Un importante grupo empresarial puso en duda el lunes la recién anunciada orden de la ciudad de Nueva York sobre la vacuna contra el COVID-19 para los trabajadores privados, señalando que una medida similar intentada por la administración del presidente Joe Biden fue bloqueada por un tribunal federal.
«Las políticas incoherentes a nivel federal, estatal y municipal no son útiles y no está claro quién hará cumplir la orden del alcalde, y si incluso es legal», dijo Kathryn Wylde, directora de Partnership for New York City, a los medios de comunicación en un comunicado.
«La orden de vacunación del presidente Biden sobre los empleadores con más de 100 empleados está actualmente detenida por un litigio y es difícil imaginar que el alcalde pueda hacer algo por lo que el presidente está siendo cuestionado», añadió.
El lunes, el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, dijo que los trabajadores privados deben vacunarse antes del 27 de diciembre o serán despedidos.
Dijo que uno de los principales impulsores de la medida es la variante ómicron del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), que causa el COVID-19.
Hasta ahora se han detectado ocho casos en todo el estado, aunque algunos expertos creen que la variante podría extenderse rápidamente.
Los tribunales federales han bloqueado muchas de las órdenes de la administración Biden, incluido uno que pretendía obligar a todos los empleadores con 100 o más trabajadores a exigir una prueba de vacunación o un test. Un panel del tribunal de apelaciones dijo el mes pasado que la orden empresarial planteaba «graves problemas estatutarios y constitucionales» y más tarde la calificó de «asombrosamente excesiva».
La orden de la ciudad de Nueva York no parece tener una opción para la realización de pruebas. Las únicas excepciones declaradas hasta ahora son para los empleados que trabajan desde casa y para las empresas que no tienen ningún empleado aparte del propietario. Los funcionarios prometieron dar más detalles la semana que viene.
Wylde dijo que las empresas no fueron consultadas antes de que se anunciara la orden, una acusación cuestionada por el alcalde, que deja el cargo el próximo mes ya que los límites del mandato le impidieran presentarse a otros cuatro años.
«Hubo mucho diálogo con la comunidad empresarial por adelantado», dijo el demócrata.
Una gran cantidad de empresas de la ciudad de Nueva York, incluidas las que ofrecen servicios de guardería y escuelas privadas, ya estaban obligadas a exigir la vacunación.
«Ya lo hemos hecho con una gran parte de nuestra comunidad empresarial, y creo que este siguiente paso va a ser algo que realmente la gran mayoría de las empresas van a aceptar y a trabajar con nosotros para conseguirlo», dijo de Blasio.
La nueva orden afectará a unas 184,000 empresas, según el Dr. Dave Chokshi, comisionado de salud de la ciudad.
El alcalde electo de Nueva York, Eric Adams, no se ha pronunciado sobre la inminente orden. Su campaña no devolvió las solicitudes de comentarios.
De Blasio dijo que la semana pasada puso a Adams al corriente de lo que está haciendo su administración.
«Dejaré que hable por sí mismo sobre lo que piensa de cada enfoque, pero ha sido tremendamente claro al decir que respeta a los profesionales de la salud y su orientación», dijo.
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