La policía de Tempe, Arizona, hizo un llamado al público en general para que ayude a localizar un sospechoso o los sospechosos responsables de disparar varias veces contra un edificio de campaña del Comité Nacional Demócrata (DNC) en las últimas semanas.
El edificio del DNC recibió impactos en tres ocasiones, desde el 16 de septiembre, que parecen ser disparos, informó la policía de Tempe en una declaración.
El primer incidente tuvo lugar el 16 de septiembre a las 12:09 horas, seguido de un segundo tiroteo el 23 de septiembre a las 12:35 horas.
Después, el 6 de octubre a las 12:21 horas, la oficina de campaña —que antes albergaba una barbería y está situada cerca de una guardería y un gimnasio— nuevamente fue supuestamente atacada con disparos.
Según la policía, no había nadie en el interior del edificio en ninguno de los momentos en que se produjeron los supuestos disparos, y no se ha informado de heridos en ninguno de los tiroteos.
Una ventana del edificio sufrió algunos daños durante el último tiroteo, según la policía. Una foto compartida junto a la declaración muestra algunos de los daños.
La policía de Tempe no informó el posible motivo de los disparos.
La última declaración de la policía incluye imágenes de circuito cerrado de televisión de un vehículo que las fuerzas del orden creen que pertenece al sospechoso responsable de los tiroteos. Se trata de un Toyota Highlander plateado de 2008-2013 con techo solar y llantas de cinco radios.
El local de Tempe es una de las 18 oficinas en terreno de la vicepresidenta Kamala Harris en Arizona.
Harris, la candidata demócrata a la presidencia, tiene previsto celebrar un mitin de campaña en Phoenix el 10 de octubre, en plena votación anticipada en persona.
Una campaña marcada por la violencia política
Su rival, el expresidente Donald Trump, candidato presidencial republicano, también celebrará un mitin el 13 de octubre, en Prescott Valley, un bastión republicano a unos 144 kilómetros al norte de Phoenix.
Los disparos contra el edificio del DNC se produjeron en un momento en el que la violencia política ha empañado la temporada de campaña presidencial de este año, en la que Trump ha sido blanco de dos intentos de asesinato, incluido uno en un mitin de campaña en Butler, Pensilvania, en julio, en el que murió un hombre y resultaron heridos otros dos asistentes al evento, así como el expresidente.
En otro incidente, múltiples paquetes «sospechosos» han sido entregados a funcionarios electorales en más de una docena de estados en los últimos meses, provocando investigaciones y evacuaciones de los sitios donde fueron recibidos.
Secretarios de Estado y oficinas electorales de Iowa, Kansas, Nebraska, Tennessee, Wyoming y Oklahoma se encuentran entre los que recibieron este tipo de paquetes.
Hasta el momento no se informan heridos relacionados con los paquetes sospechosos, y al parecer ninguno de estos contenía material peligroso.
Reconociendo el aumento de las amenazas, el Congreso aprobó la semana pasada por unanimidad un proyecto de ley por el que se exige al Servicio Secreto de Estados Unidos que aplique las mismas normas a la hora de asignar agentes a los principales candidatos presidenciales, que a los presidentes y vicepresidentes.
La policía busca la ayuda del público
La policía de Tempe está buscando la ayuda del público para identificar quién puede estar detrás de los disparos contra el edificio del DNC. Las autoridades están pidiendo a los miembros del público con información que llamen a Testigo Silencioso, al 480-WITNESS, o al 480-TESTIGO, para hispanohablantes.
Los miembros del público también pueden dejar pistas anónimas en línea haciendo clic aquí.
Silent Witness ofrece una recompensa de 1000 dólares por cualquier información que conduzca a la detención o inculpación del sospechoso o sospechosos implicados en los disparos.
Con información de The Associated Press
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