El régimen comunista chino concluyó tres días de provocadores ejercicios militares en torno a Taiwán. Los expertos están divididos sobre si se trató de meras posturas o de un intento más serio de prepararse para la guerra.
El ala militar del Partido Comunista Chino (PCCh) declaró que los ejercicios demostraban que el régimen estaba «listo para luchar«, tras ensayar un simulacro de cerco y bloqueo de Taiwán, isla que el PCCh afirma que forma parte de su territorio.
Sin embargo, según David Stilwell, general de brigada retirado de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y exsubsecretario de Estado, las palabras duras son solo palabras.
«Todo esto se trata de señales», declaró Stilwell a The Epoch Times.
«Ellos amenazan, y amenazan, y amenazan (…) Miren cuántas veces [China] ha amenazado con invadir y luego nunca lo cumplen».
En este sentido, Stilwell dijo que el régimen del PCCh en Beijing no comprendía plenamente hasta qué punto estaba dañando su propia reputación internacional al lanzar repetidas amenazas sin seguimiento.
Recordando los tristemente célebres comentarios del presidente Barack Obama sobre la «línea roja», Stilwell afirmó que el PCCh también estaba erosionando su propia preeminencia en la escena internacional al demostrar que no cumplía su palabra.
«Ellos, como una potencia mediocre, piensan que [hacer amenazas vacías] no tiene costos», dijo Stilwell. «Pero el aumento de las amenazas sin seguimiento básicamente erosiona cualquier confianza en su palabra, y a nivel de una gran potencia, su palabra es su mayor activo».
«La credibilidad y la legitimidad son extremadamente importantes en este momento y todavía no han hecho esa transición».
Asimismo, Stilwell afirmó que el PCCh estaba incumpliendo continuamente sus promesas y garantías a Estados Unidos y Taiwán.
Al amenazar con violencia militar y cruzar repetidamente la línea central del estrecho de Taiwán esta semana, el régimen estaba sin duda violando 50 años de promesas de no tratar de cambiar unilateralmente el statu quo con respecto a Taiwán, dijo el general en retiro.
«El acuerdo que tenemos con [China] es que la cuestión de Taiwán se resuelva mediante el diálogo, sin coacción ni uso de la fuerza, y esto es claramente coacción», dijo Stilwell.
«Llega un punto en el que van a cruzar una línea y Taiwán va a reaccionar, iniciando algo que estoy 100% seguro de que Beijing no está preparado –en este momento– para iniciar».
China se prepara para la guerra
La valoración de Stilwell sobre la capacidad del PCCh no goza de aceptación universal. De hecho, hay muchos que creen que los últimos simulacros de China representan un paso concreto en el camino hacia la guerra.
El ministro de Asuntos Exteriores de Taiwán, Joseph Wu, se encuentra entre ellos.
«(…) Ellos parecen estar tratando de prepararse para lanzar una guerra contra Taiwán», dijo Wu durante una entrevista con CNN.
«El gobierno taiwanés considera la amenaza militar china como algo que no se puede aceptar, y la condenamos».
Grant Newsham, coronel retirado de los Marines e investigador principal del Foro Japonés de Estudios Estratégicos, comparte esa opinión.
«Nosotros deberíamos tomarnos en serio a los chinos», afirmó Newsham durante una entrevista concedida el 11 de abril a China in Focus.
«En efecto, ellos han dicho que esta línea de demarcación mutuamente acordada en medio del estrecho de Taiwán (…) no importa, y [ellos] no la reconocen, y ahora están volando sus aviones a través de ella todo el tiempo».
Con ese fin, Newsham dijo que esta última serie de ejercicios formaba parte de una serie continua de preparación militar diseñada para preparar a las fuerzas del PCCh para un eventual asalto a Taiwán. Al igual que un equipo de béisbol pasa por el entrenamiento de primavera antes de que comience la temporada real, el PCCh se estaría entrenando para una guerra real.
«Todo esto tiene por objeto aumentar las capacidades chinas para lanzar un ataque eficaz y exitoso contra Taiwán», dijo Newsham. «Así que todo lo que se está viendo aquí no es un asunto puntual en el que China solo está flexionando sus músculos para conseguir que Taiwán retroceda un poco o que los estadounidenses retrocedan».
«Todo esto es mucho más significativo que un simple ejercicio de unos pocos días».
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