Estados Unidos expresa preocupación por las «acciones cada vez más peligrosas e ilegales» de China en los mares de China Meridional y Oriental, declaró el jueves el secretario de Estado, Antony Blinken, a los líderes de la región.
En un discurso ante los líderes de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en Laos, Blinken también advirtió a Beijing que no utilizara el discurso del presidente taiwanés, Lai Ching-te, con motivo del Día Nacional, como «pretexto para acciones provocadoras».
En respuesta, el régimen chino culpó a Estados Unidos y a otras presencias militares fuera de la región de la inestabilidad en la vía fluvial, que Beijing reclama casi en su totalidad.
La República Popular China (RPC), controlada por los comunistas, reclama la soberanía sobre casi todo el mar de China Meridional. Rechazó un laudo arbitral internacional de 2016 de un tribunal de La Haya afiliado a la ONU que invalidaba sus reivindicaciones expansivas y ha construido y militarizado las islas que controla.
Alrededor de un tercio del comercio mundial transita por el mar, que también es rico en recursos pesqueros, gas y petróleo.
La RPC mantiene disputas territoriales con cuatro de los diez miembros de la ASEAN -Vietnam, Filipinas, Malasia y Brunei- y con Taiwán, que Beijing considera parte de la RPC.
En los últimos meses, barcos guardacostas chinos y filipinos han chocado varias veces, y Manila también ha condenado a Beijing tras el lanzamiento de bengalas contra aviones filipinos.
Estados Unidos ha advertido repetidamente que está obligado a defender a Filipinas -su aliado más antiguo en Asia- si las fuerzas, barcos o aviones filipinos sufren un ataque armado, incluso en el mar de China Meridional.
Como parte de un ejercicio militar anual, el ejército estadounidense desplegó su sistema de misiles de medio alcance Typhon en el norte de Filipinas en abril, lo que provocó repetidas protestas del régimen chino.
El presidente filipino, Ferdinand Marcos Jr., se quejó el jueves ante los líderes de la cumbre de que su país «sigue siendo objeto de acoso e intimidación» por las acciones de China, que, según él, violan el derecho internacional. Marcos pidió acelerar la negociación entre la ASEAN y China sobre un código de conducta que regule el mar de China Meridional. Los funcionarios acordaron trabajar para completar el código antes de 2026, pero las conversaciones se han visto obstaculizadas por cuestiones espinosas, como los desacuerdos sobre si el pacto debe ser vinculante.
En su intervención en nombre del presidente Joe Biden durante la 12ª Cumbre ASEAN-Estados Unidos, Blinken declaró: «Seguimos preocupados por las acciones cada vez más peligrosas e ilegales de China en los mares del Sur y del Este de China, que han herido a personas y dañado buques de naciones de la ASEAN, y contradicen los compromisos de resolución pacífica de las disputas».
El Secretario de Estado reafirmó el compromiso de Estados Unidos de «apoyar la libertad de navegación y la libertad de sobrevuelo en el Indo-Pacífico» y de proteger «la estabilidad a través del estrecho de Taiwán».
Taiwán, o la República de China (ROC), es la continuación de un poder en el exilio que controlaba China continental antes de la toma del poder por los comunistas en 1949. La RPC dijo que se esforzará por absorber Taiwán por medios pacíficos, pero no descarta anexionar la isla autogobernada por la fuerza.
En un discurso a la nación el 10 de octubre, día nacional de Taiwán, Lai, a quien Beijing ha tachado de «separatista», prometió mantener el statu quo, afirmando que la RPC y la ROC «no se pertenecen mutuamente» y que Beijing no tiene derecho a representar a Taipei.
Desde que Lai asumió el cargo en mayo, el régimen chino ha intensificado su retórica contra los llamados separatistas de Taiwán y ha declarado que los partidarios «acérrimos» de la independencia de Taiwán pueden recibir la pena de muerte, además de intensificar las actividades militares y de patrulla en el estrecho de Taiwán.
En reacción a las declaraciones de Blinken del jueves, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Mao Ning, culpó a Estados Unidos y a otros países de desestabilizar el mar de China Meridional al aumentar su presencia militar en la región.
También dijo que la disputa de Beijing con Taiwán es un «asunto interno» de China.
En un informe publicado el jueves, el centro de estudios Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, con sede en Washington, afirmó que se calcula que en 2022 transitarán por el estrecho de Taiwán mercancías por valor de 2.45 billones de dólares, es decir, más de una quinta parte del comercio marítimo mundial.
En otros lugares de la región, fuerzas chinas golpearon a pescadores vietnamitas y confiscaron sus equipos el 29 de septiembre, según el gobierno vietnamita.
El 26 de agosto, un avión militar chino invadió el espacio aéreo japonés.
The Associated Press contribuyó con este reportaje.
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