La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) respondió este martes a la renuncia de sus seis exintegrantes del Consejo Consultivo, nombrados por el Senado de la República, quienes alegaron una obstaculización en sus labores por parte de su presidenta.
La CNDH rechazo este 24 de octubre las razones por la que los exconsejeros renunciaron alegando que “desinforman y mienten” al respecto, según un comunicado. La comisión es un organismo público autónomo del estado mexicano que no depende de ninguna autoridad.
“Es preciso para esta Comisión Nacional responder a cada uno de sus infundios, y mostrar al pueblo de México la realidad de quienes, incumpliendo sus responsabilidades, solo han hecho una labor obstruccionista al trabajo que venimos desempeñando, en defensa de los derechos humanos”, señaló el organismo
Los exconsejeros presentaron su renuncia el 23 de octubre en una carta dirigida a la presidenta del Senado, Ana Lilia Rivera Rivera, y a la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Kenia López Rabadán.
En el documento, los exconsejeros alegaron un mal desempeño de la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra, alegando que ignoró sus consejos a pesar de que algunos de ellos fueron “formulados por unanimidad en favor de los derechos humanos”.
“[Piedra] ha obstaculizado nuestro trabajo llegando al extremo de ignorarnos por completo, amenazar y calumniar a algunas personas integrantes del Consejo, no solo en los espacios de este órgano ciudadano, sino utilizando para ello los recursos, personal y los medios de la CNDH, incluyendo sus redes sociales”, dijeron los exconsejeros.
Además, precisaron que como integrantes del Consejo no recibieron salario ni remuneración económica, por lo que su labor fue solo para “servir a la causa de los humanos de las víctimas en México”. También acusaron una falta de imparcialidad de la comisión con respecto a su actuación en la defensa de derechos humanos.
El Consejo Consultivo es un órgano dentro de la CNDH que tiene entre sus principales facultades: «establecer los lineamientos generales de actuación que guían sus labores, la aprobación de su reglamento interno y demás instrumentos normativos, así como las modificaciones o adiciones que se requieran».
Dicho consejo se integra por 10 consejeros —quienes permanecen en el cargo cuatro años— y son elegidos por el voto de dos terceras partes del Senado o, en sus recesos, por la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, con la misma votación calificada, según la página web del organismo. La presidenta de la CNDH también forma parte del Consejo Consultivo.
“Un órgano que debiera ser autónomo, —la CNDH— pareciera estar atendiendo a intereses diversos a los de la defensa y protección de los derechos humanos”, y agregaron que “ante los múltiples obstáculos que nos han hecho prácticamente imposible cumplir con la noble función que nos fue encomendada, (…) decidimos de manera unánime renunciar a este honroso cargo”.
La carta estuvo firmada por Tania Espinosa Sánchez, Adalberto Méndez López, Bernardo Romero Vázquez, Jorge Alejandro Saavedra López, Ángel Trinidad Zaldívar y Georgina Diédhiou Bello.
En respuesta, la CNDH dijo que es “mentira que la renuncia de los consejeros se haya dado porque la presidenta se negara a ‘acatar resoluciones asumidas por el consejo’. Señaló que dicho consejo es consultivo de la presidencia y no actúa por encima de ella, “y menos, como reiteradamente pretendieron, ‘interpretando’ la ley a su antojo y conveniencia”.
Asimismo, la CNDH señaló que estos seis exintegrantes se pusieron al margen de la ley al negarse a nombrar a dos personas que dejarían sus funciones como consejeros, mismas que serían reemplazadas por el Senado. Informó además que Piedra notificó al Senado sobre esta negativa para que este interviniera, pero a la espera de la resolución, los seis consejeros presentaron su renuncia.
“Subrayamos que la renuncia de las seis personas que fungieron como consejeras, no coloca a la CNDH ante ninguna crisis. (…) Nosotros pensamos que esta decisión suya, brinda la oportunidad de seguir avanzando en la transformación de la CNDH, porque es una prueba más de que el modelo que nos heredó el neoliberalismo está totalmente superado”.
En respuesta, la senadora y presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Kenia López Rabadán, lamentó el lunes la renuncia de estos exconsejeros diciendo que la CNDH dejó de defender al pueblo para defender al gobierno.
“Mi solidaridad con cada una y cada uno de los consejeros ciudadanos que fueron nombrados por unanimidad y hoy renuncian, dejando constancia de su probidad, su defensa por los derechos humanos y su independencia ante las arbitrarias decisiones de quien hoy preside ese organismo”, escribió en X.
Siga a Eduardo Tzompa en X: @JEduardoTzompa
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