Un hombre que fue arrestado el 12 de octubre fuera de un mitin del expresidente Donald Trump demandó a un sheriff de California que dijo que su departamento frustró un intento de asesinato.
Vem Miller, residente en Nevada, dice que el sheriff y los ayudantes del sheriff violaron sus derechos constitucionales cuando lo arrestaron, registraron su vehículo y dijeron a la prensa que él iba a intentar asesinar a Trump.
«Esta acción de derechos civiles busca daños compensatorios y punitivos de los demandados por violar varios derechos bajo la Constitución de Estados Unidos y la ley estatal en relación con el registro y la incautación de los bienes del demandante, las violaciones de su derecho a la privacidad y la destrucción intencional de su reputación y bienestar financiero», dijeron los abogados del Sr. Miller en una demanda federal que se presentó en Nevada el 15 de octubre.
Miller viajó a la manifestación, que se celebraba en el condado de Riverside, California, el 12 de octubre, pero fue detenido después de que dijera a los agentes del orden que tenía la intención de dejar en su vehículo dos armas de fuego que poseía legalmente, según la denuncia.
El Sr. Miller fue detenido y sometido a un registro ilegal de su vehículo, según sus abogados. Al día siguiente de la detención, el sheriff del condado de Riverside, Chad Bianco, declaró en una rueda de prensa que sus agentes parecían haber frustrado un intento de asesinato.
El Sr. Bianco declaró a The Epoch Times que Miller había dicho que «iba a matar al presidente». Bianco se retractó más tarde de la afirmación, diciendo que le habían dado mal la información.
«Bianco, de forma intencionada, maliciosa y con un flagrante desprecio por la verdad, quiso crear una narrativa para ser visto como un sheriff ‘heroico’ que salvó al candidato presidencial Trump de un tercer intento de asesinato», alega la demanda de Miller.
Agentes del Servicio Secreto de Estados Unidos y el FBI determinaron que Miller no era una amenaza y se negaron a entrevistarlo después de hablar con un ayudante del sheriff, según la presentación. El FBI declinó hacer comentarios. El Servicio Secreto no respondió a unas preguntas.
Un portavoz del servicio declaró después de la detención que los funcionarios del servicio, el FBI y la Oficina del Fiscal de Estados Unidos en la zona estaban al tanto de la detención realizada por la Oficina del Sheriff del Condado de Riverside.
La detención «no tuvo impacto en las operaciones de protección y el expresidente Trump no corrió ningún peligro», dijo el portavoz del Servicio secreto. «Si bien no se ha realizado ningún arresto federal en este momento, la investigación está en curso».
Un portavoz de la campaña de Trump declaró a los medios de comunicación que la campaña estaba al tanto de la detención y estaba monitoreando la situación.
El Sr. Bianco sabía que los funcionarios federales se habían negado a entrevistar al sospechoso, pero aun así hizo las declaraciones a la prensa, afirmó el Sr. Miller.
La demanda también afirma que la declaración hecha por el Sr. Bianco en una rueda de prensa de que Miller tenía varios pasaportes y permisos de conducir falsos con nombres diferentes, así como matrículas falsas en su vehículo, eran «alegaciones absurdas».
El Sr. Miller se describe a sí mismo como un republicano registrado que apoya a Trump.
La demanda busca daños por dolor, sufrimiento mental y todas las «pérdidas económicas y gastos» pasados y futuros incurridos por el Sr. Miller como resultado de la conducta del Sr. Bianco y sus ayudantes.
«Reconocemos la demanda presentada contra la Oficina del Sheriff del Condado de Riverside y nos tomamos muy en serio este tipo de asuntos. Sin embargo, como se trata de un litigio pendiente, no podemos hacer comentarios sobre los detalles en este momento», declaró un portavoz de la oficina a The Epoch Times en un correo electrónico.
«Nosotros estamos comprometidos con la transparencia y cooperaremos plenamente con el proceso legal. Nuestra prioridad sigue siendo la seguridad y el bienestar de la comunidad a la que servimos. Agradecemos su comprensión mientras abordamos este asunto».
El Sr. Miller fue acusado de dos delitos menores: portar un arma de fuego cargada en público y poseer un cargador de gran capacidad, según los registros.
El Sr. Miller quedó en libertad bajo fianza el 12 de octubre.
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