Ghislaine Maxwell, la socia de Jeffrey Epstein, consiguió chicas que trabajaban en la casa del delincuente sexual haciéndole masajes, según documentos recientemente revelados.
Maxwell “estuvo involucrada en la búsqueda de chicas para realizar masajes y trabajar en la casa de Epstein”, dijo Joseph Recarey, un detective de Palm Beach, lugar donde Epstein poseía una casa, en una declaración realizada en 2016 que se hizo pública esta semana.
Aproximadamente 30 chicas fueron buscadas para dar o terminaron dando masajes en la casa [de Epstein], agregó. Solo dos de ellas tenían experiencia dando masajes antes de ser contratadas.
En otra declaración, John Alessi, el administrador de la casa de Epstein, dijo que la mayoría de las mujeres que dieron masajes provenían del condado de Palm Beach. Calculó que durante el período de 10 años que Maxwell estuvo en la casa, más de 100 mujeres diferentes, que le dijeron que eran masajistas, vinieron a la casa.
Alessi limpiaba después de los masajes, que tanto Epstein como Maxwell recibían. Describió que en varias ocasiones encontró juguetes sexuales después de los masajes y los puso en el armario de Maxwell.
«Porque sabía que era allí donde se guardaban», dijo. «Porque sé dónde estaba todo en esa casa. Cada habitación, cada cosa tenía un lugar, y cada cosa era organizada por mí, por la señora de la limpieza o por mi esposa».
Los cientos de documentos, principalmente expedientes judiciales y declaraciones, fueron desvelados en el caso Giuffre contra Maxwell, un caso federal presentado por Virginia Roberts, también conocida como Virginia Giuffre.
Roberts alega que Maxwell y Epstein abusaron repetidamente de ella sexualmente y la traficaron con varios hombres, incluido el príncipe Andrew.
La jueza federal de distrito Loretta Preska, nominada por George H. W. Bush, ordenó a principios de este mes que se desclasificaran los documentos.
Hacer públicos los documentos no dañaría el derecho de Maxwell a un juicio justo en el caso penal pendiente en su contra, dijo la juez, de acuerdo con los medios de comunicación. Otra jueza, la jueza de distrito estadounidense Alison Nathan, que supervisará el juicio cuando comience en noviembre, dictaminó recientemente que dos declaraciones de Maxwell de 2016, en el caso Giuffre, podrían usarse en el juicio.
Maxwell, de 59 años, enfrenta cargos que incluyen tráfico sexual. Está acusada de conseguir niñas menores de edad para que Epstein las abusara entre 1994 y 2004.
Epstein, en 2019, a la edad de 66 años, fue encontrado muerto en una cárcel federal de Nueva York mientras esperaba el juicio por cargos de tráfico sexual. Su muerte fue declarada como un suicidio por ahorcamiento.
Maxwell dijo en una de las declaraciones recién desveladas que estuvo en Palm Beach «menos de la mitad del tiempo» y que «apenas recordaba» a Giuffre antes de que se presentara el caso civil.
Varias mujeres han dicho que fueron abusadas sexualmente por Epstein, quien supuestamente las violaría mientras le daban un masaje o después. Algunas recordaron que les pagaron en efectivo después de cada encuentro.
Epstein se declaró culpable por el cargo de solicitar la prostitución a una menor, en 2008, a cambio de que se retiraran otros cargos. Una investigación del Departamento de Justicia encontró que los fiscales federales, que supervisaron el acuerdo de culpabilidad, ejercieron «mal juicio» pero no cometieron «mala conducta profesional». Una investigación del Departamento de Aplicación de la Ley de Florida descubrió que los funcionarios del estado trataron a Epstein de manera diferente al preso promedio, pero no violaron ninguna ley.
Maxwell dijo que comenzó a trabajar para Epstein en 1992, inicialmente como consultora. “Lo que hice fue ayudar a decorar casas y contratar personal para ayudar a administrar esas casas”, dijo.
Epstein poseía propiedades en Florida, Nueva York, Nuevo México y las Islas Vírgenes de EE.UU.
“La naturaleza de mi relación laboral con él cambió con el tiempo, así que desde alrededor de 2002 a 2003, el trabajo disminuyó considerablemente”, dijo, sin dar más detalles. Pero ella continuó «ayudándolo de una manera muy nominal» hasta 2008 o 2009.
Según los abogados de Giuffre, Maxwell tuvo una relación sentimental en un momento con Epstein y compartió una casa con él de 1999 a 2002. También convivieron durante otros periodos.
Otro documento publicado el jueves mostró que Rinaldo Rizzo, un exchef del administrador de fondos de cobertura Glenn Dubin, relató que Maxwell y Epstein entraron a la casa de Eva Anderson, una exnovia de Epstein, con una niña de 15 años.
Rizzo dijo que él y su esposa estaban en la cocina preparando la cena cuando Anderson llevó a la niña a la habitación y le dijo que se sentara en un taburete.
«Ella procede a decirnos a mi esposa y a mí que estaba teniendo una conversación acalorada, no una conversación casual», dijo en una declaración. “De repente, ‘estaba en una isla, estaba en la isla y estaba Ghislane, estaba Sarah’, dijo, ‘Me pidieron sexo y dije que no’”.
La niña dijo que no sabía cómo llegó a la casa y dijo que Maxwell tomó su pasaporte antes de amenazarla.
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