Puede que quiera pensárselo dos veces antes de regalarle a su hijo una tablet o un teléfono móvil nuevo en esta temporada de fiestas, ya que la creciente investigación sugiere que el tiempo frente a una pantalla puede causar más daño que bien.
Los niños en edad preescolar pueden estar particularmente en riesgo, razón por la cual la Academia Americana de Pediatría (AAP) recomienda limitar el uso para los niños de 2 a 5 años de edad a solo una hora al día de «programación de alta calidad», y aún así verla con ellos para apoyarlos en el aprendizaje.
Observar más allá de esa cantidad podría tener efectos duraderos en la salud de su hijo, incluso perjudicar el desarrollo cerebral, según un estudio realizado por investigadores del Centro Médico del Hospital Infantil de Cincinnati. Aquellos con mayor tiempo de pantalla tenían «menor integridad microestructural» de materia blanca cerebral, un área relacionada con la función cognitiva y el lenguaje.
Exceso de tiempo frente a las pantallas cambia el cerebro de los niños en edad preescolar
En el estudio participaron 47 niños de entre 3 y 5 años de edad. ScreenQ se utilizó para medir el uso de la pantalla de acuerdo con las recomendaciones de AAP, teniendo en cuenta factores tales como el acceso a las pantallas, la frecuencia de uso, qué tipo de contenido se veía y si se producía una covisualización, es decir, si un adulto observaba junto con el niño y discutía el contenido.
Una puntuación más alta de ScreenQ se asoció con un mayor tiempo de pantalla. Luego se usaron resonancias magnéticas para evaluar los cerebros de los niños, revelando que más tiempo frente a una pantalla era dañino para la materia blanca del cerebro, particularmente en las zonas relacionadas con el lenguaje y las habilidades de alfabetización.
«Aunque aún no podemos determinar si el tiempo frente a una pantalla causa estos cambios estructurales o implica riesgos a largo plazo para el desarrollo neurológico, estos hallazgos ameritan más estudios para entender lo que significan y cómo establecer límites adecuados en el uso de la tecnología», señaló en un comunicado de prensa el Dr. John Hutton, director del Centro de Lectura y Alfabetización del Centro de Descubrimiento de Cincinnati Children’s y autor principal del estudio.
Varios estudios recientes han puesto de relieve los riesgos de que los niños preescolares pasen demasiado tiempo frente a las pantallas. Un estudio canadiense sugirió que los niños en edad preescolar pasan un promedio de dos horas usando pantallas diariamente, y que aquellos que gastaron más de esa cantidad tenían un riesgo 7.7 veces mayor de cumplir con los criterios del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).
Entre los niños de 18 meses, aquellos a los que se les permitió ver los medios de comunicación en dispositivos móviles eran más propensos a tener retrasos en el lenguaje expresivo, y cada 30 minutos adicionales de tiempo de exposición se asociaba con mayores probabilidades de tener un retraso en el lenguaje. AAP recomienda que los niños menores de 18-24 meses eviten los medios digitales, excepto el video chat.
Limite o evite el tiempo frente a las pantallas por la salud de los niños
Los investigadores apenas están empezando a entender las muchas maneras en que el tiempo frente a una pantalla interfiere con la salud humana. Más allá del cerebro, mirar las pantallas es perjudicial para la vista y conlleva los riesgos de la exposición a los campos electromagnéticos (CEM), la radiación Wi-Fi y otras amenazas de la exposición a los teléfonos móviles.
También esta el hecho de que la mayor parte del tiempo frente a una pantalla ocurre mientras se esta sentado, lo que reduce la actividad física y aumenta los riesgos de un tiempo prolongado de asiento, un riesgo para la salud en sí mismo.
No hay necesidad de esperar a una investigación más definitiva antes de tomar medidas para proteger la salud de los niños. Use las pautas de AAP para el tiempo frente a la pantalla como máximo, y reduzca aún más el tiempo que su hijo pasa frente a la pantalla, incluyendo ver la televisión, tanto como sea posible, o elimínelo completamente, especialmente en sus primeros años de vida.
También es una buena idea establecer tiempos y actividades sin pantalla para su familia. Incluso cuando sus hijos entran en la adolescencia, asegúrese de que las horas de las comidas, la hora de acostarse y otras horas que usted designe estén libres de cualquier distracción digital.
Algunos entornos escolares, como Waldorf, excluyen toda la tecnología de sus aulas y del plan de estudios de sus alumnos. También fomentan las mismas normas para los niños en el hogar. Esto se está convirtiendo cada vez más en una opción saludable para los padres preocupados que están conscientes del creciente número de efectos adversos no deseados de las tecnologías asociadas a los CEM.
Para más información sobre los daños por CEM, visite la base de datos GreenMedInfo sobre Campos Electromagnéticos, que contiene más de 1,000 estudios que vinculan a los CEM con más de 140 efectos adversos diferentes para la salud.
El Grupo de Investigación de GMI se dedica a investigar los problemas de salud y ambientales más importantes del día. Se hará especial hincapié en la salud ambiental. Nuestra investigación enfocada y profunda explorará las muchas maneras en que la condición actual del cuerpo humano refleja directamente el verdadero estado del medio ambiente. Únase al boletín informativo gratuito de GreenMedInfo.com.
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