Una importante asesora del expresidente Barack Obama que llegó a ser ejecutiva de Google, encargada de «combatir la desinformación», se incorporó a partir de esta semana como dirigente de alto rango en el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos.
Kristie Canegallo, que fue vicepresidenta de Confianza y Seguridad de Google desde marzo de 2018, fue nombrada este lunes como jefa de personal del DHS.
«Estoy emocionada de compartir con ustedes que Kristie Canegallo se une a nuestro Departamento como nuestra nueva jefa de personal el 10 de enero de 2022», dijo el secretario del DHS, Alejandro Mayorkas, a través de una declaración.
«He trabajado estrechamente con Kristie en el pasado y sé de primera mano que será una gran colega y de enorme apoyo para todos nosotros», dijo Mayorkas.
Según el sitio web de Google, la función de Canegallo era «garantizar que Google sea una fuente de información, contenido e interacciones de confianza» en toda la cartera de Google, incluyendo Google Search, Google News, YouTube y las plataformas publicitarias.
Antes de eso, Canegallo fue jefa adjunta de personal de la Casa Blanca desde 2014 hasta enero de 2017, período en el que se cruzó con Mayorkas, entonces director del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS).
Jon Feere, quien fue asesor principal del director del Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) durante la administración Trump, planteó su preocupación por el nombramiento.
«La administración Biden es plenamente consciente de que sus políticas antifronteras son salvajemente impopulares, por lo que la selección de una persona que ha pasado su tiempo eliminando opiniones en línea es ciertamente sospechosa», dijo Feere a The Epoch Times por correo electrónico.
«Ella está desempeñando ahora un papel clave en la liberación de miles de delincuentes extranjeros en nuestras comunidades y, naturalmente, verá un enorme retroceso en esta horrible agenda», añadió.
«No sería sorprendente que viera a sus antiguos colegas de Google ayudarla ampliando su definición de ‘anti inmigrante’ y sofocando aún más la expresión en línea», dijo a continuación.
While speaking at a conference in Europe, Canegallo highlighted Google’s work with the EU on their “anti-hate speech Code of Conduct”. The results show that the top category for “swift removal of illegal hate speech” is what they call “xenophobia/ anti-migrant hatred.” (cont.)… pic.twitter.com/Alxe0HqN9q
— Jon Feere (@JonFeere) January 10, 2022
En 2021, cerca de 2 millones de inmigrantes ilegales de 150 países diferentes fueron detenidos a lo largo de la frontera suroeste, más del doble que en 2019, el último año prepandémico, según datos de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
«Aunque ciertamente es necesario que Silicon Valley prohíba el contenido delictivo, se cruza rápidamente una línea cuando las preferencias políticas y las opiniones se prohíben de manera excesiva», añadió Feere, ahora director de investigaciones del Centro de Estudios de Inmigración.
«La lucha contra la desinformación» fue una parte importante del trabajo de Canegallo en Google. En 2019, en la Conferencia de Seguridad de Múnich, Alemania, ella y su equipo presentaron un libro blanco (pdf) en el que detallaron cómo Google «aborda la difusión intencionada de desinformación».
Google y otras grandes compañía de tecnología como Twitter y Facebook han sido ampliamente criticadas por su censura y sesgo político.
En un artículo de principios de 2020, titulado «Apoyo a las elecciones estadounidenses de 2020», Canegallo dijo que su equipo «abarca a todo el mundo en cuanto a monitorear e interrumpir las cuentas piratas, la actividad inauténtica, las campañas de desinformación, los ataques coordinados y otras formas de abuso en nuestras plataformas las 24 horas del día».
El programa «60 Minutes» de CBS encontró que en 2019 Google retiró más de 300 anuncios políticos del presidente Donald Trump. La CEO de YouTube, Susan Wojcicki, dijo en ese momento que algunos de los videos «no fueron aprobados para ejecutarse». Google por su parte no dio razones específicas por las que retiró los anuncios o qué política de la compañía violaban.
En un artículo publicado en diciembre de 2020, Canegallo se comprometió a luchar contra la desinformación sobre las vacunas COVID-19.
Una de las estrategias fue plantear «información autorizada». El artículo dice que desde el comienzo de la pandemia Google concedió 250 millones de dólares en subvenciones «para ayudar a más de 100 agencias gubernamentales de todo el mundo a realizar anuncios de servicio público esenciales sobre COVID-19».
«Nuestros equipos han eliminado más de 700,000 vídeos relacionados con información médica peligrosa o engañosa sobre COVID-19. También continuamos eliminando la información errónea y dañina de COVID-19 en otros productos como Ads, Google Maps, y la tienda Play», dice el artículo.
El DHS no respondió a una solicitud de The Epoch Times para hacer comentarios.
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