El Departamento de Comercio acusó al mayor fabricante de cables de China, Far East Cable, de violar los controles de exportación destinados a impedir el envío de equipos a Irán.
En una carta de acusación (archivo) emitida el 29 de julio, el departamento dijo que Far East Cable cometió 18 violaciones de los controles de exportación de Estados Unidos entre 2014 y 2016. Durante ese tiempo, el departamento alegó que Far East Cable celebró un acuerdo para suministrar equipos de la china ZTE a empresas iraníes, eludiendo efectivamente las restricciones a la exportación contra ZTE.
«Como se alega, Far East Cable actuó como una pantalla para ZTE, facilitando los envíos de ZTE a Irán en el mismo momento en que ZTE sabía que estaba bajo investigación por exactamente la misma conducta», dijo el director de la Oficina de Aplicación de Exportaciones, John Sonderman, en una declaración del 8 de agosto (pdf).
«Far East Cable incurrió en una conducta grave como parte del intento de ocultar la actividad a los investigadores estadounidenses. Estos cargos deberían enviar un mensaje contundente a cualquier empresa que contemple facilitar las violaciones en nombre de otra».
Los cargos se desarrollaron a partir de una investigación abierta sobre ZTE, una empresa china de equipos de telecomunicaciones, en 2012. ZTE llegó finalmente a una serie de acuerdos con el departamento en 2017, admitiendo haber violado las normas de control de exportaciones de Estados Unidos y las sanciones a Irán.
Durante esa investigación, en 2014, el departamento alegó que Far East Cable recogió los contratos de ZTE y pasó a actuar como intermediario entregando tecnologías estadounidenses a Irán y confundiendo sobre el papel de ZTE en las transacciones.
Far East Cable tenía contratos con la Compañía de Telecomunicaciones de Irán y a Khadamate Ertebati Rightel, otra empresa iraní, según la carta.
Ambas empresas eran clientes de ZTE. Ambas empresas también suspendieron los envíos de artículos procedentes de Estados Unidos a Irán en 2012. Al año siguiente, sin embargo, ZTE hizo planes para reanudar los envíos a Irán a través de Far East Cable, decía la carta.
ZTE pagó una multa de 892 millones de dólares en 2017 y se declaró culpable de enviar productos estadounidenses a Irán en violación de las leyes que restringen la venta de tecnología de fabricación estadounidense. También admitió haber obstruido a la justicia tras ser descubierta en un elaborado plan para enmascarar sus vínculos comerciales ilícitos con Irán.
A ZTE se le permitió seguir comprando bienes y tecnología estadounidenses hasta 2018, cuando fue descubierta mintiendo sobre la aplicación de medidas disciplinarias a los empleados vinculados a las infracciones originales. Esta prohibición se levantó posteriormente cuando la empresa aceptó sustituir a sus altos directivos, pagar una multa adicional y establecer procedimientos internos de cumplimiento.
Los cargos fueron presentados por la Oficina de Industria y Seguridad del Departamento, que dirige los esfuerzos para evitar que los adversarios extranjeros obtengan tecnologías estadounidenses sensibles.
«Esta acción refleja el compromiso del Departamento de Comercio de hacer cumplir nuestras leyes enérgicamente contra quienes participan en un esquema para disfrazar las verdaderas partes de una transacción», dijo el subsecretario de Comercio Matthew Axelrod.
«No tenemos tolerancia con las empresas que subvierten nuestras normas, ya sea en su propio nombre o en el de otros».
Con información de Reuters.
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