JOHANNESBURGO —Un plan para aumentar los impuestos sobre la riqueza de los 3000 multimillonarios del mundo será uno de los puntos principales del orden del día de la próxima reunión del grupo de las principales economías del G20, que se celebrará en Brasil el 18 de noviembre.
Los superricos estadounidenses son el principal objetivo del «impuesto mundial sobre la riqueza», ya que los expertos financieros los acusan de utilizar lagunas jurídicas para evitar pagar los impuestos que les corresponden.
El plan se basa en un informe del economista francés Gabriel Zucman, que afirma que el sistema es «técnicamente viable» y podría generar hasta 250,000 millones de dólares anuales de ingresos adicionales para los gobiernos.
El estudio de Zucman demostró que los multimillonarios del mundo solo pagan un promedio del 0.3% de impuestos sobre su patrimonio.
Mientras que algunos territorios no cobran ningún impuesto sobre la renta, como las Islas Caimán y los Emiratos Árabes Unidos, la riqueza y los ingresos de los ciudadanos de otras partes del mundo se gravan generalmente a tasas de entre el 15% y el 60%, según la Tax Foundation, una organización sin ánimo de lucro con sede en Estados Unidos que se centra en las políticas fiscales mundiales.
«Los superricos utilizan lagunas legales y medidas de evasión legítimas para eludir el pago de los impuestos que les corresponden», declaró Zucman a The Epoch Times.
«Explicaría mi plan como un complemento al impuesto sobre la renta, diseñado para que los multimillonarios paguen cada año una factura fiscal por valor de al menos el 2 por ciento de su riqueza».
De aplicarse, el esquema del economista haría que la persona más rica de Estados Unidos y la segunda más rica del mundo, el fundador de Tesla y SpaceX, Elon Musk, pagara casi 4000 millones de dólares anuales en impuestos sobre su fortuna actual, que asciende a 195,000 millones de dólares, según la revista Forbes.
«Estoy seguro de que estarán de acuerdo en que un 2% es muy poco si se tiene en cuenta lo que la gente normal paga en impuestos en todo el mundo», dijo Zucman.
A finales de julio, los ministros de Finanzas del G20 anunciaron que cooperarían para que los superricos pagaran sus impuestos, pero no llegaron a un acuerdo más sustancial.
La Unión Africana y algunos países de la Unión Europea, entre los que destacan Francia y España, lideran la propuesta de un impuesto mundial sobre la riqueza de los multimillonarios, dos tercios de los cuales residen en Estados Unidos y China.
Según Forbes, en Estados Unidos residen 813 multimillonarios con un patrimonio conjunto de 5.7 billones de dólares.
Entre ellos figuran Musk; el director ejecutivo de Amazon, Jeff Bezos, con 194,000 millones de dólares; el creador de Facebook, Mark Zuckerberg, con 177,000 millones; el inversor Warren Buffett, con 133,000 millones, y el jefe de Microsoft, Bill Gates, con 128,000 millones.
Forbes dijo que 14 de las 20 personas más ricas del mundo son ciudadanos estadounidenses, incluidos ocho de los 10 primeros.
En 2021, la organización mediática sin ánimo de lucro ProPublica obtuvo lo que describió como un «vasto tesoro de datos del Servicio de Impuestos Internos sobre las declaraciones de impuestos de miles de las personas más ricas del país, que abarca más de 15 años».
ProPublica dijo que los archivos «secretos» del IRS mostraban cómo multimillonarios como Bezos, Musk, Buffett y el empresario y filántropo George Soros pagan poco en impuestos sobre la renta en comparación con su enorme riqueza: «a veces, incluso nada».
El artículo decía que los registros fiscales echaban por tierra el «mito fundamental del sistema tributario estadounidense: que todo el mundo paga lo que le corresponde y que los estadounidenses más ricos son los que más pagan».
Los registros del IRS muestran que los más ricos pueden —de forma perfectamente legal— pagar impuestos sobre la renta que son solo una pequeña fracción de los cientos de millones, si no miles de millones, que aumentan sus fortunas cada año.
El experto fiscal sudafricano Johan du Plessis declaró a The Epoch Times: «Lo que ocurre en Estados Unidos es en general lo que ocurre en todo el mundo».
«Las clases medias están sobrecargadas de impuestos y los ricos están infracargados. Un hogar típico de clase media sencillamente no creará riqueza, porque más ganancias significan impuestos más altos».
Sin embargo, los superricos pueden permitirse pagar a los «mejores» asesores fiscales del mundo para que les ayuden a evitar el pago de impuestos progresivos sobre la renta y los beneficios, afirma Du Plessis.
«En muchos países, los ricos se hacen más ricos porque aumenta el valor de sus activos, como las propiedades», afirmó.
«La ley, incluso en Sudáfrica y Estados Unidos y muchos otros países, dice que esas ganancias no están sujetas a impuestos a menos y hasta que se vendan».
En 2023, los ingresos anuales del hogar medio estadounidense eran de 80,610 dólares, según la Encuesta de Población Actual de la Oficina del Censo de Estados Unidos. Esto se gravó a una tasa del 22 por ciento para los declarantes individuales y del 12 por ciento para las parejas casadas.
