El Departamento del Tesoro, a través de su Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC), sancionó a 9 miembros de la célula de “Los Chapitos” por su papel en el tráfico de drogas a Estados Unidos.
Siete de estos individuos enfrentan acusaciones ante una corte del Distrito Sur de Nueva York por una serie de cargos que incluyen el tráfico de fentanilo, tráfico de armas y lavado de dinero, según un comunicado de la OFAC.
El primero en la lista es Jorge Humberto Figueroa Benítez, un líder del aparato de seguridad de los chapitos. Figueroa «supervisa las operaciones de seguridad de ciertos miembros del Cártel de Sinaloa y coordina las actividades de fabricación y tráfico de fentanilo», detalla el documento.
A la lista se suman los hermanos Leobardo García Corrales y Martín García Corrales. La OFAC los señala por ser fabricantes de metanfetamina y fentanilo a gran escala y negociar la venta de fentanilo en Estados Unidos. También se les acusa de utilizar los ingresos del fentanilo para comprar armamento como «rifles automáticos, granadas y otras armas».
La OFAC también incluyó a Liborio Núñez Aguirre, Samuel León Alvarado y Carlos Mario Limón Vázquez. A los tres se les acusa de traficar fentanilo en grandes cantidades al país vecino, además de «operar una amplia red de laboratorios que sintetizan precursores químicos en fentanilo ilícito».
Además, Mario Alberto Jiménez Castro se incluyó en la lista por operar una organización de lavado de dinero que transfiere las ganancias del narcotráfico a los líderes del cártel de Sinaloa, a través de transacciones con dinero virtual
Por último, se sancionó a Julio César Domínguez Hernández y Jesús Miguel Vibanco García. Ambos individuos son acusados de trabajar juntos para importar, distribuir y vender cocaína y metanfetamina en Estados Unidos. Vibanco García también es señalado por coordinar las operaciones de distribución de fentanilo en Vancouver, Canadá.
Bajo estas sanciones, quedan bloqueadas las propiedades y activos en Estados Unidos de todas las personas citadas, y se prohíbe a los estadounidenses realizar transacciones comerciales con ellas.
Esta acción es el último golpe de Estados Unidos al Cártel de Sinaloa, luego que el 15 de septiembre México extraditó a Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín Guzmán Loera “El Chapo”, por delitos vinculados al tráfico de drogas.
La Administración de Joe Biden también ha pedido a México la captura de sus hermanos, Iván Archivaldo Guzmán, Jesús Alfredo Guzmán y Joaquín Guzmán.
«Estados Unidos está liderando los esfuerzos globales para detener la fabricación y el tráfico ilícitos de fentanilo, una de las principales causas de muerte entre personas de 18 a 49 años», declaró el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, en un comunicado.
Con información de EFE
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