Los principales republicanos del Senado han señalado que es muy poco probable que el caso de los documentos clasificados del presidente Joe Biden alcance el nivel de un delito impugnable.
«No creo que queramos entrar en un tira y afloja, en el que cada dos o cuatro años nos encontremos con procedimientos de impeachment en la Cámara de Representantes y en el Senado», dijo a The Hill el portavoz de la minoría en el Senado, John Thune (R-S.D.), el segundo republicano en la Cámara Alta. «Tiene que haber una razón realmente buena, obviamente, las razones y fundamentos constitucionales para ello. Así que veremos hasta dónde llega».
Y a otro miembro del equipo de liderazgo, el senador John Cornyn (R-Texas), se le preguntó sobre la destitución. «No», fue su respuesta, según el medio.
Al ser preguntado el martes sobre si el caso de los documentos puede ser objeto de un juicio político, el líder de la minoría en el Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), descartó la cuestión.
«No tengo una respuesta a esa hipótesis. Sí creo que el Departamento de Justicia parece estar dispuesto a tratar a todos por igual y a intentar recuperar los documentos, y obviamente no es una gran idea sacar documentos clasificados de los archivos. Veremos cómo siguen manejándolo», dijo.
Los abogados de Biden han confirmado desde principios de enero que en su despacho y en sus residencias se encontraron documentos clasificados de cuando era senador o vicepresidente. El fiscal general Merrick Garland ha anunciado que un fiscal especial, el ex fiscal federal Robert Hur, investigará el caso.
«Esto en realidad podría ser un delito susceptible de impeachment. Si hay una norma de delito grave y falta, que la hay, esto es lo más cercano a uno en los últimos años», dijo el senador Kevin Cramer (R-N.D.), según el medio. «Si el abogado especial llega a algo, dándose cuenta de que [Biden es] un presidente en ejercicio, supongo que podrían redactar lo que se convertiría en artículos de impeachment, dependiendo de lo que encuentren».
Por su parte, el senador Lindsey Graham (R-S.C.) defendió a Biden el martes ante la prensa en el Capitolio. Sus comentarios se produjeron el mismo día en que un abogado del ex vicepresidente Mike Pence dijo que se encontraron materiales clasificados en su casa en Indiana.
«Conozco al presidente Biden desde hace mucho tiempo», dijo Graham. «Me sorprendería que hubiera algo siniestro aquí».
Los comentarios se producen mientras los comités Judicial y de Supervisión de la Cámara de Representantes han llevado a cabo investigaciones sobre los documentos clasificados que fueron descubiertos en la oficina de Biden en Washington y en su residencia privada de Delaware. Un abogado confirmó el pasado fin de semana que funcionarios del FBI registraron su casa de Delaware la semana pasada y descubrieron más material clasificado.
El último descubrimiento de documentos provocó la preocupación pública entre los demócratas del Senado, algunos de los cuales han dicho que justifica una investigación completa.
«Hay que obtener las respuestas a las preguntas antes de llegar a un juicio», dijo a Politico el senador demócrata Tim Kaine, que se presenta a la reelección dentro de dos años. «Si se trata de un puñado de documentos y no son muy graves, y tal vez una vez fueron clasificados pero ya no lo son, y hay una buena explicación de por qué los tenía, pero no sabes la respuesta a esas preguntas».
El líder de la mayoría del Senado, Dick Durbin (D-Ill.), dijo que el hallazgo «disminuye la importancia de cualquier persona que esté en posesión de ello, porque se supone que no debería ocurrir».
«Si fue culpa de un miembro del personal o de un abogado, no hay diferencia», dijo a CNN el domingo. «El funcionario electo es el máximo responsable», añadió el legislador de Illinois.
Más detalles
El abogado de Biden, Bob Bauer, dijo que los recientes documentos clasificados y el «material circundante» databan de la época de Biden en el Senado, donde representó a Delaware de 1973 a 2009. Otros materiales encontrados la semana pasada eran de su periodo como vicepresidente entre 2009 y 2017, dijo Bauer a los medios de comunicación.
«Al comienzo de este asunto, el presidente ordenó a sus abogados personales que cooperaran plenamente con el Departamento de Justicia», dijo Bauer. «En consecuencia, habiendo identificado e informado previamente al DOJ de un pequeño número de documentos marcados como clasificados
en la casa del presidente en Wilmington».
Al ser preguntado por el caso, Biden dijo a los periodistas en California que cree que no hizo nada malo.
«No hay ahí, ahí», dijo el presidente el pasado jueves.
De nuevo, Biden fue preguntado el miércoles por los últimos acontecimientos del caso mientras hacía un anuncio en el que confirmaba que Estados Unidos enviaría tanques M1 Abrams a Ucrania. No respondió a ninguna pregunta y abandonó la sala.
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