La administración del presidente Joe Biden no tenía la autoridad para imponer un mandato de vacunación contra el COVID-19 a los trabajadores y voluntarios en un programa federal de cuidado infantil, dictaminó un juez estadounidense.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) obligó a los trabajadores de Head Start y a algunos voluntarios a vacunarse contra el COVID-19 a partir de principios de 2022. Head Start brinda cuidado infantil a niños de familias de bajos ingresos.
HHS citó la Ley de Head Start, que dice que el secretario de salud puede agregar «normas de gestión administrativa y financiera», «normas relacionadas con la condición y ubicación de las instalaciones (incluidas las normas de evaluación de la calidad del aire interior, cuando corresponda)» y «otras normas que el secretario considere apropiadas”.
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, argumentó que el mandato estaba fuera del poder otorgado por la ley. La ley “no menciona vacunas”, dijeron él y otros demandantes en un escrito.
El juez federal de distrito, James Wesley Hendrix, estuvo de acuerdo.
“La sabiduría de la norma de Head Start no está ante el Tribunal, sólo su legalidad. Si el pueblo, a través del Congreso, desea imponer un mandato de vacunación a los programas Head Start, puede hacerlo aprobando una ley. Pero una agencia solo puede hacer lo que el Congreso le autoriza», dijo Hendrix, un juez designado por Trump, en su fallo.
“Independientemente de cuán bien intencionado sea, el intento del HHS aquí de calzar el mandato de la vacuna en un lenguaje legal que autorice la modificación de los estándares administrativos, financieros y de gestión de las instalaciones de Head Start va demasiado lejos. Igualmente, fatal para la regla es la decisión de la agencia de implementarla sin el aviso público y los comentarios necesarios, la consulta con las partes interesadas y una explicación razonable”, agregó.
El fallo anula el mandato, que la administración de Biden se había negado a rescindir. El mandato ya había sido anulado en 24 estados, según un fallo de 2022 emitido por otro juez.
El HHS y el Departamento de Justicia de EE.UU. no respondieron a las solicitudes de comentarios de The Epoch Times.
“Me enorgullece anunciar que el intento de la Administración Biden de utilizar el programa Head Start para enmascarar a los niños pequeños y obligar a que el personal y los voluntarios se vacunen ahora ha sido derrotado de forma permanente”, dijo el fiscal general de Texas, Ken Paxton, republicano y uno de los demandantes, en una declaración enviada por correo electrónico a The Epoch Times.
“He trabajado incansablemente para poner fin a las preocupantes políticas de tiranía médica de Biden, especialmente sus intentos de imponer intervenciones draconianas a nuestros niños, así como sus esfuerzos por castigar a los estadounidenses que no cumplen con sus tratamientos médicos preferidos, muchos de los cuales son arbitrarios e ineficaces e injustificados por la evidencia científica”, agregó Paxton.
En sus escritos ante el tribunal, los demandados habían instado al juez a no bloquear el mandato.
Señalaron en parte un fallo anterior de la Corte Suprema que confirmó el mandato del HHS para los trabajadores de la salud que decía que las «circunstancias sin precedentes» de la pandemia de COVID-19 «no proporcionan motivos para limitar el ejercicio de las autoridades que la agencia ha reconocido desde hace mucho tiempo”. “El secretario de salud, dijeron, “ha emitido durante mucho tiempo estándares de Head Start que abordan las amenazas de salud más apremiantes de la época”, y el mandato se emitió para proteger a los participantes de Head Start al “minimizar el riesgo de brotes de COVID-19 en las aulas”.
Las vacunas contra el COVID-19 no previenen la transmisión ni la infección, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU., aunque los datos de observación han indicado que tienen un efecto pequeño en la transmisión y la infección que podría volverse negativo con el tiempo.
La Asociación Nacional de Head Start, una organización sin fines de lucro, acogió con beneplácito el fallo del juez.
“Confiamos plenamente en que esta decisión permitirá que los programas, por fin, recuperen su autonomía local, que es la base de lo que hacen mejor: Servir a los niños y las familias de una manera segura, saludable e impulsada por la comunidad”, dijo Yasmina Vinci, directora ejecutiva del grupo, en un comunicado.
Head Start rescindió previamente su mandato de mascarillas después de meses de cabildeo de la organización sin fines de lucro y otros. Head Start había impuesto el uso de mascarillas a niños, trabajadores y voluntarios.
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