos, o que puede estar ocurriendo algo completamente distinto.
«Es un momento de gran emoción y también de confusión», afirma Bhuvnesh Jain, cosmólogo de la Universidad de Pensilvania que no participa en la investigación.
El último hallazgo de la colaboración apunta a una posible explicación de una teoría más antigua: que, a lo largo de miles de millones de años de historia cósmica, el universo se expandió y las galaxias se agruparon como predecía la relatividad general de Einstein.
Los nuevos hallazgos no son definitivos. Los astrónomos afirman que precisan más datos para invalidar una teoría que parecía encajar tan bien. Esperan que las observaciones de otros telescopios y nuevos análisis de los nuevos datos en los próximos años determinen si la visión actual de la energía oscura se mantiene o se desvanece.
«La importancia de este resultado ahora mismo es tentadora», dijo Robert Caldwell, físico del Dartmouth College que no participa en la investigación, «pero no es como una medida bañada en oro».
Hay mucho en juego en torno a la respuesta. Dado que la energía oscura es el mayor componente del universo, su comportamiento determina el destino del universo, explicó David Spergel, astrofísico y presidente de la Fundación Simons. Si la energía oscura es constante, el universo continuará expandiéndose, cada vez más frío y vacío. Si su fuerza aumenta, el universo se expandirá tan rápidamente que se destruirá a sí mismo en lo que los astrónomos llaman el Big Rip.
«Que no cunda el pánico. Si esto es lo que está pasando, no ocurrirá hasta pasados miles de millones de años», dijo. «Pero nos gustaría saberlo».
Por Adithi Ramakrishnan
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