Una joven desapareció en la provincia china de Jiangxi en medio de las acciones legales que estaba emprendiendo contra un hospital psiquiátrico que, según ella, retenía y abusaba de personas mentalmente sanas.
La desaparecida, Li Yixue, también denunció que el hospital psiquiátrico estaba cometiendo abusos contra los derechos humanos en conjunto con la policia quienes estaban coludidos con la institución psiquiátrica.
La Sra. Li atrajo la atención pública a través de sus videos transmitidos en vivo en las redes sociales que exponían los abusos de derechos humanos contra personas sin enfermedades mentales recluidas en el Hospital Psiquiátrico de Jiangxi.
A través de sus acciones legales, Li se comprometió a desafiar al sistema judicial y médico del Partido Comunista Chino. Y obtuvo un amplio apoyo del público chino.
Sus esfuerzos se deben a su propia experiencia con la policía y el Hospital Psiquiátrico de Jiangxi.
En marzo de 2022, la señora Li acudió a la estacion de policia de Dinggong Road, en la ciudad de Nanchang, provincia de Jiangxi, para denunciar una disputa civil, pero en la estación de policia se negaron a presentar su caso. Un oficial de policía auxiliar de la comisaría, de apellido Lai, en la estación le dijo a la Sra. Li que se reuniera con él en un hotel para hablar sobre la presentación del caso. Después de la reunión, Li acudió a la estacion de policia para denunciar que Lai la había agredido sexualmente en el hotel, según informes de los medios de comunicación chinos.
Ese mismo mes, la estacion de policía de Dinggong Road envió por la fuerza a la Sra. Li al hospital psiquiátrico de Jiangxi y la encerró allí durante 56 días.
Después de ser dada de alta del hospital, la Sra. Li lo demandó por negligencia médica, afirmando que la hospitalización forzosa a la que la había sido sometida en el hospital era ilegal.
El 6 de diciembre de 2022 se celebró la primera audiencia de su caso, pero el tribunal no tomó ninguna decisión al respecto.
Tras el veredicto negativo, Li continuó expresándose en la plataforma china de intercambio de videos cortos Kuaishou, el equivalente a TikTok, donde reveló los delitos que había sufrido y presenciado en el hospital psiquiátrico y acusó a la policía y al hospital de estar coludidos en la persecución de ciudadanos chinos.
Antes de la segunda audiencia del juicio, el 23 de mayo, un gran número de internautas chinos publicaron en la cuenta Kuaishou de la Sra. Li para mostrarle su apoyo. Algunos internautas acudieron al tribunal el día del juicio, pero las autoridades les prohibieron asistir al proceso.
Tras un día de juicio, Li desapareció y no se ha vuelto a saber de ella.
Muchos internautas chinos han dejado mensajes en la cuenta Kuaishou de Li expresando su preocupación por su seguridad y su apoyo. «Estás luchando por el Estado de derecho en China para todos nosotros; ¡sigue adelante!», se lee en un mensaje.
Un reportero de The Epoch Times llamó a la Corte del Distrito del Lago Qingshan de la ciudad de Nanchang el 27 de mayo, basándose en la información legal de Li publicada por ella en las redes sociales, pero no pudo contactar con él.
Crímenes en hospitales psiquiátricos chinos
En sus videos en redes sociales, la Sra. Li reveló que el Hospital Psiquiátrico de Jiangxi ha encerrado a un gran número de personas que no padecen ningun tipo de enfermedades mentales, y lo que es peor, sus familias no pueden darlos el alta.
En un video ella dijo que las enfermeras del hospital psiquiátrico son muy abusivas, atan a las personas a la cama y no se les permite ir al baño, por lo que tienen que ensuciar sus pantalones.
La Sra. Li dijo que al principio no entendía por qué la habían internado en el hospital psiquiátrico por denunciar la agresión sexual del oficial de la policía, pero cuando vio que la policía retenía allí a otras personas sanas por diversas razones, se dio cuenta de que su caso no era el peor.
Dijo que algunas personas fueron enviadas al hospital psiquiátrico por pelear con el personal de la oficina comunitaria del PCCh al solicitar permisos de acceso; otras fueron internadas por la policía por presentar denuncias, y otras fueron internadas por pelear con la policía.
En uno de sus videos llamo al hospital psiquiátrico como la «prisión privada» del PCCh.
