El cáncer de páncreas, a veces apodado el «rey de los cánceres» por su malignidad, plantea retos tanto en su detección precoz como en su tratamiento en fases avanzadas. Entender sus causas y señales de alarma permite tomar medidas preventivas. Rong Shu, directora de la Clínica de MTC Dr. Rong, en el Reino Unido, y experimentada practicante de medicina tradicional china (MTC) con más de 30 años de experiencia, describió las causas, los primeros síntomas y las estrategias de prevención eficaces del cáncer de páncreas en el programa «Health 1+1» de Epoch Times.
La doble función del páncreas
En la medicina occidental, el páncreas está reconocido como órgano digestivo y endocrino. Como órgano digestivo, segrega diversas enzimas para descomponer las proteínas, las grasas y los hidratos de carbono de los alimentos. Como órgano endocrino, produce insulina y glucagón para regular los niveles de azúcar en sangre, manteniéndolos en niveles adecuados, cruciales para el funcionamiento de órganos clave.
La Sra. Rong destacó que, desde la perspectiva de la MTC, el páncreas se considera parte del sistema del bazo, que incluye el páncreas, el hígado, la vesícula biliar, el bazo, el estómago y los intestinos. Este sistema es responsable de la digestión, absorción, transformación y transporte de los nutrientes de los alimentos, proporcionando energía a diversos tejidos y sistemas del cuerpo.
Azúcar y cáncer de páncreas
En el antiguo texto médico chino «El Clásico de Medicina Interna del Emperador Amarillo» o el «Huangdi Neijing», se documenta que el bazo corresponde a la dulzura. La Sra. Rong explicó que, si bien una pequeña cantidad de dulzor puede nutrir el bazo, el exceso de dulzor puede ser perjudicial. El azúcar está presente en los alimentos dulces refinados. Ingerir demasiados alimentos dulces refinados durante mucho tiempo puede explicar el daño crónico del bazo, que puede derivar en cambios cancerosos.
Numerosos estudios confirman la estrecha relación entre el azúcar y la función pancreática, identificando el azúcar como un factor impulsor en la aparición del cáncer de páncreas. Un estudio de 2019 publicado en Cell Metabolism descubrió que los niveles elevados de azúcar en sangre desencadenaban desequilibrios metabólicos en ratones, lo que explicaba la aparición de cáncer de páncreas.
Otro estudio publicado en Cell Reports en 2020 que siguió a casi 500 mil europeos durante 20 años indicó que una dieta rica en azúcares aumentaba el riesgo de cáncer de páncreas en algunos individuos y favorecía el crecimiento y la propagación del tumor.
Retos en la detección y el tratamiento
La Sra. Rong explicó que la dificultad para detectar el cáncer de páncreas en sus primeras fases se debe a la ubicación del páncreas. A menudo denominado «órgano oculto», el páncreas está escondido detrás de otros órganos. Esta situación hace casi imposible que los médicos puedan palparlo durante una exploración física e, incluso con una ecografía, captar imágenes nítidas del páncreas es todo un reto.
Además, cuando los tumores se forman y crecen en el páncreas, no suelen causar síntomas perceptibles. Incluso si aparecen síntomas, rara vez se reconoce que estén relacionados con problemas pancreáticos, lo que hace improbable su detección precoz. A menudo, los síntomas sólo se manifiestan cuando las células tumorales hicieron metástasis en otros órganos.
Según Limor Appelbaum, instructora de la Facultad de Medicina de Harvard y oncóloga radioterapeuta, «aproximadamente el 80-85 por ciento de los pacientes con cáncer de páncreas se diagnostican en fases avanzadas, en las que la curación ya no es una opción».
A finales de 2023, investigadores de la Facultad de Medicina de Harvard y del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) desarrollaron conjuntamente un nuevo modelo de detección del cáncer de páncreas denominado PRISM, que puede detectar el 35% de los adenocarcinomas ductales pancreáticos, el tipo más común de cáncer de páncreas, en comparación con el 10% del cribado convencional.
Opciones de tratamiento limitadas
Además, las células del cáncer de páncreas son agresivas y muestran resistencia a múltiples niveles de tratamiento, por lo que la curación completa resulta muy difícil. Según la Sociedad Americana del Cáncer, la tasa de supervivencia relativa a cinco años del cáncer de páncreas es sólo del 13%.
