El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, ha denunciado la hostilidad del régimen chino hacia Australia y ha dicho que el mundo tiene ahora una «comprensión más realista» de la «naturaleza del régimen» después de la falta de transparencia de Beijing en torno al virus del PCCh, comúnmente conocido como el nuevo coronavirus.
En una sesión informativa para la prensa del Departamento de Estado el 20 de mayo, Pompeo dijo: «El Partido Comunista Chino (PCCh) eligió amenazar a Australia con una retribución económica por el simple hecho de pedir una investigación independiente sobre los orígenes del virus».
«Esto no está bien», continuó.
Declarando el apoyo de Estados Unidos a Australia ante el acoso del PCCh, Pompeo dijo: «Estamos con Australia y las más de 120 naciones que han aceptado el llamado estadounidense a una investigación sobre los orígenes del virus, para que podamos entender lo que salió mal y salvar vidas ahora y en el futuro».
El primer ministro de Australia, Scott Morrison, decidió no abordar las recientes sanciones de Beijing sobre la carne de vacuno y la cebada australianas como medidas de represalia debido al llamado de Australia a una investigación independiente sobre los orígenes del virus del PCCh, añadiendo que estaría decepcionado de China si ese fuera el caso.
«Trabajaremos en esas relaciones comerciales. Pero lo que nunca haremos es comerciar con nuestros valores», dijo el 14 de mayo.
El ministro de comercio federal de Australia, Simon Birmingham, dijo que el gobierno de Morrison no se involucrará en una guerra económica con Beijing a pesar de las tácticas diplomáticas de «guerrero lobo» del régimen hacia Australia.
Birmingham dijo a los periodistas el 19 de mayo que la política comercial de Australia se basa en las reglas internacionales de comercio y que el gobierno no pondrá aranceles a los productos chinos porque «no llevamos a cabo nuestra política comercial sobre una base de ojo por ojo«.
«Es bastante inapropiado. Al final, queremos que China participe y coopere con estas investigaciones tanto como queremos que el resto del mundo también lo haga», dijo al Canal 7.
Pompeo dice que el mundo está «despertando» a la amenaza que representa la China comunista
Pompeo aprovechó su disponibilidad con la prensa para hablar sobre la fallida política exterior de la administración anterior hacia China.
«Durante varias décadas, pensamos que el régimen se parecería más a nosotros… Eso no ocurrió. Subestimamos enormemente el grado de hostilidad ideológica de Beijing hacia las naciones libres», dijo.
Como resultado de la pandemia, «el mundo está despertando a ese hecho», dijo, añadiendo que el virus ha «acelerado una comprensión más realista de la China comunista».
Pompeo citó una reciente encuesta de investigación de Pew que mostraba que el 66% de los estadounidenses respondían con «opiniones desfavorables» acerca de la China comunista.
La semana pasada en Australia, una encuesta del Instituto Lowy mostró que el 69% de los australianos también piensa «menos favorablemente» acerca del régimen comunista dirigente de China.
El secretario de Estado continuó diciendo que a pesar de los esfuerzos del PCCh para anunciar positivamente sus contribuciones a la lucha contra la pandemia, éstos fueron «insignificantes comparados con el costo» para el mundo como resultado del encubrimiento de la pandemia por parte del régimen.
«Mientras estamos todos sentados aquí esta mañana, Beijing continúa negando a los investigadores el acceso a las instalaciones pertinentes, reteniendo muestras de virus vivos, censurando la discusión de la pandemia dentro de China, y mucho, mucho más», dijo.
El periodista del Epoch Times, Caden Pearson, contribuyó a este artículo.
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