La Sra. Li también reveló que la policía la amenazó muchas veces por denunciar al oficial de policía.
El director de la estacion de policía de Dinggong Road, en el distrito de Xihu, ciudad de Nanchang, provincia de Jiangxi, llegó a amenazar a sus padres diciéndoles: «Si su hija se atreve a demandar nuevamente tras salir del hospital psiquiátrico, la próxima vez la enviaré a un manicomio en lugar de al Hospital Psiquiátrico de Jiangxi para encerrarla hasta el día de su muerte».
Se enfrentó a vigilancia, intimidaciones y amenazas de la policía, la Sra. Li continuó exponiendo los brutales métodos de las autoridades para utilizar los hospitales psiquiátricos para perseguir a ciudadanos chinos sanos.
La Sra.Li dijo en un video transmitiendo en vivo que la razón por la que todo el mundo espera con impaciencia el desenlace de su caso es que este asunto afecta a la libertad personal de todos y cada uno de los ciudadanos chinos.
«Hoy pueden internarme a mí en un hospital psiquiátrico y mañana pueden internarte a ti. La policía y los hospitales psiquiátricos están coludidos», afirmó.
Utilizado para la persecución
En los últimos años se han revelado numerosos casos en los que el PCCh ha internado a ciudadanos comunes en hospitales psiquiátricos para perseguirlos.
Lin Shengliang, es un defensor chino de los derechos humanos exiliado en Europa, reveló que el escritor independiente Wang Yuping fue dado de alta recientemente de un hospital psiquiátrico de China, donde fue detenido y alimentado a la fuerza con drogas desconocidas. El Sr. Wang publicó múltiples artículos en línea, abogando por diversas formas de poner fin a la dictadura de partido único del PCCh.
En 2022, Zhu Shuang, residente en Chengdu, publicó un artículo en las redes sociales en el que se quejaba de los draconianos confinamientos de COVID-19 del PCCh. La policía lo secuestró en su casa y lo internó a la fuerza en un hospital psiquiátrico, donde permaneció detenido más de 40 días.
El Sr. Zhu declaró a The Epoch Times que en el hospital lo desnudaron, lo ataron, le aplicaron descargas electricas, le inyectaron veneno y le suministraron drogas desconocidas.
El Sr. Zhu está actualmente exiliado en Canadá y ha estado protestando frente al consulado chino contra la persecución del régimen a través de hospitales psiquiátricos. El 25 de mayo, el Sr. Zhu hizo un llamado a todo el mundo en X para que acudiera a los consulados chinos a mostrar su apoyo a la Sra. Li.
Lai Jianping, exabogado de Beijing y presidente de la Alianza China para la Democracia y la Justicia en Canadá, declaró a The Epoch Times que debe haber alguna fuerza detrás de la desaparición de la Sra. Li relacionada con el caso judicial. La están deteniendo ilegalmente de nuevo, dijo.
El Sr. Lai dijo que vio muchos casos similares cuando era abogado en Beijing.
«Se trata de la típica represión brutal de ciudadanos chinos comunes y corrientes por parte de los crueles funcionarios del PCCh. Es una violación flagrante y grave de los derechos humanos básicos de los ciudadanos chinos», afirmó.
«Adoptaron el supuesto método de internar a los pacientes en un hospital psiquiátrico, lo que debió haber sido en colusión con la administración del hospital. De hecho, se trata de una detención ilegal y, para ser más grave, es un secuestro», afirmó el Sr. Lai.
El 14 de marzo, un sitio web chino independiente dedicado a los derechos humanos, Civil Rights and Livelihood Watch, publicó su «Informe de fin de año sobre salud mental y derechos humanos en China 2023», en el que afirmaba que calificar a alguien con una enfermedad mental e internarlo en hospitales psiquiátricos sigue siendo una medida con la que las autoridades del PCCh mantienen la estabilidad política y persigan a los opositores y activistas de derechos humanos.
Según organizaciones internacionales de derechos humanos, un número desconocido de practicantes chinos de Falun Gong, seguidores de la práctica tradicional que sigue los principios de Verdad, Compasión y Tolerancia, también han sido internados a la fuerza y perseguidos en hospitales psiquiátricos de toda China por las autoridades comunistas. Han sido torturados e inyectados a la fuerza con drogas desconocidas en los hospitales, lo que ha causado graves daños permanentes a su salud.
Con información de Li Rui.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
