El Departamento de Justicia (DOJ) de Estados Unidos dio a conocer el lunes una acusación contra el Dr. Eithan Haim, quien el año pasado filtró evidencias de que se estaba realizando tratamiento hormonal cruzado en un hospital de Texas, a pesar de que el centro de salud afirmaba haber detenido dichos procedimientos. El médico se enfrenta a cuatro cargos por presuntas violaciones de una ley de registros médicos que podrían llevarlo a prisión por hasta 10 años.
El DOJ anunció el 17 de junio que había acusado al Dr. Haim de obtener información sanitaria individual protegida de los pacientes que no estaban bajo su cuidado, actuando supuestamente sin autorización y con la intención de causar un daño malicioso al Texas Children’s Hospital.
La controversia se centra en el hecho de que el Texas Children’s Hospital (TCH), el hospital infantil más grande del país, declaró públicamente en marzo de 2022 que suspendió las «terapias de prescripción relacionadas con hormonas para servicios de afirmación de género» para menores, alegando posibles responsabilidades legales y penales después de que el fiscal general de Texas, Ken Paxton, declarara que la prescripción de bloqueadores de la pubertad era un «abuso infantil» según la ley de Texas.
Los documentos filtrados por el Dr. Haim supuestamente muestran que el hospital continuó realizando algunas terapias de «afirmación de género» después del anuncio, incluyendo un procedimiento en un niño de 11 años tres días después de hacer la declaración.
Los legisladores de Texas aprobaron una prohibición de los procedimientos de cambio de sexo y de las prescripciones de bloqueadores de la pubertad para niños, que entró en vigor a mediados de 2023 tras un recurso judicial. El Texas Children’s Hospital declaró ese año que ya no ofrecería ningún procedimiento médico transgénero para niños.
El Dr. Haim, que debía comparecer en la corte el 17 de junio ante la jueza Yvonne Y. Ho en Houston, se enfrenta a 10 años de prisión y a una multa máxima posible de 250,000 dólares si es declarado culpable de violar la Ley de Portabilidad y Responsabilidad del Seguro Médico (HIPAA).
Una solicitud de comentarios sobre la acusación del Dr. Haim enviada al departamento de relaciones públicas del Texas Children’s Hospital no fue respondida de inmediato.
Alamdar Hamdani, fiscal federal del Distrito Sur de Texas, quien anunció la acusación del Dr. Haim, dijo en una declaración que el «acusado se presume inocente a menos que sea condenado a través del debido proceso legal».
El 16 de junio, un día antes de comparecer ante la corte, el Dr. Haim emitió un mensaje sobre el caso.
«Nosotros nos enfrentaremos a aquellos que están empeñados en corromper nuestras instituciones y que están destruyendo el futuro que mi hija se merece», escribió en un posteo en X. «Así que a todos los padres ahí fuera, les diría una cosa. Nunca debemos someternos a los destructores de nuestros hijos, debemos luchar sin descanso para preservar su dignidad, y debemos estar dispuestos a sacrificarnos por su futuro».
Más detalles
El año pasado, el Dr. Haim filtró anónimamente pruebas a Christopher Rufo, del City Journal, de que el Texas Children’s Hospital (TCH) estaba realizando tratamientos transgénero a menores en los días posteriores de su anuncio público en 2022, de que dejaría de ofrecer dichos procedimientos.
«Después de evaluar las acciones del fiscal general y del gobernador, Texas Children’s Hospital pausó las terapias de prescripción relacionadas con hormonas para servicios de afirmación de género. Esta medida se tomó para proteger a nuestros profesionales sanitarios y a las familias afectadas de posibles ramificaciones legales penales», declaró el TCH en una declaración enviada a los medios de comunicación el 20 de marzo de 2012.
Esto se produjo después de que el fiscal general de Texas emitiera en febrero de 2022 un dictamen del Departamento de Servicios Familiares y de Protección de Texas según el cual ciertos procedimientos realizados en menores «como la castración, la fabricación de un ‘pene’ utilizando tejidos de otras partes del cuerpo, la fabricación de una ‘vagina’ que implique la extirpación de órganos sexuales masculinos, la prescripción de supresores de la pubertad e inductores de la infertilidad, y similares son todos ‘abusos’ en virtud de la sección 261.001 del Código de Familia de Texas».
En su declaración, anunciando una pausa en ciertas terapias de «afirmación de género», el Texas Children’s Hospital (TCH) dijo que su misión era «crear un futuro más saludable para todos los niños, incluidos los niños transgénero, dentro de los límites de la ley».
El artículo del Sr. Rufo citó los documentos proporcionados por el Dr. Haim y concluyó que, a pesar del anuncio del TCH, el hospital no había dejado de realizar procedimientos transgénero en menores, incluido el uso de bloqueadores implantables de la pubertad.
El artículo del Sr. Rufo cita a la portavoz del TCH, Kelley Carville, que declinó hacer comentarios en ese momento.
Una solicitud de comentarios sobre el caso enviada a la Sra. Carville no fue devuelta inmediatamente.
En un artículo de seguimiento, el Sr. Rufo escribió que «nada en la información que se me proporcionó identificaba a ningún individuo» y que los documentos proporcionados por el Dr. Haim estaban «cuidadosamente tachados».
Una de las abogadas del Dr. Haim, Marcella Burke, expresó su confianza en que el juicio terminaría con la declaración de inocencia de su cliente, citó el Sr. Rufo.
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