China no respondió a una invitación para formar parte de la Coalición Global para Abordar las Amenazas de las Drogas Sintéticas, probablemente debido a sus tensas relaciones diplomáticas con Estados Unidos, dijeron funcionarios.
El secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, declaró que Estados Unidos se está uniendo a más de 80 países y decenas de organismos internacionales para luchar contra los opioides sintéticos como el fentanilo.
El Sr. Blinken pronunció el discurso de apertura de las reuniones virtuales que la coalición celebró el 7 de julio para que los líderes mundiales compartieran recursos, estrategias e información en la batalla para controlar las drogas sintéticas.
China es una de las principales fuentes de los precursores utilizados en la producción de fentanilo, un grave problema en Estados Unidos.
En una conferencia de prensa en línea sobre las reuniones de la coalición el día anterior, Todd D. Robinson, secretario adjunto para Narcóticos Internacionales y Aplicación de la Ley, dijo que los chinos habían trabajado previamente en estrecha colaboración con Estados Unidos y que la puerta sigue abierta para reanudar esa cooperación.
«En el pasado hemos cooperado con éxito con la República Popular China en la lucha contra los estupefacientes. Ellos no se han comprometido con nosotros en esta cuestión en los últimos meses, seguimos buscando activamente su cooperación», dijo el Sr. Robinson.
A su vez, China sigue conversando con otros países de la coalición, añadió el vicesecretario, indicando que estos podrían persuadirla para que cumpla con su parte.
«Ahora que la RPC no está hablando con Estados Unidos, ellos están hablando con otros países, y esa es parte de la razón por la que estamos tratando de reunir esta coalición para involucrar a los otros países», dijo el Sr. Robinson.
«No se trata solo de Estados Unidos y la RPC».
Al parecer, la falta de canales abiertos entre ambas naciones ha provocado el nerviosismo internacional, y la reticencia de Beijing a entablar conversaciones militares periódicas con Washington ha alarmado a los vecinos de China.
La guerra entre Rusia y Ucrania ha puesto de relieve la relación entre Rusia, Estados Unidos y China, atrayendo la atención internacional. Robinson afirmó que abordar el problema de los opiáceos sintéticos podría ayudar a salvar las distancias.
«Este es un problema global que va a requerir una respuesta global. Nosotros creemos que el compromiso de otros países con la RPC acabará dando sus frutos», afirmó el Sr. Robinson.
Se espera que México, cuna de los cárteles que producen y trafican con fentanilo en Estados Unidos, participe.
«México está a bordo», afirmó Robinson.
En su discurso de apertura, Blinken esbozó el alcance del problema en Estados Unidos, donde tan solo el fentanilo es el principal asesino de personas de entre 18 y 49 años. El año pasado murieron 110,000 personas por sobredosis. Dos tercios de ellas por opioides sintéticos, dijo el secretario.
Las drogas se cobraron más vidas que las armas y los accidentes de automóvil juntos, agregó Blinken
«Estados Unidos no está solo ante este reto».
Según Blinken, los cárteles de droga y la delincuencia organizada han adoptado y cooptado procesos empresariales legítimos para realizar su trabajo. Son expertos en adaptarse a las condiciones del mercado, incluidos los esfuerzos de las fuerzas del orden por acabar con ellos.
«Este comercio ilícito se asienta sobre los pilares del comercio legítimo», afirmó el Sr. Blinken.
Estados Unidos presentará un plan en tres fases
El secretario de Estado declaró que Estados Unidos presentaría a la coalición un plan en tres fases. Este plan incluiría la interrupción del tráfico de precursores para detener la fabricación de las drogas, la colaboración con otros países para detectar amenazas emergentes y pautas de consumo de drogas en la sociedad, y la promoción de servicios de salud pública para hacer frente a la adicción.
El Sr. Blinken afirmó que la mayoría de los miembros de la coalición ya están trabajando en este tipo de programas. Él espera que la coalición pueda tomar las mejores características de cada uno y aplicarlas.
«La coalición es necesaria para aprovechar estos esfuerzos, no para sustituirlos», afirmó Blinken.
Murat Nurtleu, ministro de Asuntos Exteriores de Kazajstán, declaró que su país se enfrenta a su propio problema con los opioides, en donde el gobierno había identificado a 18,000 consumidores de drogas, pero sospecha que el número total es al menos cuatro veces mayor.
Kazajstán ha gastado 178 millones de dólares para educar a sus jóvenes sobre los peligros del consumo de drogas y hacer cumplir sus leyes, dijo el ministro Nurtleu, agregando que al menos 70 laboratorios de drogas ilícitas han sido destruidos, y que en la última semana se han incautado 16 toneladas de drogas y 72 toneladas de precursores para producir esas drogas.
Las asociaciones son esenciales
Según el ministro, la asociación con otros países es esencial.
«Nuestra fructífera asociación con Estados Unidos desempeña un papel crucial en la lucha contra las drogas ilícitas», afirmó Nurtleu.
A continuación se celebraron mesas redondas para debatir la dirección que tomaría la coalición. El Sr. Blinken dijo que con ello se había iniciado un proceso que continuará hasta marzo de 2024.
«La coalición mundial tiene previsto volver a reunirse al margen de la 78ª Asamblea General de las Naciones Unidas y de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas de marzo de 2024. Estas reuniones proporcionarán plataformas fundamentales para compartir los avances y los logros», afirmó Blinken.
Con la contribución de Kathleen Li y Angela Bright.
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