La denunciante de Facebook Frances Haugen citó durante la audiencia del martes en el Senado la violencia étnica en Birmania y Etiopía como ejemplos del «impacto destructivo» que la plataforma de redes sociales ha tenido en la sociedad.
La exempleada de Facebook sugirió ante los legisladores que existe un vínculo entre la actividad de Facebook y la violencia en esas regiones. Los algoritmos de la plataforma de redes sociales facilitan el odio, dijo Haugen, y por tanto anteponen el beneficio a la seguridad de los usuarios.
«Mi temor es que, si no se actúa, los comportamientos divisivos y extremistas que vemos hoy son solo el principio. Lo que vimos en Myanmar [antigua Birmania] y ahora en Etiopía son los primeros capítulos de una historia tan aterradora que nadie quiere leer el final», dijo Haugen, exgerente de productos de Facebook, ante el Subcomité de Protección al Consumidor, Seguridad de los Productos y Seguridad de los Datos.
Los directivos de Facebook no respondieron inmediatamente a una solicitud de comentarios de The Epoch Times.
En 2018, varios empleados de Facebook dijeron que la empresa no había hecho lo suficiente para limitar la difusión de publicaciones que alimentan la violencia contra la minoría rohingya perseguida en Birmania, pero a principios de este año, la empresa se comprometió a frenar la difusión de información errónea tras el reciente derramamiento de sangre y el golpe militar en el país.
Haugen sugirió que para evitar la difusión viral de contenidos y desinformación, algo que, según ella, podría alimentar las acciones represivas en esos países, el Congreso podría introducir cambios en la Sección 230 de la Ley de Decencia en las Comunicaciones, que protege a las plataformas de internet de ser consideradas responsables de los contenidos publicados por terceros.
El cambio haría a Facebook «responsable de las consecuencias de sus decisiones de clasificación intencionadas», dijo.
«Aliento la reforma de estas plataformas, no escogiendo ideas individuales, sino haciendo que las ideas sean más seguras, menos crispadas, menos virales, porque así es como resolvemos estos problemas de forma escalable», dijo Haugen, criticando que la clasificación de la plataforma basada en el compromiso «literalmente aviva la violencia étnica» en países como Birmania y Etiopía.
«Facebook también sabe, lo han admitido en público, que la clasificación basada en el compromiso es peligrosa sin sistemas de integridad y seguridad, pero luego no ha desplegado esos sistemas de integridad y seguridad en la mayoría de los idiomas del mundo. Y eso es lo que está causando cosas como la violencia étnica en Etiopía», añadió.
En respuesta al testimonio de Haugen, Facebook sugirió que la credibilidad de Haugen estaba en tela de juicio, diciendo que era «una exgerente de producto de Facebook que trabajó para la compañía durante menos de dos años, no tenía informes directos, nunca asistió a una reunión de toma de decisiones con ejecutivos de nivel C».
«No estamos de acuerdo con su caracterización de los muchos temas sobre los que testificó. A pesar de ello, estamos de acuerdo en una cosa: es hora de empezar a crear normas estándar para internet», dijo Lena Pietsch, directora de comunicaciones políticas de Facebook.
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