El líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Calif.), reveló recientemente que había contraído previamente COVID-19 y que se enteró del contagio a fines del año pasado, cuando dio positivo en la prueba de anticuerpos contra el virus del PCCh.
McCarthy le dijo a la prensa en Capitol Hill, el martes, que había dado positivo en la prueba de anticuerpos contra el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), que causa la enfermedad COVID-19, antes de someterse a una cirugía en el codo en diciembre de 2020.
El líder republicano dijo que un médico le informó en ese momento que, probablemente, había contraído la enfermedad «en los últimos dos meses».
Dijo que tomó una vacuna anti-COVID durante el período intermedio mientras esperaba que los resultados de su análisis de sangre mostraran que tenía anticuerpos contra el virus del PCCh.
McCarthy dijo que «nunca supo» que tenía COVID-19.
«Lo extraño es que probablemente me hayan hecho la prueba más de 50 veces, así que tuvo que ser en ese breve lapso de tiempo, probablemente justo antes de las elecciones o en algún momento así», especuló.
Los síntomas de COVID-19 varían de leves a graves y pueden aparecer entre 2 y 14 días después de la exposición al virus, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Dichos síntomas pueden incluir fiebre o escalofríos, tos, dificultad para respirar o dificultad para respirar, fatiga, dolores musculares o corporales, dolor de cabeza, pérdida del gusto o del olfato, dolor de garganta, secreción nasal, náuseas o vómitos, diarrea y más.
Una persona también puede ser completamente asintomática al virus, como McCarthy.
«No lo sabía… y nadie de mi personal lo tuvo [síntomas de COVID-19] tampoco», les dijo a los periodistas.
Los CDC dijeron que no recomiendan vacunarse con síntomas de COVID-19. Sin embargo, una prueba previa de anticuerpos positiva, que muestra una infección pasada, no es motivo para no vacunarse, según la agencia.
“Debería vacunarse independientemente de si ya tenía COVID-19. Esto se debe a que los expertos aún no saben cuánto tiempo estará protegido para que no vuelva a enfermarse después de recuperarse del COVID-19. Incluso si ya se ha recuperado de COVID-19, es posible, aunque raro, que pueda infectarse con el virus que causa COVID-19 nuevamente”, dijo la agencia en su sitio web.
Todos los legisladores de la Cámara y del Senado están habilitados para aplicarse la vacuna anti-COVID desde diciembre de 2020. Más del 75 por ciento de los miembros de la Cámara han recibido una vacuna. Decenas de ellos se han recuperado del virus.
Los proveedores de vacunas deben informar cualquier efecto adverso grave o error en la administración de la vacuna al Sistema de Notificación de Eventos Adversos a las Vacunas (VAERS), organizado por el Departamento de Salud y Servicios Humanos. Los fabricantes de vacunas son inmunes a la responsabilidad por cualquier reacción adversa, a menos que haya una “mala conducta intencional” involucrada.
El gobierno federal tiene un Programa de Compensación por Lesiones que puede pagar una compensación a las personas elegibles que sufren lesiones graves por las vacunas aprobadas. Sin embargo, el procedimiento tiene una alta exigencia probatoria que dificulta las reclamaciones.
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