Las opciones de tratamiento del cáncer de páncreas siguen siendo muy limitadas. El principal tratamiento quirúrgico es la pancreaticoduodenectomía, pero menos del 20% de los pacientes con cáncer de páncreas pueden someterse a esta intervención.
Además de la cirugía, las opciones de tratamiento para el cáncer de páncreas incluyen quimioterapia, radioterapia, terapia farmacológica dirigida e inmunoterapia. Sin embargo, estos métodos suelen ser ineficaces para curar el cáncer de páncreas y pueden causar daños importantes en el organismo.
La MTC como tratamiento complementario
Rong relató un caso reciente de tratamiento de un paciente con cáncer de páncreas. Un paciente en fase avanzada se sometió a cinco meses de quimioterapia sin mejoría. Cuando acudió a la clínica para una revisión, había perdido todo el pelo, tenía la cara distorsionada por el dolor y el estómago hinchado como un globo. Tras el tratamiento de acupuntura, los síntomas de la paciente mejoraron significativamente, al igual que su estado emocional.
La Sra. Rong afirmó que la intervención de la MTC puede aliviar los síntomas de los pacientes con cáncer de páncreas, reducir significativamente el dolor y mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer en fase avanzada. También demuestra cierta capacidad para inhibir la propagación de las células cancerosas o incluso facilitar la curación. Los pacientes pueden considerar la MTC como terapia alternativa u optar por una combinación de medicina occidental y MTC para el tratamiento.
Síntomas tempranos
La Sra. Rong señaló que algunos pacientes con cáncer de páncreas no presentan ningún síntoma, mientras que otros sólo experimentan algunos síntomas que a menudo se pasan por alto, como:
– Hinchazón y molestias en la parte superior del abdomen
– Picor en la piel
– Aumento repentino e inexplicable de los niveles de azúcar en sangre o ineficacia repentina de la medicación para la diabetes
– Dolor en la parte baja de la espalda, especialmente a la altura del ombligo, no relacionado con una enfermedad o lesión renal
– Coloración amarillenta de los ojos y la piel (ictericia)
Factores de riesgo
Aunque se desconoce la causa exacta de cualquier cáncer, los siguientes son factores de riesgo que pueden influir en el desarrollo del cáncer de páncreas:
– Estrés elevado, depresión y ansiedad: Un estudio demostró que la depresión puede ser un precursor del cáncer de páncreas, ya que la mitad de los pacientes con cáncer de páncreas presentan síntomas psiquiátricos 43 meses antes de que aparezcan los síntomas físicos.
– Estilo de vida poco saludable: Dieta descontrolada y patrones de sueño irregulares.
– Dieta desequilibrada: Llevar una dieta poco variada y poco saludable, como comer demasiada carne y pocas frutas y verduras.
– Malos hábitos: Fumar, beber alcohol, consumir cantidades excesivas de café y comer con frecuencia alimentos carbonizados.
– Factores de salud subyacentes: La diabetes es un factor de riesgo conocido del cáncer de páncreas.
– Pancreatitis: La inflamación crónica del páncreas puede explicar el cáncer, y los tumores benignos pueden convertirse en malignos.
– Genética: El cáncer de páncreas tiene un cierto grado de herencia familiar.
Medidas preventivas
La Sra. Rong hizo hincapié en que, para prevenir el cáncer de páncreas, es esencial realizar ajustes en el estilo de vida y cultivar hábitos saludables en la vida diaria. Considere la posibilidad de poner en práctica lo siguiente:
– Reducir la ingesta de alimentos azucarados: En su lugar, opte por alimentos ricos en proteínas y cereales integrales, frutos secos y legumbres. Por ejemplo, incorpore a su dieta pescado hervido o ligeramente frito, pollo, huevos, avena, maíz, mijo y centeno.
– Coma verduras y frutas variadas: Las verduras y frutas son ricas en antioxidantes, que combaten el estrés oxidativo y la inflamación crónica, reduciendo el riesgo de cáncer.
– Aumente el consumo de grasas saludables: Las investigaciones han demostrado que el consumo de aceite de oliva puede reducir el riesgo de cáncer.
– Haga ejercicio con regularidad: La actividad física puede reforzar el sistema inmunitario y reducir el riesgo de cáncer.
– Mantenga una mentalidad positiva y controle el estrés: La depresión puede tener cierta relación con el cáncer de páncreas. Es esencial controlar activamente el estrés e incorporar técnicas de relajación a su rutina.
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