El Departamento de Estado de EE. UU. condenó el sábado los ejercicios militares de China en el estrecho de Taiwán y alrededor de Taiwán como provocativos, diciendo que Estados Unidos está «profundamente preocupado», mientras «insta enérgicamente» a Beijing a actuar con moderación.
«Utilizar una transición normal, rutinaria y democrática como excusa para provocaciones militares corre el riesgo de escalada y socava las normas de larga data que durante décadas han mantenido la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán», dijo el Departamento de Estado en un comunicado el 25 de mayo.
El departamento agregó que está monitoreando de cerca las actividades de China «y coordinando con aliados y socios con respecto a nuestras preocupaciones compartidas».
La declaración se produce después de que China concluyera dos días de ejercicios militares alrededor de Taiwán en los que simuló ataques con bombarderos y practicó el abordaje de buques.
Taiwán, que es vista por China como una provincia separatista que eventualmente debe reunirse con el continente, condenó el sábado los ejercicios militares como una «provocación flagrante».
Los ejercicios, denominados «Espada Conjunta-2024A», fueron lanzados por el ejército chino tres días después de que Lai Ching-te se convirtiera en presidente de Taiwán, un hombre al que Beijing llama «separatista».
Los funcionarios chinos dijeron que los ejercicios fueron un «castigo» por el discurso de inauguración del presidente Lai, en el que dijo que los dos lados del estrecho de Taiwán «no están subordinados entre sí», lo que China consideró una declaración de que los dos son países separados.
Estados Unidos terminó los lazos diplomáticos formales con Taiwán en 1979 y cambió el reconocimiento a Beijing bajo la política de «Una China». Sin embargo, Washington ha mantenido una sólida relación no oficial con Taipei y se ha comprometido a proporcionarle los armamentos necesarios para defenderse.
«Estados Unidos sigue comprometido con su política de una sola China de larga data, guiada por la Ley de Relaciones con Taiwán, los Tres Comunicados Conjuntos y las Seis Garantías», dijo el Departamento de Estado en su declaración del sábado.
Las seis garantías, que fueron formuladas bajo la administración del presidente Ronald Reagan, incluyen no establecer una fecha límite para las ventas de armas a Taiwán y no presionarlo para que entre en negociaciones con China.
Durante décadas, una característica de la política estadounidense ha sido el compromiso con una resolución pacífica de las diferencias entre China y Taiwán.
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán condenó los ejercicios militares del Partido Comunista Chino (PCCh) en una declaración el 23 de mayo, diciendo que está listo para defenderse si es necesario.
«Buscamos evitar conflictos, pero no nos alejaremos de uno para garantizar la seguridad de nuestra nación y proteger nuestra hermosa patria», declaró el Ministerio en X.
En los últimos años, el PCCh se ha vuelto más beligerante con respecto a Taiwán, al que considera una provincia rebelde.
Tácticas de intimidación del PCCh
Tang Jingyuan, especialista en asuntos de China, le dijo a la edición en chino de The Epoch Times que el ejercicio fue una operación meticulosamente planificada que, entre otros objetivos, buscaba fomentar divisiones internas en Taiwán y fortalecer los sentimientos procomunistas en la isla.
«El primer objetivo principal del PCCh es afirmar su dominio y ejercer presión sobre Lai Ching-te a través de estos ejercicios militares, influyendo así en las futuras políticas domésticas y exteriores de Taiwán», dijo. «Básicamente, esto busca instilar precaución dentro de la administración de Lai Ching-te. Es una táctica típica del PCCh de intimidación a través de medios militares para moldear las políticas internas y externas de Taiwán».
«El segundo objetivo es que el PCCh movilice el apoyo interno a través de estos ejercicios militares. … Mostrar fuerza militar sirve para tranquilizar al público nacional y mantener una alta presión contra cualquier noción de independencia taiwanesa».
El Sr. Tang agregó que otro objetivo clave de los ejercicios era intentar causar división interna y conflicto en Taiwán.
«Al realizar ejercicios militares alrededor de Taiwán, el PCCh está fortaleciendo abiertamente los sentimientos procomunistas entre las fuerzas simpatizantes en la isla, exacerbando la agitación interna e intensificando la presión, lo que en última instancia fomenta mayores divisiones y fragmentación dentro de Taiwán», dijo.
Anteriormente, durante el congreso del PCCh, que se celebra dos veces por década, en octubre de 2022, el líder chino Xi Jinping dijo que «las ruedas de la historia avanzan hacia la reunificación de China», agregando que si no ocurre pacíficamente, Beijing está preparado para usar la fuerza.
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, dijo que el cronograma de China para la reunificación se ha acelerado.
«Ha habido un cambio en el enfoque de Beijing hacia Taiwán en los últimos años», dijo el Sr. Blinken en un evento en octubre de 2022.
«En lugar de adherirse al statu quo que se estableció de manera positiva, se tomó una decisión fundamental de que el statu quo ya no era aceptable y que Beijing estaba decidido a perseguir la reunificación en un cronograma mucho más rápido», continuó.
«Y si los medios pacíficos no funcionan, entonces emplearía medios coercitivos y posiblemente, si los medios coercitivos no funcionan, tal vez medidas de fuerzas, para lograr sus objetivos. Y eso es lo que está interrumpiendo profundamente el statu quo y creando tensiones tremendas», agregó el Sr. Blinken.
Las tensiones entre Estados Unidos y China aumentaron después de que la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), visitó Taiwán en agosto de 2022, con Beijing respondiendo con una ráfaga de actividad de ejercicios militares, incluido el lanzamiento de misiles en las aguas alrededor de la isla.
Mary Hong contribuyó a este informe.
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