Un hombre de 42 años se presentó a un centro de salud en Estados Unidos con fiebre intermitente de seis días acompañada de dolor de cabeza y dolores musculares. Lejos de ser un resfrío común, los médicos le descubrieron sífilis, una enfermedad que se extendió por Europa 500 años atrás y aunque para muchos quedó en el olvido los casos hoy están en aumento.
En la consulta el hombre también dijo que en los últimos días comenzó a tener una visión borrosa en el ojo derecho, y las últimas horas, una pérdida de la visión central, reportó la Clínica Cleveland.
No tenía dolor en el ojo ni destellos de luz asociados a otras enfermedades de la vista. Tampoco tenía antecedentes de enfermedades autoinmunes como el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), uso de drogas u otras enfermedades de relevancia. En cambio era una persona sexualmente activa con una pareja de 23 años.
El fondo de ojo derecho del paciente reveló la presencia de una gran hemorragia inferior y múltiples hemorragias centradas en blanco del ojo (manchas de Roth). El ojo izquierdo en cambio presentaba una inflamación, síntomas que están incluidos en la sífilis que afecta al ojo.
A patient presented after six days of intermittent fevers, rigors, headache and myalgia, followed by blurred vision in his right eye: https://t.co/CCMKvnxnDh
— Cleveland Clinic MD (@CleClinicMD) October 3, 2019
La clínica Cleveland dijo que los médico primero sospecharon de leucemia, pero fue descartado. También las pruebas del virus de inmunodeficiencia VIH fueron negativas. En cambio las pruebas de laboratorio fueron positivas a la presencia de la bacteria Treponema pallidum.
La sífilis es una enfermedad venérea que puede llegar a ser mortal y es causada por la bacteria Treponema pallidum, que solo afecta al ser humano e invade el cuerpo de manera lenta y crónica. Es muy fácil de tratar pero muchas veces es desapercibida porque sus síntomas visibles duran pocos días y se intercalan con intervalos en que estos no se manifiestan.
El laboratorio de investigación de enfermedades venéreas de Cleveland confirmó el diagnóstico de sífilis en el ojo (sífilis ocular) al analizar las muestras de líquido cerebral y las pruebas de anticuerpos a la bacteria.
Afortunadamente la enfermedad fue detectada y el paciente recibió tratamiento de antibiótico, con penicilina G durante cinco días antes de ser dado de alta con instrucciones para completar un ciclo de 10 días de un segundo tratamiento de fácil aplicación en la casa.
El hombre continuó haciendo un seguimiento de su infección bacteriana con el médico oculista y especialistas en enfermedades infecciosas.
Los exámenes posteriores mostraron que se resolvió el problema del fondo de ojo dilatado, las manchas y hemorragia del ojo derecho. También el examen del líquido cerebral (cefaloraquideo) demostró 24 meses más tarde que ya no habría presencia de la bacteria.
Un problema grave si no se trata
La sífilis, como enfermedad de transmisión sexual, se hizo conocida en Europa después de que el ejército del rey de Francia Carlos VIII, compuesto principalmente por franceses, holandeses, suizos y españoles, así como por mercenarios europeos, en su lucha por conquistar el reino de Nápoles, entró en Italia a finales del año 1494, según la Librería Nacional de Medicina de Estados Unidos. Primero se detectó en el ejército francés, luego en Italia.
Puede causar problemas de salud graves si no se trata. Su nivel de infección se divide en etapas, primaria, secundaria, latente y terciaria, por sus diferentes signos y síntomas asociados con cada etapa, señala el Centro de Control de Enfermedades (CDC) en EE.UU.
Una persona con sífilis primaria la mayoría de las veces tiene una llaga o llagas en el sitio original de la infección, generalmente alrededor de los genitales, alrededor del ano o en el recto, o dentro o alrededor de la boca. Son llagas casi siempre firmes, redondas e indoloras.
En la sífilis secundaria se observa erupción cutánea, inflamación de los ganglios y fiebre.
Durante la etapa latente, no hay signos o síntomas.
La mayoría de las personas con sífilis no tratada no desarrollan sífilis terciaria. Sin embargo, cuando sucede, puede afectar muchos sistemas de órganos diferentes. Estos incluyen el corazón y los vasos sanguíneos, y el cerebro y el sistema nervioso.
“La sífilis terciaria es muy grave y ocurriría entre 10 y 30 años después de que comenzó la infección. En la sífilis terciaria, la enfermedad daña los órganos internos y puede provocar la muerte”, destaca CDC.
Neurosífilis y Sífilis en el ojo
Sin tratamiento, la sífilis puede extenderse al cerebro y al sistema nervioso (neurosífilis) o al ojo (sífilis ocular). Esto puede suceder durante cualquiera de las etapas descritas anteriormente. Los síntomas de la neurosífilis incluyen
dolor de cabeza intenso;
dificultad para coordinar movimientos musculares;
parálisis (no puede mover ciertas partes de su cuerpo);
entumecimiento;
demencia (trastorno mental).
Los síntomas de la sífilis ocular incluyen cambios en su visión e incluso ceguera.
Un 70% en aumento
Entre 2007 y 2017 en Europa se registraron 260.000 casos de sífilis con un aumento de un 70%. Desde una tasa de 4,2 casos por 100.000 habitantes paso a tener hoy 7,1 casos por 100.000 habitantes, según el Centro de Control de Enfermedades de Europa (ECDC).
Entre 2016 y 2017, el número de casos primarios y secundarios reportados en los Estados Unidos aumentó en un 10,5%, y hubo 30.644 casos de sífilis reportados en 2017, informó la CDC. En todo Europa en cambio se registran más de 30.000 casos al año.
¿Cómo se transmite la sífilis?
Puede contraer sífilis solo por contacto directo con una persona que tenga una llaga de sífilis durante las relaciones sexuales. El algunos casos se transmite de la madre al hijo durante el parto.
¿Qué riesgos hay de contraer sífilis?
Si usted no tiene relaciones sexuales no contraerá sífilis u otra enfermedad de transmisión sexual.
En caso de tener con su esposo o pareja una relación estable comprometida entre ambos, sin relaciones con terceros, no hay ningún riesgo de contraer sífilis ni otra enfermedad de transmisión sexual.
Si es usted es una persona sexualmente activa y desconoce los antecedentes de su pareja existen mayores posibilidades de contraer sífilis u otras enfermedades de transmisión sexual.
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