Contestar al teléfono con un inofensivo «¿sí?» es una costumbre habitual, pero nos puede meter en un lío, ya que los ciberdelincuentes pueden aprovechar para grabar nuestra voz y utilizarla para suplantar nuestra identidad en actividades fraudulentas.
Así lo explica el Banco de España en una nueva publicación de su serie «Protégete contra el fraude», en el Portal del Cliente Financiero, donde analiza esta variante de las estafas telefónicas o «vishing», conocida como el fraude del «sí».
Actualmente no existen sistemas que permitan autorizar operaciones o contratar servicios bancarios solo con la voz, siempre se requieren otros datos personales, por lo que los delincuentes utilizarán todo tipo de artimañas para ganarse nuestra confianza y sonsacarnos más datos.
Por ejemplo, pueden suplantar al personal de un banco o de otra empresa y hacer diversas preguntas aparentemente inofensivas como «¿has autorizado una transacción ahora?» o «¿estás de acuerdo en recibir actualizaciones de nuestros servicios?».
En otras ocasiones, se inicia una locución automática que nos advierte de que hemos contratado una suscripción «prémium» en algún producto o servicio por un determinado importe y luego se interrumpe la comunicación, con objeto de que devolvamos la llamada para cancelar el servicio, para lo que nos pedirán datos como el número de cuenta, la dirección o el DNI.
En caso de recibir una llamada sospechosa de un número desconocido, lo mejor es desconfiar y colgar el teléfono, pero si se contesta, es mejor decir un «buenos días» o un «hola» y en ningún caso facilitar datos personales ni bancarios, explica la entidad.
También es aconsejable vigilar los movimientos de las cuentas bancarias para verificar que no haya nada inusual, y buscar en Internet el número de teléfono que nos ha llamado para ver si se trata de una llamada sospechosa de ser fraudulenta.
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