Los organizadores de la protesta contra los mandatos y restricciones de COVID-19 en Ottawa dicen que su papel ya no es necesario, ya que el movimiento orgánico ha cobrado impulso, no solo en Canadá sino en todo el mundo.
“El movimiento acaba de comenzar”, dijeron los portavoces Dagny Pawlak y Benjamin Ditcher de la organización el Freedom Convoy 2022 (Convoy de la Libertad 2022), en un comunicado de prensa el 3 de marzo.
“Lo que comenzó en el oeste de Canadá, reunió apoyo en todo el país y finalmente convergió en Ottawa, fue el primer juego de dominó. El discurso político ahora ha cambiado y están surgiendo muchos grupos en todo el país y en todo el mundo que abogan por el retorno de las libertades”.
Bautizado como el «Convoy de la Libertad», los camiones empezaron a llegar a Ottawa los días 28 y 29 de enero con el propósito de protestar contra el mandato federal de la vacuna anti-COVID dirigido a los camioneros que viajan entre Canadá y Estados Unidos. Se convirtió en un movimiento mucho más amplio durante su viaje a través del país después de que muchos canadienses de todo el país comenzaran a unirse o a expresar su apoyo para poner fin a los diversos mandatos y restricciones por el COVID-19.
Siguiendo el ejemplo de Canadá, comenzaron a llevarse a cabo protestas inspiradas por los camioneros en los Países Bajos, Austria, Estados Unidos, el Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda.
“Estamos muy agradecidos con los camioneros y los voluntarios que hicieron posible esta demostración”, dijeron Pawlak y Ditcher. “Sin su sacrificio, la voz del público continuaría siendo silenciada. El convoy de la Libertad ha inspirado a personas de todo el mundo a ponerse de pie y hacer oír su voz contra la tiranía gubernamental sin sentido, habilitada a través de la siembra del miedo y división”.
Ley de Emergencias
El 14 de febrero, el primer ministro Justin Trudeau invocó la Ley de Emergencias para despejar a los manifestantes que habían instalado campamentos y estacionado camiones y otros vehículos en el centro de Ottawa. Trudeau dijo en ese momento que la medida se trataba de “mantener seguros a los canadienses, proteger los trabajos de las personas y restaurar la confianza en nuestras instituciones”.
“La policía recibirá más herramientas para restaurar el orden en lugares donde las reuniones públicas pueden constituir actividades ilegales y peligrosas, como bloqueos y ocupaciones, como se ve en Ottawa, el puente Ambassador y otros lugares”, dijo.
El 18 de febrero, las fuerzas del orden intensificaron su operación contra los manifestantes en Ottawa, utilizando policías antidisturbios que empuñaban porras y spray de pimienta. Algunos agentes de policía estaban fuertemente armados, incluso con armas antidisturbios y lo que parecían ser lanzadores de balas de goma. La policía montada y los oficiales a pie avanzaron hacia los manifestantes, hubo caballos derribando a los manifestantes en algunos casos, mientras que algunos rompieron las ventanas de los camiones para sacar a los camioneros de sus vehículos.
A media mañana del 20 de febrero, la policía había realizado cerca de 200 arrestos y había remolcado casi 60 vehículos. Más tarde ese mismo día, el número de vehículos remolcados aumentó a casi 80.
La Ley de Emergencias también otorgó a las instituciones financieras la autoridad para congelar las cuentas de los manifestantes y simpatizantes del Convoy de la Libertad sin una orden judicial.
El gobierno rechaza intentos para establecer diálogos
En una conferencia de prensa del 19 de febrero, el vocero Tom Marazzo dijo que los organizadores del convoy habían estado tratando de establecer un diálogo con el gobierno federal desde el primer día, cuando el convoy llegó a Ottawa, pero sin éxito.
“Nunca en mi vida le creería a alguien si me dijera que nuestro primer ministro rechazaría el diálogo y optaría por la violencia contra los manifestantes pacíficos”, dijo.
En su comunicado de prensa, Pawlak y Ditcher dijeron que la invocación de la Ley de Emergencias contra los manifestantes era “innecesaria” y “no será olvidada”.
