CIUDAD DE NUEVA YORK— El alcalde de Nueva York, Eric Adams, mantuvo una reunión con Tom Homan, el zar fronterizo entrante de la administración Trump, durante la cual ambos funcionarios discutieron las prioridades compartidas de las fuerzas policiales y de seguridad para 2025 y las estrategias para deportar a los infractores reincidentes.
El alcalde, que en los últimos meses se ha quejado de un «sistema de refugios sobrecargado» y ha advertido de que la inmigración descontrolada sería altamente destructiva, declaró en una rueda de prensa posterior a la reunión del 12 de diciembre que ni él ni Homan tienen ningún interés en llevar a cabo una venganza contra los inmigrantes responsables y diligentes que cumplen la ley y contribuyen a la vida de la ciudad.
«Vamos a proteger los derechos de los inmigrantes de la ciudad que trabajan duro y contribuyen a la ciudad de forma real. No vamos a ser un refugio seguro para quienes cometen delitos violentos reiterados», dijo el alcalde.
«Esa fue mi conversación con el zar de fronteras, averiguar cómo vamos por esos individuos que cometen delitos reiteradamente en nuestra ciudad».
Adams declaró que Nueva York tiene una tradición de dar la bienvenida a los inmigrantes que contribuyen a la vida económica, social y cultural de la ciudad y criticó lo que llamó «terribles errores» que han sido el resultado de una aplicación laxa de la ley.
En respuesta a las preguntas del público, el alcalde describió los esfuerzos en curso por parte de su administración para colaborar con las autoridades federales.
«Nuestro equipo legal está investigando si tenemos la autorización para sentarnos y hablar con el equipo legal de ICE para hacer operativos nuestros deseos. Una vez que tengamos esa aprobación, entonces les daremos un esquema completo de cómo va a funcionar», dijo Adams.
«Por lo que he oído del jefe entrante del ICE es que tenemos el mismo deseo, perseguir a quienes están cometiendo actos violentos repetidos entre neoyorquinos inocentes y entre inmigrantes y solicitantes de asilo».
En los últimos meses, las posturas de Adams en materia de inmigración lo han puesto en desacuerdo con algunos funcionarios de la ciudad, como el interventor Brad Lander, que recientemente anunció su decisión de presentarse a las primarias para la alcaldía el año que viene, y con la Corte Suprema del Estado de Nueva York.
En agosto, la Corte denegó la solicitud del alcalde de una medida cautelar contra el traslado en autobús de inmigrantes de Texas a Nueva York.
Fue un revés para una demanda que el alcalde había interpuesto contra empresas de autobuses chárter que, en su opinión, contribuían a sobrecargar los servicios sociales de Nueva York.
Desde la primavera de 2022, la oficina del alcalde calcula que más de 225,000 inmigrantes que entraron en Estados Unidos por su frontera sur han llegado a la ciudad de Nueva York.
La afluencia ha puesto a prueba los servicios sociales y los albergues para inmigrantes de la ciudad.
El 28 de julio de 2022, un correo electrónico de la Administración de Recursos Humanos (HRA) de la ciudad a todos los nombres de su lista de distribución instaba a todos los que pudieran hacerlo a trabajar horas extraordinarias para ayudar a hacer frente a la enorme cantidad de recién llegados.
Al día siguiente, la HRA y el Departamento de Servicios Sociales declararon la emergencia, indicando en una carta al interventor Brad Lander que 4000 inmigrantes habían entrado en el sistema local de albergues en solo los tres meses anteriores.
Cierre de albergues
Antes de reunirse con Homan, Adams ya había tomado medidas para reprimir la inmigración ilegal y reducir la infraestructura de servicios sociales que consideraba parte del problema.
El Centro de Respuesta a Emergencias Humanitarias y Socorro de Randall’s Island cerrará el 28 de febrero de 2025.
El 10 de diciembre, la oficina del alcalde anunció que su administración planeaba cerrar 25 refugios en los próximos dos meses.
Además de los refugios en el Bronx, Brooklyn, Queens y Manhattan, los refugios en muchas ciudades y pueblos del norte del estado – incluyendo Albany, Buffalo, Newburgh, Poughkeepsie y White Plains – también cerrarán.
«Vamos a seguir buscando más lugares para consolidar y cerrar, y más oportunidades para ahorrar dinero de los contribuyentes, mientras seguimos gestionando con éxito esta respuesta», declaró el alcalde.
Las medidas que persigue el alcalde no son puramente unilaterales. Estos cierres son ahora factibles, según el anuncio, porque el alcalde ha instado con éxito al gobierno de Biden a frenar la inmigración mediante órdenes ejecutivas.
Como resultado, el número de solicitantes de asilo en los albergues de la ciudad descendió durante 22 semanas seguidas y ahora se encuentra en su nivel más bajo en 17 meses.
En la medida en que busca trabajar con las autoridades federales para deportar a los delincuentes y fomentar las transiciones fuera de los refugios, los objetivos del alcalde están en gran medida alineados con la administración entrante del presidente Donald Trump, que ha prometido sellar la frontera y emprender deportaciones a partir del primer día.
Sin embargo, mientras persigue su agenda, el alcalde puede enfrentarse a la oposición vocal y sostenida y a desafíos legales del Consejo de la Ciudad de Nueva York, que a menudo ha estado en desacuerdo con él en los últimos meses, particularmente sobre vivienda e inmigración.
Así lo cree Sean Kennedy, director ejecutivo de la Coalition for Law Order and Safety, un grupo de reflexión con sede en Glen Allen, Virginia.
«Los demócratas progresistas controlan abrumadoramente el Consejo Municipal de Nueva York y han anulado repetidamente las prioridades de Adams en una miríada de asuntos. Adams no tiene carta blanca, porque el Consejo Municipal podría intervenir y bloquearle», dijo Kennedy en una entrevista telefónica con The Epoch Times.
«No cabe duda de que el consejo municipal se opondrá a cualquier cooperación que Eric Adams preste a las autoridades federales en materia de deportaciones. Es una buena señal que Adams se haya reunido con Homan y que vayan a ponerse de acuerdo, pero nada está hecho hasta que está hecho».
Además de la hostilidad del consejo de la ciudad a su agenda, Kennedy señaló que el alcalde tiene que compartir sobre sus poblemas legales.
Estos se derivan de una investigación federal sobre las acusaciones de que recibió sobornos a cambio de favores políticos a representantes del gobierno de Turquía y de que, durante su candidatura a la alcaldía, también fue beneficiario de «donantes de fachada» que canalizaron fondos desde fuera de Estados Unidos hacia su campaña.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el equipo de transición de Trump para que Homan comente la reunión. En respuesta a una solicitud de comentarios de la oficina de Adams, un portavoz remitió a The Epoch Times a la rueda de prensa del alcalde del 12 de diciembre.
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