El abogado chino Yu Wensheng, detenido por las autoridades de su país desde 2018 y condenado el año pasado a cuatro años de prisión por «subversión», fue galardonado este viernes con el Premio Martin Ennals, uno de los más prestigiosos en la lucha por los derechos humanos.
Yu, de 53 años e incomunicado de su familia desde su detención, se impuso a otras dos finalistas, la activista saudí por los derechos de la mujer Loujain al Hathloul (liberada este miércoles tras permanecer 1001 días encarcelada) y la fotoperiodista de Turkmenistán Soltan Achilova, que con sus trabajos denunció los abusos del régimen en ese aislado país de Asia Central.
El abogado Yu es una de las personalidades más prominentes que han sido víctimas de la campaña gubernamental contra defensores legales de activistas y disidentes en China, iniciada en 2015 por el régimen comunista y que se ha saldado con más de 300 detenciones o desapariciones.
El letrado fue detenido el 19 de enero de 2018, cuando llevaba a su hijo a la escuela, un día después de que pidiera públicamente en una carta elecciones libres en China y otras reformas políticas.
En mayo de 2019 fue sometido a un juicio secreto, del que ni siquiera su familia fue informada, aunque la sentencia no se conoció hasta junio de 2020.
El delito por el que fue condenado a cuatro años de prisión, «incitar la subversión contra el poder del Estado», es comúnmente utilizado por los tribunales chinos para castigar a disidentes, activistas de derechos humanos y otros actores críticos con el régimen.
En sus escasos contactos con un abogado defensor independiente, Yu denunció haber sufrido durante su proceso torturas y maltrato, que le causaron un grave deterioro físico, y así por ejemplo ha perdido gran parte de la movilidad de su mano derecha.
Durante su carrera, Yu participó en la defensa de varios casos de derechos humanos, como los practicantes de Falun Gong (una antigua práctica espiritual china conocida por aliviar el estrés y aumentar la energía. Consiste en ejercicios de meditación sencillos y lentos y en enseñanzas sobre la incorporación de los principios de verdad, benevolencia y tolerancia en la vida cotidiana), o de compañeros de profesión, entre ellos varios detenidos en 2015 en la conocida como «redada 709».
El premio a Yu «pone al Gobierno chino sobre aviso de que encarcelarle injustamente a él o a cualquier otra persona defensora de los derechos humanos no pasará desapercibido, no silenciará sus voces», destacó Phil Lynch, director ejecutivo del Servicio Internacional para los Derechos Humanos (ISHR), una de las ONG que conceden el galardón.
El Premio Ennals es concedido de común acuerdo por diez organizaciones defensoras de los derechos humanos de reconocimiento internacional, entre las que también se encuentran Amnistía Internacional (AI), Human Rights Watch (HRW) o la Organización Internacional contra la Tortura (OMCT).
Con un monto de 50,000 francos suizos (unos 46,000 euros o unos 56,000 dólares), se entrega anualmente y lleva el nombre del que fue secretario general de AI entre 1968 y 1980.
En 2016 también fue concedido a un activista chino, el defensor de los derechos de los uigures Ilham Tohti, condenado a cadena perpetua por «separatismo» en 2014.
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