“Condenamos expresamente la escalada contundente por parte de las fuerzas del orden y sus tácticas evasivas utilizadas para evitar la rendición de cuentas. La policía no estaba equipada con números de placa, etiquetas de nombre o cámaras corporales, que son estándar en la policía canadiense”, dijeron.
Si bien la policía de Ottawa ha seguido diciendo que la protesta es “ilegal”, Pawlak y Ditcher elogiaron a los profesionales uniformados que los apoyaron durante la protesta en Ottawa.
“Seguimos sintiéndonos honrados de tener tantos socorristas y veteranos militares que nos apoyan con su conciencia. Agradecemos además a los oficiales de policía, quienes, durante la mayor parte del tiempo que nos manifestamos en Ottawa, fueron solidarios y amables”.
Demandas contra Ottawa
Varias demandas contra el gobierno federal se están abriendo paso en los tribunales. El 23 de febrero, tras el anuncio de Trudeau de revocar la Ley de Emergencia, tanto la Fundación de la Constitución Canadiense (CCF) como la Asociación Canadiense de Libertades Civiles (CCLA), que habían dicho el 17 de febrero que tenían la intención de lanzar impugnaciones legales contra el gobierno liberal, siguieron adelante con las demandas.
La razón es que “[Trudeau] todavía tiene que responder ante los tribunales por su decisión ilegal e inconstitucional de invocar la Ley de Emergencias”, dijo la directora de litigios de CCF, Christine Van Geyn, en Twitter el 23 de febrero.
En un comunicado de prensa del 23 de febrero, Abby Deshman, directora de justicia penal de la CCLA, dijo que la asociación sigue creyendo que el gobierno de Trudeau no tenía base legal suficiente para invocar la ley.
“También seguimos creyendo que es importante que los tribunales consideren el umbral legal y las cuestiones constitucionales para guiar las acciones de los futuros gobiernos”, dijo.
Deshman enfatizó que, aunque las órdenes ya no están vigentes, “los canadienses se quedan con el precedente que han sentado las acciones del gobierno”.
“Consultaremos con nuestros abogados en los próximos días para determinar cuáles son los próximos pasos en nuestro litigio, pero en este momento continuaremos con nuestro caso”, dijo.
El premier de Alberta, Jason Kenney, también tiene la intención de proceder con un recurso judicial contra la decisión del gobierno liberal de invocar la Ley de emergencias (EA).
“Alberta tiene la intención de proceder con una solicitud de revisión judicial a la invocación de EA para abordar este abuso de poder”, tuiteó Kenney el 23 de febrero. “Se debe pedir al poder judicial que establezca límites en el uso arbitrario de poderes policiales extraordinarios en el futuro”.
Además, el expremier de Terranova, Brian Peckford, ha presentado un recurso judicial para revocar lo que cree que es una infracción a los derechos de los canadienses. Peckford, el último arquitecto sobreviviente de la Carta Canadiense de Derechos y Libertades, presentó una demanda contra el gobierno federal el 26 de enero para impugnar los méritos constitucionales de sus mandatos que restringen los viajes de los canadienses sin la vacuna anti-COVID.
“Esta es la culminación de mi trabajo para oponerme a lo que creo que es la destrucción potencial de una gran parte de nuestra democracia”, dijo anteriormente a The Epoch Times. “Este es un momento histórico crucial para todos, para determinar si la Carta de Derechos y Libertades realmente significa algo”.
Determinación fortalecida
Pawlak y Ditcher dijeron que el Convoy de la Libertad 2022 siempre apoyará a los activistas pacíficos que persiguen los mismos objetivos que los de su organización.
“Para cada nueva organización que protesta pacífica y legalmente por sus libertades civiles, extendemos todo nuestro apoyo moral y bendiciones”, dijeron.
Los voceros señalaron que la investigación sobre las acciones de las autoridades en Ottawa “revelará la mala fe y la fuerza ilegal utilizada contra la reunión pacífica”.
Agregaron que lo que ha logrado la protesta solo fortalecerá la determinación de los activistas por la libertad en todo el mundo.
“Encendimos una llama que ha encendido un fuego en el corazón de todos, que nunca se apagará”, dijeron.
“La lucha para recuperar nuestras sacrosantas libertades continúa”.
Andrew Chen contribuyó a este artículo.
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