El mensaje de masculinidad en «El Señor de los Anillos»

El clásico de Tolkien explora no solo el conflicto entre el bien y el mal, sino también las mejores cualidades de la masculinidad

Por  ANNIE HOLMQUIST 
16 de enero de 2023 5:08 PM Actualizado: 16 de enero de 2023 5:08 PM

Tras haber leído numerosos libros clásicos, mis amigos suelen sorprenderse al oír que nunca leí la famosa trilogía de J.R.R. Tolkien «El Señor de los Anillos».

«Tienes que leerlo», me exhortan numerosos individuos, muchos de ellos varones.

Este otoño, varios de mis amigos —también varones— tomaron el toro por los cuernos y me regalaron una preciosa edición encuadernada de la obra como estímulo para que me pusiera a leerla. Y mientras lo hago, empiezo a darme cuenta de por qué «El Señor de los Anillos» es el libro que más recomiendan los hombres de mi entorno. La serie es masculinidad en estado puro, y describe los tipos de acciones que hacen que los hombres prosperen, aumenten su fuerza y valor, y estén a la altura de las circunstancias.

Representaciones masculinas en «El Señor de los Anillos»

Para empezar, «El Señor de los Anillos» describe una búsqueda; una misión o un objetivo —una responsabilidad, si se quiere— para mantener el anillo alejado de las fuerzas del mal y, finalmente, destruirlo.

En esta búsqueda, los personajes masculinos de «El Señor de los Anillos» se dirigen siempre hacia Mordor. No pueden tomar el camino más fácil, sino que deben confiar en su ingenio y estar dispuestos a correr riesgos para lograrlo, para ser héroes, aunque para ello tengan que perder la vida.

La sólida amistad masculina es también un aspecto fuerte, aunque no sutil, de «El Señor de los Anillos». No hay mujeres en la búsqueda que emprenden los nueve hombres, lo que significa que ninguno de ellos tiene que competir entre sí por la atención femenina, ni gastar energía en satisfacer el instinto natural de proteger al sexo opuesto.

La alimentación también desempeña un papel importante en «El Señor de los Anillos». A veces hay grandes festines, en los que los personajes se atiborran hasta no poder pensar en comer más. Otras veces, racionan la comida, niegan su apetito y sobreviven con pequeños trozos del milagroso pan élfico. Independientemente de lo grandes o pequeñas que sean las raciones, Tolkien siempre se asegura de que sus personajes estén alimentados, sugiriendo la importancia del sustento y del aporte calórico que los hombres necesitan para perseguir y cumplir sus misiones.

A primera vista, algunos pueden pensar que estas observaciones son ofensivas, una sugerencia de que «El Señor de los Anillos» está lleno de estereotipos masculinos, y que todos los hombres que parecen tener esta obra clásica como una de sus lecturas favoritas son los matones arrastrados por los nudillos de la masculinidad tóxica que son anatema en la sociedad actual. Pero yo no lo veo así. Por el contrario, creo que «El Señor de los Anillos» nos ofrece una visión del tipo de hombres que necesitamos en la sociedad, al tiempo que nos da pistas sobre cómo fomentar esa masculinidad.

Hombres con una misión

Al igual que el equipo de hombres en la búsqueda para destruir el anillo tenía una misión, los hombres de hoy necesitan responsabilidad. Necesitan espacio para ser héroes, para asumir riesgos, cometer errores y levantarse e intentarlo de nuevo. Lo que no necesitan es que las mujeres les quiten esa responsabilidad, alegando que los hombres son ineptos y no están a la altura de la tarea.

«Para los hombres, no hay nada más que responsabilidad», señala Jordan Peterson en una de sus conferencias. Si se le quita esa responsabilidad, ese sentido de la vida, el varón no se siente motivado para hacer nada, lo que da lugar a hombres apáticos y castrados y a mujeres frustradas y abrumadas que se preguntan por qué los hombres nunca dan un paso al frente.

Camaradería

Los hombres de hoy también necesitan amistad. Y sus necesidades de amistad no son como las charlas de chicas que las mujeres mantienen en las cafeterías. No, su amistad está mucho más orientada a la acción y a menudo se desarrolla en equipo, explica el autor Anthony Esolen.

«Los niños y los hombres luchan en equipo. Sin esos equipos, olvídate de la civilización; la propia supervivencia humana no habría sido posible. La partida de caza es un equipo masculino. Los defensores de la aldea son un equipo masculino».

Desafortunadamente, hemos hecho mucho en los últimos años para destruir estos equipos masculinos, desalentando clubes o actividades solo para hombres e insistiendo en la igualdad y la inclusión de las mujeres. Al hacerlo, destruimos algo a lo que CS Lewis se refirió en “Los cuatro amores” como algo “biológicamente valioso”. Si queremos que los hombres de hoy prosperen, entonces debemos fomentar fuertemente las actividades que promuevan la hermandad o el compañerismo, lo que en realidad significa que también debemos dejar de insistir en que todo sea absolutamente justo y equitativo entre los sexos.

Mente y cuerpo

Por último, es importante reconocer que hombres y mujeres son diferentes no solo en sus amistades y motivaciones, sino también en sus hábitos alimentarios y necesidades nutricionales. Por ejemplo, el cuerpo de los hombres quema calorías mucho más fácilmente que el de las mujeres, mientras que éstas tienen mayores necesidades de vitaminas y minerales.

¿Deben los hombres comer verduras y tener cuidado con lo que consumen? Por supuesto que sí. Pero ese cuidado y precaución no significan que deban vivir a base de ensaladas de quinoa y comidas sin carne. Tampoco significa que «el consumo varonil de carne esté dañando irreversiblemente el mundo», como afirmaba un artículo del Huffington Post hace unos años. Lo que sí significa es que las mujeres deberían ser prudentes y consideradas antes de regañar y obligar a los hombres a adoptar su propio modo nutricional femenino.

Aún no terminó la trilogía de «El Señor de los Anillos», así que no puedo decir con seguridad adónde conduce esta historia de mentalidad masculina, pero apostaría a que la búsqueda tiene éxito. Lo que me lleva a preguntarme: ¿Veríamos a más hombres de hoy en día dando un paso al frente, siendo más responsables, heroicos, exitosos y satisfechos si les permitiéramos practicar algunas de las características masculinas que se muestran en el cuento clásico de Tolkien?


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