El Departamento de Estado de Estados Unidos emitió el lunes una advertencia de viaje para los ciudadanos estadounidenses que visiten zonas turísticas en el estado mexicano de Quintana Roo debido a «incidentes recientes que involucran a taxistas y conductores de Uber».
La «alerta de seguridad» dijo que los ciudadanos estadounidenses deben tener cuidado con «los servicios de transporte basados en aplicaciones en México», escribió el Departamento de Estado. Quintana Roo abarca Cancún y otras zonas turísticas populares en la península de Yucatán.
«Los servicios de automóviles a través de aplicaciones como Uber y Cabify están disponibles en muchas ciudades mexicanas, y generalmente ofrecen otra alternativa segura a los taxis», señaló el boletín. «Las quejas oficiales contra Uber y otros conductores ocurren, sin embargo, y las disputas pasadas entre estos servicios y los sindicatos locales de taxis ocasionalmente se han vuelto violentas, resultando en lesiones a ciudadanos estadounidenses en algunos casos».
Al parecer, los taxistas del estado han acosado y agredido a conductores y pasajeros de Uber debido a quejas sobre la competencia en los últimos días. Esta semana, los taxistas bloquearon las tres entradas de la Zona Hotelera de Cancún, según reportes de medios locales y fotos publicadas en internet.
Un reportero del medio Riviera Maya News dijo que decenas de taxistas bloquearon las tres principales vías de acceso a la zona hotelera el lunes, obligando a cientos de turistas tratando de encontrar una manera de entrar o salir de la zona. La Guardia Nacional del estado y la policía local se desplegaron para hacer frente a la manifestación, se reportó.
El departamento de policía de Cancún compartió fotos de viajeros subiendo a las cabinas de las camionetas policiales, y dijo que «dados los bloqueos en el bulevar Kukulcán, nuestros oficiales de tránsito ayudaron a la gente a llegar al aeropuerto». El alcalde de Cancún pidió a los taxistas que mostraran moderación en medio de los disturbios.
Algunos residentes de Cancún también postearon videos o fotos de taxis rodeando presuntos autos de servicio, y un hombre dijo que estaba dando un paseo a algunas personas cuando su auto fue apedreado y abollado por los taxistas.
«No voy a permitir que un pequeño grupo dañe la reputación del centro turístico y la seguridad de las personas», dijo la alcaldesa Ana Patricia Peralta en un mensaje grabado, según The Associated Press.
Y la secretaria de Estado, Cristina Torres Gomez, dijo a los periodistas que la «libre manifestación de los ciudadanos de Quintana Roo» está bien «siempre y cuando no viole o dañe los derechos de terceros».
«Escuchamos absolutamente a todos los grupos, pero bajo ninguna circunstancia vamos a permitir que se vulnere la paz y la tranquilidad, ni que se colapsen las carreteras en un estado que es la ventana de México al mundo», agregó.
Las aplicaciones de transporte habían estado bloqueadas en Cancún hasta principios de este mes, cuando un tribunal concedió una orden judicial que permitía operar a Uber. Dado el elevado coste de los taxis locales en Cancún, muchos viajeros prefieren utilizar aplicaciones.
Un grupo que representa a unos 12,000 miembros en Cancún, llamado Sindicato de Taxis, se enfadó por el fallo judicial, emitido el 11 de enero, que permite a Uber operar, según el Mexico Daily News. Eso desencadenó las protestas de esta semana.
En redes sociales, algunos usuarios apuntaron contra el Sindicato de Taxis y llamaron a la gente a no usar taxis.
«Los taxistas de Quintana Roo son un cártel más. No te subas en uno», dijo un usuario de Twitter. «Estos taxistas mafiosos, al igual que el sargazo, están acabando con Cancún», dijo otro usuario, reportó el medio.
Pero el sindicato calificó de injusto el fallo judicial.
«Así como hoy se han alzado voces condenando a los taxistas, nosotros también alzamos la voz para exigir certeza y acción contra las actividades que vulneran nuestra fuente de ingresos», dijo el Sindicato de Taxistas «Andrés Quintana Roo» en un comunicado enviado al Daily News.
Otras advertencias
En medio de la violencia, el crimen y los secuestros relacionados con los cárteles, el Departamento de Estado de Estados Unidos emite con frecuencia alertas de viaje contra viajar a ciertos estados mexicanos. A principios de este mes, la agencia advirtió a los estadounidenses que no viajaran al estado de Sinaloa tras los reportes sobre la violencia de los cárteles desencadenada por la detención de un poderoso capo de la droga.
El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, había advertido a los estadounidenses de que no viajaran a este estado después de que la policía federal mexicana detuviera a Ovidio Guzmán López, hijo del capo mexicano de la droga «El Chapo».
El año pasado, en medio de una oleada de violencia relacionada con los cárteles en todo México, el Departamento de Estado publicó una advertencia sobre secuestros que se aplicaba a varios estados mexicanos.
«La delincuencia violenta —como homicidios, secuestros, robos de vehículos y atracos— está muy extendida y es habitual en México», declaró entonces el Departamento de Estado.
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