Opinión
Se estima que 20 millones de estadounidenses son adictos a las drogas. Solo el fentanilo representó dos tercios de las 110,236 muertes por sobredosis y mató a más de 73,000 estadounidenses solo en 2021. El fentanilo es ahora el principal narcótico que los cárteles mexicanos están contrabandeando a Estados Unidos.
El flujo de drogas ilegales a través de la frontera sur es la mayor amenaza a la seguridad de nuestra nación y la que menos está abordando la administración Biden.
Se están incautando más drogas en la frontera sur que en cualquier otro lugar del país, con más de 5000 libras incautadas solo en San Diego. La DEA informa que los cárteles mexicanos importan cada vez más precursores químicos de China y fabrican fentanilo para venderlo en Estados Unidos.
El fiscal federal Randy Grossman describió la situación con el fentanilo como una “crisis nacional” en un informe de agosto de 2022. “La cantidad de fentanilo que estamos incautando en la frontera es asombrosa. La cantidad de convulsiones y muertes relacionadas con el fentanilo en nuestro distrito no tiene precedentes”.
Según la Agencia de Control de Drogas, se incautaron 10,000 libras de polvo de fentanilo en 2022. Además, la DEA incautó casi 131,000 libras de metanfetamina, más de 4300 libras de heroína y 444,000 libras de cocaína.
Aunque los cárteles mexicanos de la droga ahora ganan más dinero con el fentanilo que con otras drogas, también ganan mucho con el tráfico de personas. Las políticas de fronteras abiertas de la era Biden han permitido a los cárteles introducir personas de contrabando en Estados Unidos en mayor número. Según algunas estimaciones, los cárteles ganan hasta USD 13,000 millones por año a través del tráfico de personas y utilizan este dinero para contratar más militantes en sus operaciones de narcotráfico. En abril de 2022, el Departamento de Seguridad Nacional lanzó la campaña “Contra el Contrabando de Personas”, cuyo financiamiento por valor de USD 60 millones es una pequeña fracción de lo que ganan los cárteles.
El año 2021 mostró un marcado aumento en la violencia de los cárteles. Los ataques contra civiles inocentes son cada vez más comunes. Durante los últimos seis años, aproximadamente 140,000 mexicanos han sido asesinados en gran parte por carteles, y la situación está empeorando. En Celaya, una de las ciudades más peligrosas de México, hubo 800 homicidios en 2020, un fuerte aumento ante los 80 homicidios reportados en 2010. En 2021, los homicidios se redujeron a 640 casos, pero hubo cientos que desaparecieron. El número real de muertos puede ser mucho mayor. Cuanta más violencia de los cárteles hay en América Latina, más personas inocentes mueren y más personas quieren huir a Estados Unidos, lo que agrava el problema.
El senador republicano de Texas, John Cornyn, presentó la Ley de Defensa del DHS contra los Túneles Transfronterizos Ilícitos para combatir los 230 túneles debajo de la frontera entre EE.UU. y México utilizados por los cárteles de la droga y los traficantes de personas. El proyecto de ley aún no se ha convertido en ley mientras los gobernadores de los estados fronterizos sienten la tensión de una avalancha de extranjeros ilegales y drogas. El gobernador demócrata de California, Gavin Newsom, criticó las políticas fronterizas del presidente Joe Biden, advirtiendo que una crisis migratoria podría resquebrajar su estado si Biden permite que expire el Título 42. El gobernador de Texas, Greg Abbott, coincidió, diciendo que, si el Título 42 expirara, la frontera sur sería un escenario de «caos total”.
Ambos gobernadores recibieron un regalo de Navidad anticipado cuando la Corte Suprema extendió temporalmente las restricciones de inmigración. Un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional respondió diciendo que con el Título 42 en vigor, aquellos que intenten ingresar ilegalmente al país serán devueltos a México. También pidió al Congreso que aumente los fondos para la seguridad fronteriza.
El gobernador del estado que parece estar adoptando una postura más proactiva frente a la inmigración ilegal y la delincuencia relacionada es el gobernador Abbott, que inauguró la Operación Lone Star (Estrella Solitaria). Esta operación es un esfuerzo coordinado entre el Departamento de Seguridad Pública y la Guardia Nacional de Texas para asegurar la frontera. El objetivo es detener a los cárteles, los delincuentes, el contrabando de drogas y armas y el tráfico de personas. Hasta ahora, la Operación Lone Star ha llevado a la aprehensión de 336,000 extranjeros ilegales y 23,000 arrestos, de los cuales 20,000 fueron arrestos por delitos graves. En 2022, el DPS incautó más de 354 millones de dosis de fentanilo.
Pew Research descubrió que los republicanos apoyan la seguridad fronteriza y la deportación de inmigrantes ilegales. En contraste, los demócratas están más preocupados por crear caminos para que aquellos que están en el país ilegalmente logren un estatus legal. El tráfico de drogas y personas no será detenido por programas diseñados para ayudar a los extranjeros ilegales a obtener permisos de trabajo y tarjetas de residencia. En todo caso, esto invitará a más inmigración ilegal. Por el momento, el Título 42 permanecerá vigente, aunque Biden creía que el Título 42 de alguna manera empeora la situación fronteriza. La Corte Suprema comenzará las audiencias sobre la derogación del Título 42 el 1 de marzo.
Si bien el Título 42 permanece vigente y brinda cierta protección contra la inmigración ilegal, mientras la inmigración ilegal sea posible, los cárteles continuarán ganando dinero contrabandeando drogas y personas a Estados Unidos. Luego, las ganancias se utilizan para comprar armas y militantes, lo que hace que más personas inocentes en México y América Latina sufran y mueran.
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Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times
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