Un grupo de demócratas de la Cámara de Representantes solicitó el viernes USD 50 millones adicionales para el Programa de alimentos y refugio de emergencia (EFSP) de FEMA y con ellos hacer frente a la afluencia de inmigrantes ilegales en Washington, la ciudad de Nueva York y Chicago.
En medio de la solicitud de aumento de fondos, los representantes Jesús García (Ill.), Adriano Espaillat (N.Y.) y la delegada de D.C. Eleanor Holmes Norton dijeron que les queda casi el 60 por ciento del presupuesto del EFSP de USD 150 millones, de acuerdo a en una carta firmada por 23 demócratas de la Cámara.
Norton indicó que los demócratas solicitaron a los jefes del subcomité de Asignaciones de Seguridad Nacional que incluyan USD 50 millones adicionales en el presupuesto de 2023 para el Programa de alimentos y refugio de emergencia (EFSP) de FEMA.
“El EFSP proporciona fondos federales para alimentos, vivienda y otras necesidades. En el año fiscal 2022, el Congreso proporcionó USD 150 millones a este programa de asistencia humanitaria para los migrantes”, dice la carta (pdf).
“Para el 21 de julio de 2022, quedaban disponibles aproximadamente USD 85 millones de estos fondos. Sin embargo, el transporte de inmigrantes a D.C., la ciudad de Nueva York y Chicago y el reasentamiento en ciudades como Boston hizo que aumentaran las solicitudes de financiación en el noreste y el medio oeste. Sin financiación adicional, se puede agotar la financiación del Programa de alimentos y refugio de emergencia (EFSP)”.
Los demócratas apuntaron a los gobernadores republicanos de Texas y Arizona, Gregg Abbott y Doug Ducey, por sus programas que otorgan transporte de autobús a inmigrantes ilegales detenidos que solicitan asilo, llevándolos hacia las ciudades conocidas por sus políticas santuario, dirigidas por demócratas.
“Desde mediados de abril, los gobernadores de Texas y Arizona han explotado y perjudicado a aproximadamente 10,000 personas vulnerables que huyen de situaciones desesperadas y peligrosas de sus países de origen para obtener ganancias políticas al transportarlos en autobús a D.C., la ciudad de Nueva York y Chicago”, escribieron los demócratas en la carta.
Misión del gobernador de Texas Greg Abbott para asegurar la frontera
En respuesta al aumento de la inmigración ilegal, Abbott lanzó la Operación Lone Star en marzo del año pasado. El gobernador permanentemente ha citado las políticas de “frontera abierta” del presidente estadounidense Joe Biden para este aumento.
Para ayudar a las comunidades fronterizas de Texas a lidiar con la afluencia de inmigrantes ilegales, Abbott emitió en mayo una declaración de desastre en 48 condados, que permitió aumentar los recursos dirigidos a los programas que abordaban la crisis de inmigración en la frontera (pdf).
A fines de agosto, la Casa Blanca negó que los inmigrantes ilegales simplemente cruzaran caminando la frontera. Al respecto el teniente del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS), Chris Olivarez, dijo que “eso es completamente falso”.
“De hecho, ellos cruzan caminando”, dijo Olivarez a Newsmax el 2 de septiembre. “Ellos están cruzando caminando desde su país de origen, de donde vienen. Cuando llegan a México, están pagando a una organización criminal para que los introduzcan de contrabando a Estados Unidos, donde tienen que cruzar un río o (..) en los casos más graves, tienen que cruzar el desierto o un terreno montañoso, como en el oeste de Texas”.
Oliverez dijo que el número de inmigrantes ilegales se disparó a números “sin precedentes” a principios del año 2021, incluidos los menores no acompañados.
Bajo la Operación Lone Star, se ordenó a las fuerzas del orden público estatales que entrevisten a los menores no acompañados o a los niños que ingresan ilegalmente al país sin un adulto, para identificar a las víctimas de la trata de personas.
Desde abril, más de 7900 inmigrantes ilegales fueron transportados en autobús de Texas a D.C. y desde agosto, más de 2200 a la ciudad de Nueva York y 300 a Chicago, según la oficina de Abbott.
“La misión de transporte en autobús está brindando un alivio muy necesario a nuestras abrumadas comunidades fronterizas”, dijo el viernes la oficina del gobernador de Texas en una declaración.
A la División de Manejo de Emergencias de Texas le ha costado más de USD 12 millones transportar “migrantes procesados y liberados por el gobierno federal en las comunidades fronterizas de Texas”, dijo la agencia a El Paso Times.
Durante la Operación Lone Star, el Seguridad Pública de Texas y la Guardia Nacional de Texas detuvieron a 302,600 inmigrantes ilegales y realizaron más de 19,700 arrestos criminales, con más de 17,200 cargos por delitos graves informados, según la oficina del gobernador.
Las autoridades también incautaron más de 340.5 millones de dosis letales de fentanilo durante las misiones fronterizas, que “de otro modo habrían llegado a comunidades de todo Texas y del país debido a las políticas de frontera abierta del presidente Biden”.
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