El 12 de agosto, la Corte Suprema de Hong Kong rechazó un recurso para anular la condena de siete destacados activistas prodemocráticos, entre ellos el magnate de los medios de comunicación Jimmy Lai, por su participación en las protestas de 2019.
Lai, de 76 años, fundador del desaparecido periódico liberal Apple Daily; Martin Lee, de 86 años, presidente fundador del Partido Democrático de Hong Kong; y otros cinco activistas fueron condenados en 2021 por su participación en una asamblea ilegal en agosto de 2019, cuando casi dos millones de personas se manifestaron en las calles.
Una corte de primera instancia anuló el año pasado sus condenas por organizar la concentración, aunque las mantuvo por participar en ella.
Los acusados alegaron que el juez de primera instancia debió realizar una evaluación de la «proporcionalidad operativa» para determinar si su condena era proporcional a la protección de los derechos humanos.
Ese principio se establece en dos decisiones no vinculantes de la Corte Suprema británica. Los acusados también argumentaron que el juez debió tener en cuenta que «la procesión no descendió a la violencia».
Un panel de cinco jueces de la corte de apelación final rechazó por unanimidad el 12 de agosto el argumento de los demandados, dictaminando que su proposición era «insostenible» y «no estaba respaldada por autoridad legal».
El presidente de la Corte Suprema, Andrew Cheung, y el Juez Roberto Ribeiro afirmaron en la sentencia principal que las decisiones de la corte británica no deberían seguirse en Hong Kong debido a los diferentes marcos jurídicos de ambas jurisdicciones.
«Es contrario a todos los principios establecidos que rigen los recursos de inconstitucionalidad en Hong Kong y especialmente contraria a los principios aceptados para evaluar la proporcionalidad», dice la sentencia.
«Una investigación de proporcionalidad separada en relación con la detención, el enjuiciamiento, la condena y la sentencia es inapropiada e improcedente».
Las protestas prodemocráticas de 2019 fueron espoleadas por el endurecimiento por parte de Beijing de las amplias libertades prometidas a Hong Kong tras su retorno al poder chino en 1997. Sumieron a la ciudad semiautónoma en su mayor crisis desde el traspaso.
Los otros acusados son Margaret Ng, de 73 años; Lee Cheuk-yan, de 64; Albert Ho, de 69; Leung Kwok-hung, de 65; y Ho Chun-yan, de 66.
Lai, ciudadano británico, lleva recluido en régimen de aislamiento desde diciembre de 2020. Cumple una condena de cinco años y nueve meses por un cargo de violación de un contrato de arrendamiento de la sede del periódico.
Tras las protestas, Beijing impuso una amplia ley de seguridad nacional que castiga lo que el Partido Comunista Chino (PCCh) define en términos generales como secesión, subversión, terrorismo y connivencia con fuerzas extranjeras. El castigo puede incluir la cadena perpetua.
La ley de seguridad nacional del PCCh ha sido condenada por gobiernos democráticos de todo el mundo y por grupos de derechos humanos como una herramienta para aplastar la disidencia en la ciudad semiautónoma.
Con información de Reuters.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
