Un grupo de base ha organizado un convoy hacia la frontera sur, donde celebrará varias concentraciones para instar al gobierno de Biden a asegurar la frontera.
El convoy, denominado «Recuperemos nuestra frontera», comenzará el 29 de enero en Virginia Beach (Virginia) y llegará hasta San Ysidro (California). El acto concluirá con concentraciones en Texas, Arizona y California el 3 de febrero.
«Nosotros, el pueblo, estamos uniendo a todos los ciudadanos preocupados que residen en los Estados Unidos de América y que tienen el derecho de la Primera Enmienda a reunirse y protestar pacíficamente», escribieron en un comunicado de prensa los organizadores de Take Our Border Back.
La organizadora Noél Roberts, de Arizona, declaró a The Epoch Times que el grupo ha estado trabajando con las comunidades y las fuerzas del orden a lo largo de la ruta para garantizar la seguridad de los participantes en el convoy y de otras personas que asistan a las concentraciones.
Roberts dijo que había habido informes falsos de que el convoy planea alinearse a lo largo de la frontera y enfrentarse a los inmigrantes ilegales que intentan cruzar a Estados Unidos.
«En primer lugar, no vamos a estar en la línea de la frontera», dijo, añadiendo que los participantes no se comprometerían con nadie que esté cruzando ilegalmente al país». Respetamos profundamente [el cumplimiento de la ley] y nunca lo infringiremos».
Roberts dijo que quieren unirse a sus compatriotas para enviar un mensaje al gobierno federal de que es hora de asegurar la frontera y detener las drogas, el tráfico de personas y otros delitos que están perjudicando a las comunidades de todo el país.
También aclaró que el convoy no estaría compuesto únicamente por camioneros que conducen grandes camiones, como informaron otros medios de comunicación.
«Se trata de un convoy totalmente estadounidense: camiones, coches, bicicletas, familias… se trata simplemente de gente que se va a reunir el día 3 [de febrero]», declaró. «Intentamos unir a la gente que tiene miedo de salir de casa y hacer oír su voz».
El congresista Keith Self ( R-Texas), que dijo que tiene previsto hablar en la manifestación de Eagle Pass, Texas, cree que el evento dará a la gente una oportunidad «pacífica» de expresar su descontento con las políticas fronterizas del gobierno federal.
«Esta gente [los organizadores] está comprometida con una manifestación pacífica [para mostrar] que ya hemos tenido suficiente», dijo Self en una entrevista que publicó en X, antes Twitter. «El pueblo estadounidense está harto. Exigimos que el gobierno de Biden haga su trabajo, aplique las leyes vigentes y proteja la frontera».
«Este es el momento para que nos levantemos como pueblo estadounidense y exijamos que nuestro presidente haga su trabajo», continuó. «Este debería ser un movimiento pacífico del pueblo estadounidense».
Según Roberts, el acto fue impulsado por un grupo de amigos que recientemente recorrieron la frontera sur.
«Decidieron organizar algo para ayudar a poner de relieve los problemas que todos sabemos que existen por vivir en los estados del sur», explicó.
En el momento de publicar este artículo, el grupo ya había recaudado más de 55,000 dólares en GiveSendGo, un sitio web de recaudación de fondos.
Roberts dijo que los fondos se utilizarían para pagar el alquiler de locales, escenarios, equipos de sonido y otros elementos necesarios para organizar el evento.
Entrar legalmente
Roberts, estadounidense de primera generación, dijo que apoya la inmigración cuando se hace legalmente.
» Solo queremos que entren legalmente, no detenerlos permanentemente», dijo Roberts. «Soy una [estadounidense] de primera generación, hija de un inmigrante de Siria. Esto es personal para mí.
«Mi padre vino legalmente y sus ocho hermanos también. Todos tenían trabajo el día que llegaron a Estados Unidos», explicó. «Les patrocinaron. Pasaron por inmigración. … Consiguieron la nacionalidad… así que sé que se puede».
Roberts añadió que el objetivo de los organizadores es «unir nuestras voces» para que los funcionarios electos escuchen a quienes les pusieron en el cargo para asegurar y proteger la frontera.
Sentencia de la Corte Suprema
A principios de esta semana, la Corte Suprema de EE.UU., en una decisión de 5-4, falló a favor de la administración de Biden para permitir a los agentes federales cortar el alambre de púas que Texas instaló a lo largo de la frontera en un intento de frenar los cruces ilegales.
El enfrentamiento entre el estado de Texas y la administración Biden se ha intensificado, ya que el gobernador de Texas, Greg Abbott, se ha negado a dar marcha atrás a pesar de la sentencia del 22 de enero de la Corte Suprema.
«Estamos añadiendo más alambre de púas mientras hablamos ahora mismo para asegurarnos de que estamos haciendo aún más para asegurar la frontera», dijo Abbott durante una entrevista el jueves con Bloomberg TV.
El miércoles, el gobernador republicano emitió un comunicado sobre el «derecho constitucional del estado a defender y proteger» su frontera.
«El Poder Ejecutivo de los Estados Unidos tiene el deber constitucional de hacer cumplir las leyes federales que protegen a los Estados, incluidas las leyes de inmigración en los libros en este momento», dice la declaración. «El presidente Biden se ha negado a hacer cumplir esas leyes e incluso las ha violado. El resultado es que ha batido récords de inmigración ilegal».
El comunicado acusa al presidente de violar su «juramento de ejecutar fielmente las leyes de inmigración promulgadas por el Congreso.»
Desde que el presidente Biden asumió el cargo en 2021, «más de seis millones de inmigrantes ilegales han cruzado nuestra frontera sur», escribió Abbott.
La semana pasada, más de una docena de demócratas cruzaron las líneas del partido y votaron con los republicanos pidiendo a la administración de Biden que haga cumplir las leyes de inmigración.
«La mayoría de nosotros entendemos que las naciones necesitan fronteras, que esas fronteras deben ser seguras y que debemos hacer cumplir las leyes de inmigración en los libros», dijo el congresista Jared Goldman (D-Maine), que fue uno de los 14 demócratas que votaron a favor de la resolución liderada por el Partido Republicano, informó The Hill. «La mayoría de nosotros también entendemos que quienes buscan entrar en nuestro país merecen un proceso de inmigración ordenado y predecible. Ahora mismo, tenemos problemas en ambos frentes».
«La inmigración ilegal amenaza nuestra seguridad nacional y socava los empleos estadounidenses», continuó Golden. «Es hora de que el Congreso y la administración Biden se unan para aprobar una legislación que aborde de forma significativa los problemas en la frontera. Debería ser una prioridad máxima en Washington, como lo es en la mayor parte de Estados Unidos.»
Quienes deseen participar en el convoy Take Our Border Back pueden encontrar más detalles, incluidos mapas de ruta, en el sitio web del grupo, takeourborderback.com, y en diversas plataformas de medios sociales
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