El Departamento de Estado de EE.UU. advirtió el jueves a los estadounidenses que no viajaran al estado de Sinaloa, México, tras las noticias de violencia desatada por los cárteles a raíz de la detención de Ovidio Guzmán López, hijo del narcotraficante mexicano «El Chapo» Guzmán.
El vocero del Departamento de Estado, Ned Price, en una conferencia de prensa, aconsejó a los estadounidenses que no vayan a Sinaloa, sede del cártel de drogas sinaloense. Joaquín “El Chapo” Guzmán fue arrestado y extraditado a Estados Unidos hace varios años y ahora está encarcelado en una prisión federal de máxima seguridad en Colorado.
“Ha habido noticias de disparos, bloqueos de carreteras e incendios en las ciudades de Culiacán, Los Mochis, Guasave en Sinaloa, México”, dijo Price a los periodistas. «La Embajada en la Ciudad de México posteó una alerta a los ciudadanos de estados unidos hoy advirtiendo que el gobernador de Sinaloa ha pedido a la gente que se mantenga en resguardo”, agregó.
El Departamento de Estado continúa recomendando a los ciudadanos estadounidenses en Sinaloa “permanecer alertas ante la posible violencia en todo el estado”, agregó Price, “y reiteramos nuestra advertencia de viaje” a Sinaloa, que continúa en “nivel 4”.
“Aconsejamos a los estadounidenses que no viajen a Ѕіnаlоа como resultado”, agregó Рrісе, señalando un advertencia de viaje del Departamento de Estado. Para el estado de Sinaloa, las autoridades advierten que los estadounidenses podrían ser víctimas de la delincuencia o el secuestros, ya que «el crimen violento está muy extendido», y «las organizaciones criminales tienen su base y operan en Sinaloa».
El jueves, las autoridades mexicanas anunciaron el arresto de Ovidio Guzmán López, lo que desencadenó una ola de violencia principalmente en la ciudad de Culiacán, en el norte de Sinaloa. El gobernador del estado, Rubén Rocha, fue citado por Reuters diciendo que siete miembros de las fuerzas de seguridad de México habían muerto, entre ellos un coronel, y 21 más resultaron heridos.
Rocha dijo que se produjeron 12 enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, 25 actos de saqueo y 250 vehículos fueron incendiados y utilizados para realizar bloqueos de carreteras. Ocho civiles también resultaron heridos en los actos de violencia, dijo.
«Mañana creemos que podremos trabajar con normalidad», dijo, agregando que no había hablado de pedir más refuerzos al ejército o a la Guardia Nacional.
El ministro de Defensa, Luis Cresencio Sandoval, confirmó la captura de Guzmán de 32 años, el jueves y dijo que estaba detenido en la capital, Ciudad de México. Los videos compartidos en las redes sociales parecían mostrar intensos combates durante la noche en Culiacán, con el cielo iluminado por disparos de helicópteros.
El Departamento de Estado lo había descrito como un “miembro de alto rango del Cártel de Sinaloa e hijo del exlíder del Cártel de Sinaloa”, y estaba involucrado en su propia “organización de tráfico de drogas” junto con su hermano.
Un avión de la fuerza aérea mexicana también recibió tiroteos, dijo la Agencia Federal de Aviación Civil, y agregó que el aeropuerto de Culiacán, así como los de las ciudades sinaloenses de Mazatlán y Los Mochis, permanecerían cerrados hasta que se pudiera garantizar la seguridad.
El joven Guzmán fue arrestado previamente por las autoridades mexicanas en 2019, pero fue liberado por orden del presidente Andrés Manuel López Obrador en un intento de evitar más enfrentamientos y masacres. La medida enfureció a sus oponentes y a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley de EE. UU., diciendo que eso establecía un precedente peligroso.
“No puede valer más la captura de un delincuente que la vida de las personas”, dijo López Obrador en ese momento.
Estados Unidos había ofrecido una recompensa de USD 5 millones por información que condujera al arresto o condena de Ovidio. No está claro si Guzmán será extraditado a Estados Unidos como su padre, quien fue condenado en Nueva York en 2019 por traficar miles de millones de dólares en drogas al país y conspirar para asesinar enemigos.
Visita de Biden
La recaptura de Guzmán se produjo pocos días antes de la visita programada del presidente Joe Biden a la Ciudad de México. A inicios de esta semana, Biden dijo a los periodistas que planea visitar también la frontera entre EE. UU. y México ante niveles récord de inmigración ilegal a Estados Unidos y cuando la Corte Suprema se apresuró el mes pasado para mantener intacta la orden de inmigración del Título 42 de la era Trump hasta que escuche los argumentos en el caso.
Un reportero le preguntó al presidente si irá a la frontera la próxima semana, a lo que respondió: “Esa es mi intención, estamos ultimando los detalles ahora”. Un día después, la Casa Blanca anunció nuevos esfuerzos para mejorar la seguridad fronteriza entre las críticas bipartidistas a sus políticas de inmigración.
Un programa de libertad condicional diseñado para venezolanos se ampliará a Cuba, Haití y Nicaragua, según la Casa Blanca. Las personas de esos países ahora pueden solicitar el estatus legal por dos años si logran encontrar un patrocinador estadounidense y pasar una verificación de antecedentes.
Con información de Reuters.
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