El ministro de Economía español, Carlos Cuerpo, visitó este martes proyectos agrícolas sostenibles en el estado de Pará, en la Amazonía brasileña, y reafirmó el compromiso de España con la conservación de la mayor selva tropical del planeta.
Cuerpo conoció de primera mano la Isla de Combú, en la ciudad de Belém, que en los últimos años se ha transformado en un atractivo destino ecoturístico y donde también hay producciones comunitarias de cacao orgánico.
El ministro se interesó en particular por la fábrica de chocolate Filha do Combú, «un ejemplo de conservación, empleo femenino y apoyo a la economía local», según escribió en sus redes sociales.
En este sentido, destacó las «historias inspiradoras de agricultores, artesanos, jóvenes y mujeres emprendedoras que contribuyen al desarrollo sostenible e inclusivo» de la región.
«España está comprometida con la conservación del Amazonas y la prosperidad de sus comunidades», reafirmó.
Belém es la capital de Pará, cuenta con 1,3 millones de habitantes y será además el escenario en el que Brasil albergará en 2025 la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30).
La agenda de Cuerpo de este martes también incluye una reunión con el gobernador de Pará, Helder Barbalho, aliado del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.
Posteriormente, viajará a Río de Janeiro, donde entre el jueves y el viernes se reunirán de nuevo los ministros de Finanzas de los países del G20, foro que reúne a las mayores economías del mundo.
Brasil ostenta este año la presidencia temporal del G20 y se ha marcado como principales objetivos de su mandato: reducir las desigualdades, acelerar la agenda medioambiental y reformar las instituciones de gobernanza global.
El G20 está formado por Alemania, Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica y Turquía, además de la Unión Europea y la Unión Africana.
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