The Epoch Times recientemente obtuvo documentos de las oficinas de asuntos exteriores del gobierno chino, revelando cómo Beijing manejó incidentes importantes que involucraban a ciudadanos chinos en el extranjero o a extranjeros en el continente. Un experto dijo que los documentos demostraban que el Partido Comunista Chino (PCCh) se preocupa principalmente por su propia imagen e intereses políticos.
Trágico accidente de autobús en Corea del Norte
En la noche del 22 de abril de 2018, un autobús que transportaba turistas chinos se cayó desde un puente en la provincia de Hwanghae del Norte, al sur de la capital de Corea del Norte, Pyongyang, matando a 36 personas, entre ellas 32 turistas chinos y 4 norcoreanos. Dos turistas chinos resultaron gravemente heridos.
El dirigente norcoreano Kim Jong Un visitó la Embajada de China en Pyongyang y expresó sus condolencias, y también visitó a los heridos en el hospital.
En contraste con la cobertura de alto perfil de Corea del Norte, las autoridades chinas no proporcionaron una explicación detallada del accidente ni publicaron los nombres de las víctimas en ese momento.
Un documento filtrado de la oficina municipal de relaciones exteriores de la ciudad de Cangzhou, provincia de Hebei, de fecha 20 de diciembre de 2018, reveló la forma en que las autoridades chinas manejaron el accidente.
El informe dice que el personal de la oficina «controló inmediatamente la opinión pública» en la mañana del 24 de abril de 2018, poco después de que se diera la noticia. Se instó a los familiares de las víctimas a que no aceptaran entrevistas de medios de comunicación extranjeros para «evitar que se exagerara» la situación. Se creó un grupo de trabajo especial para manejar el incidente y mantenerlo bajo control. El personal de la oficina acompañó a los familiares a la ciudad de Shenyang, en la provincia de Liaoning, para identificar los cadáveres de los fallecidos que fueron transportados desde Corea del Norte el 26 de abril. Durante el viaje, el grupo de trabajo trató de mantenerlos tranquilos.
De acuerdo con el documento, los miembros de la familia querían un servicio de entierro adecuado para sus familiares fallecidos en sus ciudades de origen. Sin embargo, el grupo de trabajo los «persuadió» de no hacerlo. Los fallecidos fueron cremados en Shenyang y las familias se llevaron las cenizas a casa.
El informe hizo hincapié en la importancia de «asegurar la estabilidad política general», dado que la tragedia ocurrió durante «la actual etapa crítica de los lazos entre China y Corea del Norte».
Menos de dos semanas después del accidente, el líder chino Xi Jinping se reunió con Kim Jong Un en la ciudad de Dalian, provincia de Liaoning, el 8 de mayo de 2018.
El comentarista de asuntos chinos con residencia en EE.UU. Li Linyi dijo a The Epoch Times que había motivos políticos para restarle importancia al accidente. Dijo que el PCCh quería apaciguar a Kim y mantener estrechos lazos con su aliado comunista. En ese momento, señaló Li, Beijing había estado bajo presión por la guerra comercial con Estados Unidos que comenzó en marzo de 2018, cuando este último impuso aranceles sancionadores a las importaciones chinas por valor de miles de millones.
China es el mayor socio comercial de Corea del Norte, ya que representa el 90 por ciento de su volumen comercial.
Caso de secuestro en Corea del Sur
En un documento de la oficina municipal de relaciones exteriores de la ciudad de Hengshui, provincia de Hebei, de fecha de 20 de noviembre de 2017, se describía la forma en que las autoridades locales manejaron un caso de secuestro en el que estaban implicados ciudadanos de Corea del Sur.
El 11 de julio de 2017, tres ciudadanos surcoreanos, de apellido Jeong, Lee y Kim, fueron arrestados por el presunto secuestro de un compatriota surcoreano de apellido Kim, después de que éste no pagara los 4.5 millones de yuanes (unos 687,000 dólares) que le había pedido prestados a Jeong.
Seis días más tarde, el caso se abandonó después de que la oficina local de asuntos exteriores recibiera una solicitud de visita de los funcionarios consulares de Corea del Sur.
Según el documento, las autoridades locales declararon que Jeong «no era socialmente peligroso» y lo liberaron el 4 de agosto de ese año, «en espera de un juicio».
El comentarista Li Linyi dijo que había motivos políticos detrás de la liberación del surcoreano debido a las delicadas relaciones entre China y Corea del Sur en ese momento. Li señaló que el incidente ocurrió poco después de que el sistema antimisiles THAAD del ejército de EE.UU. fuera introducido en Corea del Sur en marzo de 2017, en respuesta al aumento de las pruebas de misiles nucleares de Corea del Norte.
La medida enfureció al PCCh, que alegó que Estados Unidos podía usar el sistema THAAD para espiar el espacio aéreo chino. El régimen chino pronto inició una represalia económica contra Corea del Sur, boicoteando las mercancías y evitando que los turistas chinos visitaran el país. Pero después de que Corea del Sur aceptara no ampliar su sistema THAAD, las relaciones entre los dos países comenzaron a mejorar y Beijing retiró las sanciones. El 6 de julio de 2017, el líder chino Xi y el presidente surcoreano Moon Jae-in se reunieron por primera vez en la reunión del G-20 en Hamburgo, Alemania. Los ciudadanos surcoreanos fueron detenidos aproximadamente al mismo tiempo.
Para el PCCh, los intereses políticos son mayores que los derechos humanos y el estado de derecho. Este es el principio constante del PCCh en el manejo de los asuntos exteriores, dijo Li.
Con información de Gu Qing’er.
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