El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, presentó el Fondo de Pensiones para el Bienestar financiado en casi el 60% por cuentas no reclamadas de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), el sistema privado de pensiones.
El Fondo de Pensiones para el Bienestar es un fideicomiso en el que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público es el fideicomitente y el Banco de México es el fiduciario. Es decir que Hacienda entrega los fondos al Banco de México para que este último los administre.
Dicho fondo está compuesto por una bolsa de 44,894 millones de pesos (2454.5 millones de dólares), de los cuales el 59% de sus recursos iniciales, 24,238.5 millones de pesos (1325.2 millones de dólares), provienen de cuentas no reclamadas de las afores. Estas cuentas corresponden a trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Además de las afores, el fondo se financia en un 27% con recursos incautados al crimen organizado o a políticos corruptos por el Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado (INDEP), y en un 14% por recursos del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
Sin embargo, el gobierno mexicano informó que los trabajadores afiliados al IMSS y al ISSSTE no han perdido su derecho de exigir la devolución de sus cuentas de afore abandonadas por más de 10 años.
La medida fue aprobada en abril de este año por el Congreso de la Unión, generando polémica porque mientras quienes están a favor argumentan que la reforma protege los ahorros de los trabajadores del enriquecimiento de los bancos, hay quienes piensan que se trata de una expropiación de los recursos de los trabajadores para entregarlos a Hacienda.
Algunos senadores argumentan que la falta de información es el motivo por el cual los trabajadores no han reclamado su dinero, por lo que instaron al gobierno que, en vez de apropiarse de estos recursos privados, «mejor realice una campaña de orientación para que la gente reclame sus ahorros».
Por su parte, el gobierno mexicano ha dicho que esta medida da marcha atrás a las reformas «dañinas y neoliberales» de 1997 y 2007 que derivaron en el sistema actual de pensiones privadas.
«Es un complemento para que el trabajador al jubilarse reciba el 100% de su salario, así de sencillo de explicar, porque hicieron reformas en el periodo neoliberal para que el trabajador al jubilarse no recibiera su sueldo o su salario completo», expresó López Obrador este el 1 de julio en su conferencia matutina.
En la rueda de prensa, la titular de la Secretaría de Gobernación, Luisa María Alcalde, explicó que después de las reformas «neoliberales» al sistema de pensiones los trabajadores recibían poco menos del 30% de su salario. Dijo que antes de esas reformas los trabajadores recibían el 100% de su salario.
«Vamos a hacer entrega de los primeros complementos del Fondo de Pensiones para el Bienestar, ya una realidad en nuestro país, esta reforma importantísima que pretende eliminar estos efectos negativos que tuvieron las reformas neoliberales que nos llevaron a pensiones muy bajas», señaló Alcalde.
No obstante, la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) ha expresado su preocupación «por la centralización de recursos que les pertenecen a los trabajadores en un fondo en control del gobierno federal».
Además, la COPARMEX alertó que el sistema pone en riesgo la transparencia sobre el uso y destino de los recursos del fondo. Y señaló que existe un precedente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que establece que los recursos de la subcuenta de vivienda del Infonavit no pueden mezclarse con los recursos para el pago de pensiones.
Siga a Eduardo Tzompa en X: @JEduardoTzompa
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
