La doctora que realizó un aborto del feto de una niña de 10 años y habló sobre el procedimiento con la prensa no violó las leyes de privacidad, dijo su empleador el 15 de julio.
«Como parte del compromiso de IU Health con la privacidad del paciente y el cumplimiento de las leyes de privacidad, IU Health inicia rutinariamente revisiones, incluyendo sobre los asuntos que están en las noticias de la Dra. Caitlin Bernard», dijo la entidad para la que trabaja, la Escuela de Medicina de la Universidad de Indiana, a los medios de comunicación a través de una declaración .
«IU Health llevó a cabo una investigación con la plena cooperación de la Dra. Bernard y otros miembros del equipo de IU Health. La investigación de IU Health determinó que la Dra. Bernard cumplió con las leyes de privacidad», añadió.
Los portavoces de la universidad y un abogado que representa a Bernard no respondieron a las solicitudes de comentarios.
Bernard dijo al medio Indianapolis Star en un artículo del 1 de julio que tenía una paciente de 10 años que viajó desde Ohio para abortar.
La Ley de Portabilidad y Responsabilidad del Seguro Médico (HIPAA), una ley federal, prohíbe violar la privacidad de un paciente. La HIPAA protege la mayor parte de la información sanitaria que puede utilizarse para identificar individualmente a un paciente, como el nombre, la dirección y la fecha de nacimiento.
A su vez la ley de Indiana obliga a informar sobre los abortos de las menores de 16 años y sobre los embarazos de las menores de 15 años.
Posibles infracciones
El fiscal general de Indiana, el republicano Todd Rokita, dijo esta semana que estaba investigando si Bernard había cumplido con la ley estatal y la HIPAA.
Rokita dijo que le habían obstaculizado sus esfuerzos para obtener documentos sobre la situación por lo que pidió la ayuda del gobernador de Indiana, Eric Holcomb, otro republicano.
Poco después, el Departamento de Salud de Indiana hizo públicos unos formularios a The Epoch Times que mostraban que Bernard había informado del aborto al departamento el 2 de julio, lo que cumplía con la ley estatal.
Aunque Bernard informó del aborto como se requiere, indicó que la edad del padre era de 17 años. Unas dos semanas después, la policía de Ohio detuvo a un hombre de 27 años que, según las autoridades, se encontraba en el país de forma ilegal.
El Departamento de Servicios Infantiles de Indiana se negó a decir si Bernard presentó los formularios requeridos, citando las leyes de confidencialidad.
Todavía se está investigando
Tras hacerse público el informe, Rokita dijo que la investigación continuaba.
«Como dijimos, estamos reuniendo pruebas de múltiples fuentes y agencias relacionadas para estas acusaciones. Nuestra revisión legal sigue abierta», dijo a The Epoch Times en un correo electrónico.
Kathleen DeLaney, una abogada que representa a Bernard, dijo a los medios de comunicación que la doctora «tomó todas las medidas apropiadas y adecuadas de acuerdo con la ley y con su formación médica y ética como médica».
La abogada envió el viernes una carta de cese y desistimiento a Rokita, alegando que sus declaraciones eran falsas y difamatorias.
Los intentos de contactar a Bernard fueron infructuosos.
Bernard escribió en Twitter que «los médicos deben ser capaces de dar a las personas la atención médica que necesitan, cuando y donde la necesitan».
«Ha sido una semana difícil, pero mis colegas y yo seguiremos prestando atención sanitaria con ética, amor y valentía todos los días», dijo a continuación añadiendo que espera «poder compartir mi historia pronto».
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