Análisis de noticias
Una iniciativa bipartidista de la Cámara de Representantes de Estados Unidos para denunciar a los agentes estatales extranjeros que atacan a los disidentes en suelo estadounidense fue celebrada por los activistas chinos de derechos humanos, incluida una reciente víctima de represión de la China comunista, que se encuentra en San Francisco.
La legislación de la Cámara de Representantes, denominada formalmente Ley de Información sobre la Represión Transnacional de 2024, fue presentada el mes pasado por el representante Adam Schiff (D-Calif.), miembro de la Comisión Judicial. El proyecto de ley está copatrocinado por varios legisladores de la Cámara de Representantes, entre ellos los representantes David Valado (R-Calif.), Daniel Goldman (D-N.Y.), y James McGovern (D-Mass.).
Si se promulga el proyecto de ley, el fiscal general de Estados Unidos, en coordinación con las agencias federales pertinentes, tendría que presentar un informe anual a los comités de la Cámara de Representantes y del Senado sobre los casos de represión transnacional contra ciudadanos estadounidenses o personas en Estados Unidos. Los comités incluirían a los de asuntos exteriores e inteligencia de ambas cámaras.
Cada caso enumerado en el informe deberá contener información sobre medidas diplomáticas, actuaciones policiales y medidas de protección proporcionadas a las víctimas.
«Con la represión transnacional en aumento, el pueblo estadounidense merece saber si los gobiernos extranjeros están trabajando para intimidar, acosar, dañar o matar a individuos dentro de Estados Unidos a los que consideran hostiles a sus regímenes», dijo el representante Schiff en una declaración el mes pasado.
El proyecto de ley nombra a cuatro países —Arabia Saudí, India, Irán y China— por cometer actos de represión transnacional en Estados Unidos.
«China ha intentado silenciar a sus críticos empleando la intimidación y acoso, en particular contra los miembros de la diáspora china que viven en Estados Unidos, pero tienen parientes, ciudadanía o vínculos financieros con China continental o Hong Kong», dice el proyecto de ley.
El proyecto de ley destaca la violencia en las calles de San Francisco ocurrida en noviembre del año pasado, cuando algunos partidarios del Partido Comunista Chino (PCCh) atacaron a manifestantes pacíficos de China, Turkestán Oriental, Hong Kong y Tíbet que se encontraban allí para protestar por la visita del líder del PCCh, Xi Jinping, a la ciudad con motivo de la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
Según el texto del proyecto de ley, los ataques se llevaron a cabo «con la ayuda de diplomáticos chinos».
Incidente de San Francisco
Una de las víctimas de los ataques de San Francisco fue Chen Chuangchuang, abogado con sedes en Nueva York y Los Ángeles y director ejecutivo del Comité Nacional del Partido de la Democracia de China.
En una entrevista reciente con The Epoch Times, el Sr. Chen elogió a los legisladores de la Cámara por su esfuerzo y afirmó que la represión transnacional del PCCh amenaza la seguridad y los intereses nacionales de Estados Unidos.
«Esta es una forma de recordar a la gente del mundo libre que la amenaza del PCCh es real y seria», dijo Chen.
También indicó, que el mundo libre -incluidos Estados Unidos, Australia, Europa y Canadá- necesita «estar con el pueblo chino que persigue la libertad».
Los detalles de los ataques a manifestantes pacíficos, durante la visita de Xi, se documentaron en julio en un informe publicado por el Consejo de la Democracia de Hong Kong y los Estudiantes de un Tíbet Libre. El Sr. Chen fue «rociado con gas pimienta en la cara por un simpatizante del PCCh» el 16 de noviembre de 2023, a las puertas del Moscone Center, donde se celebraban las reuniones de la APEC.
Según el informe, el SR. Chen identificó a su agresor como «un socio» de Joe Ma Zuolin, presidente de la Asociación Toishan de East Bay. El informe alega que dicha asociación «ha mantenido una relación cordial con el consulado de la RPC [República Popular China] de San Francisco».
El informe ofrece varias recomendaciones políticas a Washington, entre ellas instar al Departamento de Justicia a investigar las actividades de las organizaciones de influencia exterior del Frente Unido del régimen chino en Estados Unidos.
Wang Juntao, presidente del Comité Nacional del Partido de la Democracia de China, declaró recientemente a The Epoch Times que era alentador conocer el proyecto de ley de Schiff.
«Yo creo que ahora vemos que todos los diferentes ámbitos de la comunidad internacional tienen una comprensión cada vez más clara de la naturaleza del PCCh», dijo Wang.
«Si el PCCh domina el mundo, Estados Unidos no tendrá su propia seguridad».
Persecución
La legislación de Schiff también menciona los intentos del PCCh de reprimir a uigures, tibetanos y practicantes de Falun Gong en el extranjero.
«Hay más pruebas de que China sigue reprimiendo a los miembros de las comunidades étnicas uigures que viven en el extranjero, amenazando a sus familiares con la detención. China también vigiló a activistas tibetanos», dice el proyecto de ley.
«También hay pruebas creíbles de que China reprime las libertades de los miembros de Falun Gong».
Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual que anima a sus adeptos a vivir según enseñanzas morales basadas en los principios de veracidad, benevolencia y tolerancia. A finales de la década de 1990, esta práctica gozaba de gran popularidad en China y, según estimaciones oficiales, el número de personas que la practicaban superaba los 70 millones.
Percibiendo la popularidad de la práctica como una amenaza para su dominio, el PCCh ordenó la erradicación de Falun Gong en 1999, lanzando una campaña para arrestar violentamente a los practicantes de Falun Gong y arrojarlos a prisiones, centros de lavado de cerebro y campos de trabajos forzados.
El Centro de Información de Falun Dafa informó sobre dos incidentes ocurridos el mes pasado en el barrio Chinatown de Brooklyn como ejemplos de la represión transnacional del PCCh contra Falun Gong en Estados Unidos.
Los incidentes ocurrieron el 14 de septiembre, cuando los practicantes de Falun Gong realizaban un desfile conmemorando el próximo Festival del Medio Otoño.
Durante el desfile, un hombre chino no identificado escupió a una practicante de Falun Gong antes de golpear a otra, y otro hombre chino no identificado golpeó a un tercer practicante de Falun Gong una vez finalizado el desfile, según el centro.
El ataque de Brooklyn suscitó la condena de los legisladores locales de Nueva York.
Sheng Xue, periodista y escritora residente en Canadá, dijo que la legislación es «muy importante».
«Muchos estadounidenses creían que mientras ayudaran a China a convertirse en un país abierto y rico (…) China se transformaría en un país democrático», declaró Sheng a The Epoch Times, añadiendo que quienes mantienen esta creencia no comprenden realmente la naturaleza tiránica del régimen chino.
Tal creencia permitió al PCCh «expandir su influencia sin escrúpulos en Estados Unidos» y atacar a quienes han huido de China, dijo la periodista.
«Esto perjudicó enormemente al sistema político y a la seguridad nacional de Estados Unidos. Por ello, este proyecto de ley es esencial», afirmó Sheng.
Con la contribución de Luo Ya
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