En 2024, las parejas estadounidenses tributarán al 37% sobre los ingresos superiores a 731,201 dólares.
Según Forbes, esas 25 personas vieron aumentar su patrimonio en un colectivo de 401,000 millones de dólares de 2014 a 2018.
Los datos del IRS mostraron que pagaron un total de USD 13.6 mil millones en impuestos federales sobre la renta en esos cinco años.
Du Plessis dijo que las leyes tributarias en todas partes «castigan» a las clases medias y recompensan a los súper ricos.
«Si tienes un salario más alto, pagas más impuestos. En el caso de los millonarios y multimillonarios, obtén más beneficios y pagarás menos impuestos en realidad», afirmó.
El presidente Joe Biden ha declarado a menudo durante su presidencia que los estadounidenses más ricos deberían pagar más impuestos.
Un sistema impositivo más progresivo fue fundamental en la estrategia económica de Biden para su reelección en noviembre, antes de que fuera sustituido en julio por la vicepresidenta Kamala Harris como candidata presidencial demócrata.
En 2022, una encuesta de YouGov entre estadounidenses con activos distintos a su vivienda por valor de más de un millón de dólares mostró que la mayoría apoyaba el llamamiento de Biden.
Casi el 60% de los 800 encuestados dijeron que apoyarían tasas marginales del impuesto sobre la renta por encima de 100 millones de dólares superiores a la actual tasa máxima del 37%.
La encuesta, encargada por Patriotic Millionaires, un grupo de estadounidenses y empresas de alto poder adquisitivo preocupados por los crecientes niveles de desigualdad en la mayor economía del mundo, reveló que más del 60% de los encuestados consideraban el rápido aumento de la desigualdad como una amenaza para la democracia.
Sin embargo, en la reunión del G20 celebrada en julio, la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, declaró que Washington se oponía a un acuerdo mundial sobre la imposición de impuestos a los multimillonarios.
«Creemos que todos los países deben asegurarse de que sus sistemas fiscales sean justos y progresivos», declaró a la prensa.
Desde que Harris sustituyó a Biden, ha sido «mucho menos elocuente» sobre la cuestión del impuesto sobre el patrimonio, según la Tax Foundation.
Sin embargo, añadió que las declaraciones políticas de Harris hasta ahora muestran que está a favor de aumentar los impuestos a las empresas y a las rentas altas.
«En términos brutos, estimamos que las propuestas de la vicepresidenta Harris aumentarían los impuestos en unos 4.1 billones de dólares entre 2025 y 2034», señala el análisis de la fundación.
También advirtió que los cambios fiscales propuestos reducirían el producto interior bruto a largo plazo en un 2%, el capital social en un 3%, los salarios en un 1.2% y el empleo en unos 786,000 puestos de trabajo a tiempo completo.
Según el análisis de la Fundación, «las políticas fiscales elevarían las tasas impositivas máximos sobre la renta de las empresas y las personas físicas hasta situarlos entre los más altos del mundo desarrollado, frenando el crecimiento económico y reduciendo la competitividad».
«Los créditos fiscales y otras exenciones complicarían el código tributario, generarían más gastos a través del IRS y, junto con diversos controles de precios, no mejorarían los problemas de asequibilidad en la vivienda y otros sectores».
Dijo que el efecto neto de los aumentos de impuestos de Harris podría aumentar los déficits en aproximadamente 2.6 billones de dólares en la próxima década.
El candidato presidencial republicano y expresidente Donald Trump se opone vehementemente a los aumentos de impuestos a los ricos, según un nuevo estudio del Instituto de Tributación y Política Económica de Estados Unidos (ITEP).
En él se analizan las propuestas presentadas por Trump y se concluye que equivaldrían a recortes fiscales para los estadounidenses más ricos y subidas de impuestos para la mayoría de los hogares.
Según los planes fiscales de Trump, el 1% más rico experimentaría una reducción media de impuestos de más de 36,000 dólares, mientras que el grueso de la población con menores ingresos vería incrementados sus impuestos en torno a los 1500 dólares, explicó el director de política federal del ITEP, Steve Wamhoff, en un acto reciente.
El Comité Conjunto de Impuestos del gobierno de EE. UU. encontró que extender las disposiciones individuales de los recortes de impuestos de Trump agregaría 3.3 billones de dólares al déficit en los próximos 10 años.
Otros países significativamente impactados por impuestos más altos a los súper ricos incluyen a China, la segunda economía más grande del mundo y el principal rival geopolítico de Estados Unidos.
Según Forbes, China es el segundo país con más multimillonarios, con 406 personas valoradas en 1.3 billones de dólares.
India, el país más poblado del mundo, tiene 200 multimillonarios con un patrimonio conjunto de 954,000 millones de dólares.
Alemania es el cuarto país con más multimillonarios, con 132, y Rusia tiene 120.
China, India y Rusia no han indicado hasta ahora cuál es su posición respecto a un acuerdo mundial para gravar a los multimillonarios.
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