Las autoridades federales detuvieron el 13 de junio a la fundadora de una empresa de salud digital con sede en California y a su presidente del área clínica en relación con una presunta operación de 100 millones de dólares en Internet, relacionada con la prescripción indebida de Adderall, un medicamento utilizado a menudo para tratar el trastorno por déficit de atención con hiperactividad.
Ruthia He, fundadora y CEO de Done Global Inc, y David Brody, presidente del área clínica de la empresa, fueron detenidos el 13 de junio.
«Como se alega, estos acusados explotaron la pandemia de COVID-19 para desarrollar y llevar a cabo un esquema de 100 millones de dólares para defraudar a los contribuyentes y proporcionar un fácil acceso a Adderall y otros estimulantes sin ningún propósito médico legítimo», dijo el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, en una declaración emitida el 13 de junio.
Los acusados presuntamente se aprovecharon de las normas de telemedicina «que facilitaron el acceso a los medicamentos durante la emergencia de salud pública sin precedentes de COVID-19», dijo la jefa de la Administración para el Control de Drogas, Anne Milgram.
The Epoch Times se puso en contacto con Done Global para solicitar comentarios, pero no obtuvo respuesta inmediata.
En la imputación de cargos se alega que la Sra. He y el Sr. Brody utilizaron Internet para distribuir ilegalmente los medicamentos para el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés) y conspiraron para cometer fraude sanitario a cambio del pago de una cuota mensual de suscripción, según el Departamento de Justicia.
Las autoridades federales alegan que los dos sospechosos organizaron la prescripción de más de 40 millones de pastillas de Adderall y otros estimulantes, generando más de 100 millones de dólares en ingresos para la empresa.
La Sra. He y el Sr. Brody supuestamente consiguieron suscriptores dirigiéndose a los buscadores de drogas y gastando decenas de millones de dólares en «anuncios engañosos en las redes sociales», según la Oficina del Fiscal de Estados Unidos.
Según las autoridades, los sospechosos continuaron con el plan incluso después de que algunos suscriptores sufrieran sobredosis y murieran.
El DOJ alega que los sospechosos conspiraron para defraudar a farmacias, Medicare, Medicaid y compañías de seguros comerciales para suministrar y pagar por Adderall y otros estimulantes. Como resultado, Medicare, Medicaid y las aseguradoras comerciales pagaron más de 14 millones de dólares, alega el DOJ.
Según el Departamento de Justicia, se trata de los primeros procesos penales por distribución de medicamentos relacionados con la prescripción de telemedicina a través de una empresa de salud digital.
Si son declarados culpables, la Sra. He y el Sr. Brody se enfrentan a un máximo de 20 años de prisión cada uno.
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