La Administración Nacional de Archivos y Registros está reteniendo ilegalmente documentos que fueron desclasificados por el expresidente Donald Trump, según una nueva demanda.
Los archivos, o NARA, se han negado repetidamente a proporcionar los documentos que Trump desclasificó justo antes de dejar el cargo el 19 de enero de 2021.
Los documentos se relacionan con la investigación Crossfire Hurricane del FBI, una investigación de contrainteligencia que investigó supuestos vínculos entre Trump y actores rusos.
John Solomon, periodista, y Kash Patel, exfuncionario de la administración Trump, solicitaron los documentos a NARA en 2022 después de ser nombrados representantes de Trump ante NARA.
Gary Stern, un funcionario de NARA, dijo que los registros desclasificados habían sido enviados al Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) por un memorando del entonces jefe de personal de la Casa Blanca, Mark Meadows, quien ordenó el 20 de enero de 2021 al DOJ que revisara los materiales y que los publicara con tachaduras.
“Le pedí al DOJ que complete su revisión lo más rápido posible, para que todos podamos tener un conjunto de registros totalmente publicables”, dijo Stern en un mensaje el 17 de agosto de 2022.
NARA encontró una caja con alrededor de 2700 páginas, pero no pudo determinar el estado de clasificación de la caja y, por lo tanto, la trata como de alto secreto, dijo Stern en otro correo electrónico.
NARA está violando la Ley de Registros Presidenciales, que establece que los registros presidenciales de un expresidente “deberán estar disponibles para dicho expresidente o el representante designado del expresidente”, afirma la nueva demanda.
Los acusados del gobierno “se han apoderado indebidamente o están indebidamente en posesión de los documentos en cuestión o los retienen”, afirma la demanda.
Solomon presentó la demanda en un tribunal federal en Washington y le está pidiendo a la corte que le ordene al Departamento de Justicia que devuelva inmediatamente los registros a NARA y que le ordene a NARA que los entregue una vez recibidos.
“El presidente Trump desclasificó estos registros para que el público estadounidense pudiera ver por sí mismo los abusos y fallas del FBI durante el caso de colusión con Rusia. Pero en cada paso del proceso, el público se ha visto frustrado”, dijo Solomon en un comunicado. “Estos registros desclasificados son registros claros de la presidencia de Trump, tienen un valor histórico claro y el DOJ los ha ocultado erróneamente de los Archivos y de su empleador, el pueblo estadounidense, durante más de dos años”.
El DOJ no respondió a una solicitud de comentarios.
“No comentamos sobre asuntos en litigio”, le dijo un portavoz de NARA a The Epoch Times por correo electrónico.
Los correos electrónicos revelan detalles
Los correos electrónicos adjuntos a la denuncia mostraron que NARA se resistió repetidamente a los esfuerzos de Solomon y Patel, quien es un presentador de EpochTV, para acceder a los documentos desclasificados.
Trump designó a la pareja como sus representantes ante NARA el 19 de junio de 2022. Tres días después, Solomon solicitó la carpeta de documentos desclasificados.
Trump había dicho en su orden: “Por la presente desclasifico los materiales restantes en la carpeta”. Dijo que aceptó las tachaduras propuestas por el FBI y ordenó al fiscal general que implementara las tachaduras y devolviera las copias editadas a la Casa Blanca.
Meadows, en un memorando (pdf) al fiscal general al día siguiente, dijo que estaba enviando la mayor parte de la carpeta al DOJ con instrucciones para “realizar rápidamente una revisión de la Ley de Privacidad bajo los estándares que normalmente aplicaría el Departamento de Justicia, tachar el material de manera adecuada y publicar el material restante con las tachaduras impuestas”.
Los documentos seguían en poder del Departamento de Justicia, según declaró Stern a NARA el 23 de junio de 2022.
Debido a una demanda de Judicial Watch, el DOJ estaba realizando una revisión de desclasificación obligatoria, agregó, y recomendó a Solomon que tratara de obtener una copia de los documentos que el DOJ iba a publicar en el caso.
Patel cuestionó la base para retener los documentos. “¿Quién anuló y revocó una ejecución válida de desclasificación por parte del presidente Trump y con base en qué autoridad legal?”, se preguntó, y agregó más tarde: “No puede haber demoras ni motivos para enviarnos al Departamento de Justicia por estos documentos”.
Stern volvió a señalar el memorando de Meadows. Confirmó que la caja localizada por NARA contenía al menos algunos de los mismos documentos que están en la carpeta, pero dijo que el personal encontró algunos casos de documentos tachados de forma diferente y otros que carecían de la marca de desclasificación requerida.
Stern confirmó más tarde que la Casa Blanca retuvo copias de todos los documentos como registros presidenciales, pero “no de una manera fácilmente perceptible” y sin tachaduras, ya que siguió negándose a publicarlos.
“La evidencia es que el engaño de la colusión de Rusia fue perpetrado deliberada e intencionalmente por funcionarios de alto rango del FBI y del Departamento de Justicia para ayudar a Hillary Clinton a ganar las elecciones presidenciales de 2016. Este abuso de poder sin precedentes y la interferencia electoral es un escándalo tan monumental que reduce al Watergate a la insignificancia”, dijo en un comunicado Reed Rubinstein, abogado principal de America First Legal, quien representa a Solomon.
Agregó: “El expresidente Trump desclasificó los registros del FBI para hacer pública la verdad, pero la Administración Biden y los Archivos Nacionales ahora están haciendo todo lo que está a su alcance para mantener viva la mentira de Rusia al obstruir el acceso del Sr. Solomon a estos registros. Esta obstrucción no puede sostenerse: El pueblo estadounidense merece la verdad”.
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