Una abogada del expresidente Donald Trump predijo que “casi nada” se divulgará si se revela al público una versión que no esté completamente desclasificada de la declaración jurada del Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) para la redada del FBI en Mar-a-Lago.
Un juez del caso, Bruce Reinhart, ordenó al Departamento de Justicia que presente su declaración jurada, que se utilizó para solicitar la orden de registro del FBI en la propiedad de Trump la semana pasada, con las partes tapadas propuestas. Reinhart dijo que entonces revisaría estás partes tachadas propuestas antes de decidir si hacer público el documento.
En declaraciones a Newsmax, la abogada de Trump, Christina Bobb, dijo que «en el mejor de los casos, no obtenemos casi nada. En el peor, obtenemos una versión con muchas partes no desclasificadas».
«El Departamento de Justicia se siente cómodo filtrando piezas muy selectas de información que hacen parecer que tienen algo más de lo que realmente tienen, así que no espero que aparezca mucho de esto», dijo Bobb.
La audiencia con Reinhart tuvo lugar después de que los medios de comunicación presentaran demandas para acceder a la declaración jurada. Trump y los republicanos han pedido que se publique, mientras que un portavoz del expresidente dijo el jueves que el documento debería publicarse íntegro.
En la audiencia del jueves también se presentaron argumentos por parte de abogados y funcionarios del DOJ. El principal funcionario de contrainteligencia de la agencia, Jay Bratt, dijo que la desclasificación de la declaración jurada podría poner en peligro la investigación del FBI y evitar que futuros testigos proporcionen información al gobierno.
Una orden judicial y un recibo de lo incautado que fue revelado por Reinhart hace una semana mostraron que los agentes del FBI se llevaron 11 cajas de materiales que contenían información presuntamente clasificada. Trump y sus abogados han dicho que cuando era presidente, emitió órdenes para desclasificar materiales, incluyendo documentos relacionados con el caso Crossfire Hurricane del FBI.
«No está sujeto a los mismos procedimientos de desclasificación que otros empleados del gobierno, así que no hay nada ahí. No hay ningún delito aquí», dijo Bobb el viernes. «Incluso lo que han alegado en la orden de detención y lo que sabes, lo que ponen en los documentos de ayer, no hay nada allí, así que no veo que se produzca una acusación”.
El Departamento de Justicia no ha dado detalles sobre lo que los agentes del FBI estaban buscando en la residencia de Trump. La naturaleza de la investigación tampoco ha sido revelada públicamente, aunque Bratt dijo el jueves que la investigación de la agencia tiene «matices de seguridad nacional».
El viernes, Bobb, que estaba en Mar-a-Lago durante la redada, también cuestionó el momento del registro del FBI. Fue Trump el 8 de agosto quien anunció la búsqueda en su plataforma Truth Social.
«Sinceramente, creo que estaban tratando de mantenerlo en secreto», dijo Bobb al medio. «Esa es la forma en que actuaban cuando estaban allí. Habíamos mantenido la citación del gran jurado en silencio, así que honestamente creo que pensaron que podrían pasar a la fuerza y no rendir cuentas en absoluto».
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