Durante la noche del 10 al 11 de julio, fuertes lluvias azotaron New England, Estados Unidos, causando masivas inundaciones que originaron el envío de equipos de búsqueda y rescate a toda prisa para llegar a los residentes y comunidades que se encontraban varadas.
Un embalse de Vermont amenazó con desbordar una presa que protege la capital del estado y agravar las inundaciones «catastróficas» que ya cerraron las carreteras de salida de la ciudad y confinaron a los residentes en el interior de sus casas.
La presa de Wrightsville, que forma un embalse a 6.4 kilómetros al norte de Montpelier, se acercó a su capacidad y al punto en que su vertedero descargaría el agua en el North Branch, brazo norte del río Winooski, según las autoridades municipales.
Ello agravaría lo que el Servicio Meteorológico Nacional ha calificado de inundaciones «catastróficas» en el pintoresco distrito del centro de Montpelier, donde la gente navegaba en canoas por las calles sumergidas y las aguas llegaban a las ventanas de los negocios y a los techos de los vehículos.
Cerca de la sede del estado de Vermont, el North Branch confluye con el segundo y más ancho brazo del Winooski. El Servicio Meteorológico Nacional pronosticó que la inundación del centro de la ciudad persistiría hasta última hora de la tarde.
La mayor parte del noreste de Estados Unidos, incluidos sectores de Nueva York, Massachusetts y Connecticut, ya ha recibido hasta 20 centímetros de lluvia en los últimos días.
Funcionarios de Vermont describieron la inundación como la peor desde que el huracán Irene azotó el estado de Nueva Inglaterra en 2011 y causó aproximadamente 750 millones de dólares en daños y siete víctimas mortales.
Respuesta del Estado
En un comunicado de prensa del 11 de julio, el gobernador Phil Scott y funcionarios estatales proporcionaron una actualización sobre la respuesta del estado a las inundaciones. El Sr. Scott dijo que creía que en su estado los residentes se ayudarían mutuamente y serían capaz de unirse.
«No se equivoquen, la devastación y las inundaciones que estamos experimentando a través de Vermont son algo histórico y catastrófico», dijo el Sr. Scott. Aunque los próximos días, semanas y meses serán increíblemente difíciles, ya nos hemos enfrentado a retos con anterioridad, y los habitantes de Vermont se han levantado para afrontar el momento».
«Ya sea durante Irene, COVID u otras dificultades, los vermonenses han demostrado una y otra vez que estamos dispuestos y somos capaces de dar un paso adelante y ayudar a nuestros vecinos. A pesar de que el Sol puede brillar más tarde hoy y mañana, esperamos más lluvia a finales de esta semana, que no tendrá a dónde ir en el suelo sobresaturado».
«Quiero ser claro: no estamos fuera de peligro», dijo el gobernador. «Esto no está ni cerca de terminar, y en esta fase, nuestro enfoque principal sigue siendo la vida y la seguridad antes de que podamos pasar a una fase de recuperación».
El senador Bernie Sanders (I-Vt.) emitió un día antes una declaración incluyendo un enlace a los recursos, agradeciendo a los que están trabajando para ayudar a los residentes anegados.
«Un agradecimiento especial a los equipos de carreteras y todos los trabajadores de emergencia que están trabajando día y noche para proteger vidas y propiedades», dijo el senador.
«Ellos están haciendo un gran trabajo en circunstancias extremadamente difíciles. También quiero dar las gracias a los equipos que están en camino de toda nuestra región y de tan lejos como Carolina del Norte. También agradezco a la Guardia Nacional de Vermont, así como a las guardias nacionales de nuestros estados vecinos que están listas para ayudarnos si es necesario».
El senador Sanders advirtió a sus electores un día después en un posteo de Facebook que las inundaciones repentinas son «extremadamente peligrosas y podrían causar la pérdida de vidas humanas. Nunca intente caminar o conducir a través de las aguas de inundación, y familiarícese con las mejores rutas de evacuación de inundaciones».
Respuesta de emergencia
El presidente Joe Biden emitió una declaración de emergencia para cada uno de los 14 condados del estado de Vermond a primera hora del 11 de julio, y envió trabajadores de emergencia al área evacuada cuando la inundación se apoderó de ese sector.
“Esta mañana, mientras estaba en Vilnius, Lituania, el presidente Joseph R. Biden, Jr. declaró que existe una emergencia en el estado de Vermont y ordenó asistencia federal para complementar los esfuerzos de respuesta estatales y locales debido a las condiciones de emergencia en las áreas afectadas por las inundaciones que comenzaron el 9 de julio de 2023 y continúan”, dice la declaración de la Casa Blanca.
La acción del presidente permite que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) del Departamento de Seguridad Nacional coordine todos los esfuerzos de socorro en casos de desastre para aliviar las dificultades y el sufrimiento causados por la emergencia en la población local y brindar la asistencia adecuada para las medidas de emergencia requeridas, autorizadas bajo el Título V. de la Ley Stafford.
En particular, FEMA tiene el poder de encontrar, organizar y proporcionar, a su propia discreción, las herramientas y los recursos necesarios para ayudar a las personas a enfrentar la situación. El setenta y cinco por ciento del dinero para medidas de seguridad de emergencia provendrá del gobierno federal. Estas medidas se limitarán a la ayuda federal directa y el reembolso de la atención de tipo masiva, como ayudar a las personas a evacuar y encontrar vivienda.
William F. Roy de FEMA ha sido puesto a cargo de coordinar los esfuerzos federales de recuperación en los lugares afectados.
Con información de Reuters contribuyó a este informe.
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