Al finalizar el segundo y último debate presidencial antes del día de las elecciones, el presidente Donald Trump dijo a la multitud reunida que el éxito es, en última instancia, lo que unificará a la nación y que el país está en el camino del éxito.
La moderadora del debate, Kristen Welker de NBC News, hizo su última pregunta de la noche en la Universidad Belmont en Nashville, Tennessee: «Imaginen que este es el día de su toma de posesión. ¿Qué dirá en su discurso, a los estadounidenses que no votaron por usted?»
Esta fue la única pregunta que se centró en el tema del liderazgo.
El presidente Trump, a quien se le pidió que respondiera primero, dijo: «Tenemos que hacer que nuestro país sea totalmente exitoso, como lo fue antes de la plaga que llegó de China. Ahora lo estamos reconstruyendo y estamos haciendo cifras récord, 11.4 millones de empleos en un corto período de tiempo, etc».
«Pero, les diré, vuelvan atrás— al momento de la llegada de la plaga, justo antes, recibía llamadas de personas que no eran normalmente personas que me llamaban», continuó el presidente. «Querían reunirse. Teníamos las mejores cifras de desempleo entre la población negra en la historia de nuestro país—hispanos, mujeres, asiáticos, personas con diplomas, sin diplomas, graduados del MIT; los primeros en la clase, todos tenían las mejores cifras—¿y saben qué? El otro lado quería reunirse. Querían unificarse».
«El éxito nos va a unir», dijo Trump. «Estamos en el camino del éxito».
Trump señaló que está «recortando los impuestos», mientras que Biden «quiere aumentar los impuestos de todos y quiere poner nuevas regulaciones en todo. Va a arruinarlo».
«Si él entra, tendrán una Depresión, como nunca la han visto. Sus 401(k) se irán al infierno, y será un día muy, muy triste para este país», advirtió Trump.
Al exvicepresidente Joe Biden, aspirante demócrata, también se le hizo la misma pregunta. «¿Qué dirá durante su discurso inaugural a los estadounidenses que no votaron por usted?» Welker preguntó.
«Diré que soy un presidente estadounidense. Los represento a todos ustedes, ya sea que hayan votado por mí o en mi contra, y me aseguraré de que estén representados», respondió Biden. «Voy a darles esperanza. Vamos a avanzar; vamos a elegir la ciencia sobre la ficción. Vamos a elegir la esperanza sobre el miedo. Vamos a elegir seguir adelante porque tenemos enormes oportunidades, enormes oportunidades para mejorar la situación».
«Podemos hacer crecer esta economía, podemos lidiar con el racismo sistémico. Al mismo tiempo, podemos asegurarnos de que nuestra economía esté siendo dirigida y movilizada y motivada por la energía no contaminante, creando millones de nuevos empleos. Ese es el hecho, eso es lo que vamos a hacer. Y voy a decir, como dije al principio, lo que está aquí en la boleta es el carácter de este país. Decencia, honor, respeto. Tratar a la gente con dignidad, asegurarse de que todos tengan una oportunidad. Y voy a asegurarme de que lo entiendan. No lo han conseguido en los últimos cuatro años».
El debate del jueves por la noche tuvo muchas menos interrupciones e intercambios intensos que el primer debate entre los dos candidatos, dando a ambos más tiempo para compartir sus posturas sobre varios temas, incluyendo COVID-19, seguridad nacional, cobertura médica, racismo y cambio climático.
Trump, a lo largo de la noche, retrató a Biden como un político con carrera, cuyo período en el Congreso durante los últimos 50 años fue en gran medida ineficaz en múltiples áreas, incluyendo la cobertura médica, la reforma de la justicia penal y la inmigración. El presidente también interrogó al exvicepresidente sobre los acuerdos comerciales de su familia en el extranjero, incluidos los de Ucrania y China. Haciendo un marcado contraste con Biden sobre temas clave, Trump se presentó como un defensor de la apertura del país en medio de la pandemia de COVID-19, de la reducción de impuestos y de impulsar la independencia energética, al tiempo que advirtió que los planes de Biden afectarán económicamente a las familias estadounidenses promedio.
Biden trató de hacer ver al presidente como incompetente en medio de la pandemia de COVID-19 y señaló las muertes causadas por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino) en el país, al tiempo que decía repetidamente a la audiencia que el presidente no tiene ningún plan para gestionar la crisis. También trató de presentar al presidente como alguien controlado por intereses extranjeros y un racista que no tiene ningún plan para la cobertura médica. Biden también acusó a Trump de evitar el pago de impuestos, citando un artículo del New York Times que afirmaba que tenía conocimiento de las declaraciones de impuestos del presidente.
A menos de dos semanas del 3 de noviembre, un récord de 47 millones de estadounidenses ya emitieron sus votos a través de la votación anticipada.
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