El director del FBI, Chris Wray, declaró este jueves que encontraron al menos un individuo con un arma dentro del edificio del Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero.
Wray hizo estas declaraciones durante una audiencia de supervisión celebrada por el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, sugiriendo que aún se presentarán «cargos serios» en la investigación criminal de la irrupción en el Capitolio.
«Esta es una investigación en curso y hay mucho más por venir», dijo Wray, en relación a un subgrupo de manifestantes que están siendo investigados por introducir armas en el edificio del Capitolio durante la intrusión del 6 de enero. «Yo esperaría ver más cargos —algunos de ellos quizá más graves».
Muchos de los arrestos y cargos «más significativos» que están surgiendo de la investigación actualmente son individuos que llevaron «todo tipo de armas» dentro del edificio del Capitolio, incluyendo Kevlar, chalecos tácticos y spray para osos, declaró Wray.
«¿Armas de fuego? ¿Alguien trajo armas de fuego?», preguntó el representante Louie Gohmert (R-Texas).
«Que yo recuerde, al menos en un caso hubo un individuo con arma de fuego dentro del Capitolio, pero en su mayor parte, las armas eran distintas a las de fuego», respondió Wray.
El FBI dividió a las decenas de miles de manifestantes que estaban en el Capitolio el 6 de enero en tres grupos, dijo Way: los manifestantes «pacíficos, tal vez revoltosos» que no participaron en la irrupción y que constituyeron el grupo más numeroso, un segundo grupo que se dedicó a invadir criminalmente el edificio del Capitolio, y un tercer grupo —el más pequeño en número— que se encargó en llevar armas al Capitolio.
Hasta ahora se realizaron cerca de 500 detenciones entre los integrantes del segundo y tercer grupo,relacionados al 6 de enero, dijo Wray a la comisión. El Departamento de Justicia (DOJ) dijo previamente que la mayoría de los casos están relacionados con la entrada en un edificio restringido, la obstrucción de un procedimiento oficial y el desorden civil.
El DOJ acusó el mes pasado a un hombre de Maryland por llevar dentro del recinto del Capitolio, el 6 de enero, una pistola semiautomática y municiones, entre otros nueve cargos. Sin embargo, no está claro si Wray estaba testificando sobre este individuo.
El Departamento de Justicia no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios de The Epoch Times sobre el asunto.
En una acta acusatoria del Departamento de Justicia se alega que alrededor de las 7:25 p.m. del 6 de enero, Christopher Alberts fue visto llevando una pistola semiautomática Taurus G2C sin licencia en terrenos restringidos del Capitolio, donde el vicepresidente y el vicepresidente electo estaban de visita, y que también tenía en su poder un «dispositivo cargador de municiones de gran capacidad».
Alberts se declaró inocente de todos los cargos.
El director del FBI también testificó que la agencia policial consideraba los hechos ocurridos el 6 de enero como un acto de «terrorismo doméstico». Cuando el representante Eric Swalwell (D-Calif.) le preguntó si los sucesos del 6 de enero en el Capitolio fueron una «insurrección», Wray respondió que cree que sería inapropiado describir la irrupción como tal.
«En mi papel como director del FBI, porque ese es un término que tiene un significado legal, realmente tengo que ser cuidadoso con el uso de palabras como esas», dijo Wray, añadiendo que lo que diga podría afectar a los casos criminales en curso.
Los legisladores demócratas, durante la iniciativa de impeachment contra el expresidente Donald Trump en el mes de enero, ampliamente impulsaron la narrativa de que la irrupción del 6 de enero fue una «insurrección». Nadie que haya participado en la intrusión fue acusado de insurrección.
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