Diez senadores republicanos escribieron una declaración el miércoles respondiendo a los comentarios del presidente Joe Biden sobre una propuesta bipartidista de alivio por COVID-19 que los senadores presentaron anteriormente.
Cuando se le preguntó a Biden el miércoles sobre el apoyo republicano a la propuesta de infraestructura de 2.3 billones de dólares, hizo referencia al proyecto de ley de alivio del virus del PCCh y dijo que el grupo republicano no estaba listo para cooperar.
“Hubiera estado dispuesto a comprometerme, pero ellos no lo hicieron. No se movieron ni un centímetro. Ni una pulgada”, dijo Biden.
Los diez senadores son Susan Collins (R-Maine), Lisa Murkowski (R-Ark.), Bill Cassidy (R-La.), Mitt Romney (R-Utah), Rob Portman (R-Ohio), Shelley Moore Capito ( RW.Va), Todd Young (R-Ind.), Jerry Moran (R-Kan.), Mike Rounds (RS.D.) y Thom Tillis (RN.C.).
«De buena fe, nuestro grupo de 10 republicanos trabajaron juntos para redactar un sexto paquete de alivio por Covid-19 a inicios de este año», se lee en su declaración.
“La Administración descartó rotundamente nuestra iniciativa por considerarla totalmente inadecuada para justificar su estrategia de ir sola. Menos de 24 horas después de nuestra reunión en la Oficina Oval, el líder demócrata del Senado comenzó el proceso de iniciar la conciliación la cual excluyó la participación republicana y permitió que el paquete se aprobara sin un solo voto republicano”, dice la declaración.
“Nuestra propuesta de 618 mil millones de dólares fue una primera oferta a la Casa Blanca diseñada para abrir negociaciones bipartidistas. Nuestro paquete incluía los elementos centrales de alivio por Covid del plan de la Administración Biden, como proporcionar una cantidad idéntica—160 mil millones de dólares—para sustentar las vacunas y las pruebas. Además, posteriormente aumentamos nuestra oferta a 650 mil millones de dólares para incrementar la magnitud de los pagos de estímulo», agregó.
El grupo se reunió con Biden el 1 de febrero para discutir los detalles de su propuesta de alivio por el virus del PCCh de 618 mil millones de dólares, y luego presentó otra versión ampliada (650 mil millones de dólares) que aumentó la magnitud de los pagos de estímulo.
La administración Biden terminó de promover el plan con solo el apoyo de los demócratas del Congreso.
Los senadores habían enviado anteriormente un escrito (pdf) el 31 de enero, describiendo su versión de un alivio por COVID-19.
El representante Mike Kelly (R-Pa.) dijo a The Epoch Times el 28 de febrero que gran parte del proyecto de ley de alivio por COVID-19 no tiene por objetivo el alivio real de la pandemia y está destinada a respaldar a los estados controlados por los demócratas.
El congresista dijo que la medida de 1.9 billones de dólares es en realidad un adicional al 1 billón de dólares ya asignado para el alivio por COVID-19.
“Creo que la mayoría de la población estadounidense necesita saber que ya teníamos un billón de dólares en dinero asignado pero aún no gastado. Ahora, vamos a agregar otros 1.9 billones de dólares a eso”, dijo Kelly en la conferencia conservadora anual en Orlando, Florida.
«Y solo alrededor del 9 por ciento de eso realmente se destinará al alivio por COVID, el otro se destinará a respaldar a los estados azules que no han podido funcionar de la manera correcta», agregó.
Kelly expresó su molestia del argumento de que es dinero del gobierno y que es admisible para ellos gastarlo como tal, señalando que aumenta la deuda nacional.
“Ni un centavo es dinero del gobierno. Cada centavo salió de su bolsillo; usted será cofirmante de una deuda que va a un futuro lejano. Y lo sabemos ahora mismo, entre pasivos financiados y no financiados, la deuda total en Estados Unidos supera los 130 billones de dólares”, dijo.
“Hablamos muy rápido acerca de, ‘Oh, son 30 billones de dólares los que estamos haciendo en este momento’, dije no, no—pasivos financiados y no financiados [son] 130 billones de dólares. Estamos gastando dinero como si no hubiera un mañana».
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