El representante John Moolenaar (republicano de Michigan), presidente del Comité Selecto de la Cámara de Representantes sobre el Partido Comunista Chino, y el representante Raja Krishnamoorthi (demócrata de Illinois), miembro de mayor rango, enviaron una carta a los directores ejecutivos de Verizon, AT&T y Lumen Technologies el 10 de octubre. Buscan respuestas después de que se informara que un grupo vinculado al Partido Comunista Chino (PCCh) había hackeado a estas empresas.
El Wall Street Journal fue el primero en informar sobre el hackeo, revelando que varias empresas de telecomunicaciones, incluidas las tres mencionadas, fueron víctimas de un ciberataque respaldado por el PCCh. Los hackers tuvieron acceso a las redes durante meses o más.
«Las implicaciones de una violación de esta naturaleza serían difíciles de exagerar», escribieron los legisladores en la carta.
Señalaron que el comité había celebrado anteriormente una audiencia que destacó la amenaza de «Volt Typhoon», una campaña de hackeo respaldada por el PCCh que logró comprometer infraestructuras críticas de Estados Unidos. Esta nueva campaña es, al parecer, un esfuerzo de «Salt Typhoon», una unidad independiente estrechamente vinculada a la agencia de espionaje del PCCh.
Según los artículos del Wall Street Journal, los atacantes accedieron a redes con información sobre delincuencia y seguridad nacional. Habrían tenido acceso a los datos de las comunicaciones de millones de estadounidenses a través de estos proveedores de servicios de Internet.
«En conjunto… está claro que nos enfrentamos a un ciberadversario como nunca antes habíamos afrontado, y debemos mejorar urgentemente el enfoque de nuestra nación en materia de ciberseguridad», afirma la carta de los legisladores.
Los legisladores solicitan una reunión informativa a puerta cerrada con representantes de cada empresa para conocer el alcance del ciberataque, las contramedidas adoptadas y lo que aún es necesario.
Señalan que la amenaza a la ciberseguridad del PCCh es un desafío que «ni el sector público ni el privado pueden afrontar solos». Solicitan cooperación mutua y piden a las empresas que compartan cómo puede ayudar el gobierno federal.
En una charla pronunciada el 6 de octubre, el Director General de la Agencia de Seguridad Nacional, Timothy Haugh, dijo que mientras los objetivos estadounidenses de estos ciberataques suelen ser empresas privadas individuales, el PCCh está utilizando todo su aparato estatal para ir tras estos objetivos individuales.
«El alcance y la sofisticación con la que el PCCh continúa aumentando sus capacidades y extendiendo su alcance global solo es comparable a la escala y velocidad con la que actúa», dijo Haugh en la conferencia organizada por Cipher Brief.
Sin embargo, expresó confianza en la capacidad de Estados Unidos para contrarrestar la amenaza porque ha visto una cooperación voluntaria entre los sectores público y privado. Señaló que los avances tecnológicos del sector privado son una ventaja clave que Estados Unidos tiene sobre el PCCh, que sofoca a sus innovadores.
«Verdaderamente, la industria crea el dominio cibernético. Y es la industria la que repercutirá más directamente en nuestra capacidad colectiva para defender los intereses de Estados Unidos y los de nuestros aliados», dijo. «El valor que damos a la libertad de pensamiento nos permite innovar y asociarnos rápidamente, contradiciendo la mentalidad [del PCCh] de control centralizado».
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