Opinión
Últimamente, muchos focos de conflicto se están calentando repentinamente en todo el mundo. En lo que respecta a los puntos conflictivos internacionales, no ha habido grandes cambios desde finales del siglo pasado hasta la actualidad.
El conflicto entre Israel y Palestina, en el Medio Oriente, se ha convertido ahora en el conflicto entre Israel e Irán; la volatilidad dentro de Europa del Este se refleja en el conflicto entre Rusia y Ucrania; la península de los Balcanes es la única región que se ha vuelto un poco más tranquila.
Hoy en día, los principales focos de conflicto internacional restantes están relacionados con China: El conflicto de la península de Corea, el de las islas Diaoyu, el del estrecho de Taiwán, el del Mar de China Meridional, el conflicto de China con India, y la tensión entre India con Pakistán.
En lo que respecta al PCCh, el conflicto geopolítico más importante es el que enfrenta contra Taiwán.
A principios de abril, aviones militares del PCCh ingresaron a la Zona de Identificación de Defensa Aérea de Taiwán durante diez días consecutivos. En ese tiempo se sumaron un total de 74 incursiones.
En particular, el lunes 12 de abril, el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán anunció que 25 aviones de combate militares del PCCh, una cifra nunca antes vista en la isla, ingresaron a la Zona de Identificación de Defensa Aérea de Taiwán solo en ese día. Los aviones de combate eran dos aviones antisubmarinos Y-8, un avión de vigilancia Air Police-500, cuatro aviones de combate J-10, catorce aviones de combate J-16 y cuatro aviones bombarderos estratégicos H-6K. Los cuatro modelos de bombarderos H-6K tienen capacidad para llevar armas nucleares.
Según el mapa proporcionado por el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán, todos los aviones militares chinos volaron cerca de las Islas Pratas y no cruzaron el centro del Estrecho de Taiwán.
Desde abril, el PCCh ha desplegado tipos similares de aviones militares y, a partir de los tipos de aviones desplegados, podemos inferir las intenciones del PCCh.
El avión de vigilancia Air Police-500 es imprescindible para las operaciones aéreas modernas de largo alcance.
El avión de combate J-10 es un avión militar clave para el combate aéreo; sus funciones y diseño son similares a los del F-16 estadounidense. El J-16 se desarrolló a partir de la serie J-11B y se afirma que es un caza biplaza polivalente de generación 4.5. El J-11 es la versión china del caza biplaza ruso Su-30. La función de combate de este avión es similar a la del bimotor estadounidense F-15. Su característica más distintiva es su poderosa capacidad de ataque terrestre y marítimo de largo alcance.
El H-6K es el principal bombardero de largo alcance desplegado por la Fuerza Aérea Comunista China. Además de estar equipado con sistemas electrónicos avanzados, también lleva una variedad de misiles aire-barco.
El avión antisubmarino Y-8, como su nombre indica, funciona para combatir submarinos.
Desde el año pasado, estos aviones militares han entrado con frecuencia en la zona de defensa aérea de Taiwán. Están principalmente orientados al combate naval.
El objetivo de las naves que incursionaron no estaba en Taiwán, apuntaban a la flota de portaaviones estadounidense que patrullaba en el Mar de China Meridional.
Esta es probablemente la clave de la guerra del PCCh contra Taiwán.
El PCCh ha estado planeando un ataque militar a Taiwán durante muchos años, y su estrategia de combate contra Taiwán prácticamente está completa. Pero su mayor impedimento es manejar la protección que EE.UU. le ha brindado a Taiwán. El PCCh ha formulado una variedad de estrategias de «bloqueo», principalmente para evitar la intervención de los portaaviones estadounidenses.
En el futuro, la Fuerza Aérea determinará el resultado de la guerra. La mayor ventaja del PCCh sobre Estados Unidos en el combate aéreo a través del Estrecho de Taiwán es su cercanía al territorio continental, no obstante, los portaaviones estadounidenses siguen siendo su mayor obstáculo en su búsqueda por apoderarse de Taiwán.
Por lo tanto, en los últimos diez años, el enfoque estratégico del PCCh ha sido cómo tratar con los portaaviones estadounidenses. Sus aviones de nuevo diseño son todas armas destinadas al grupo de portaaviones de EE.UU.
El PCCh carece de mandos militares con experiencia en combate
Después de que el PCCh estableció su poder en China, la mayoría de las principales guerras en las que participó fueron dirigidas por generales con mucha experiencia en combate. Incluso en la guerra de 1979 contra Vietnam, un gran número de generales fueron soldados experimentados que habían participado en guerras anteriores. A estas alturas, todos estos generales se han ido.
El mundo exterior no tiene forma de medir la calidad de esta nueva generación de generales del PCCh. Sin embargo, una cosa es segura: muchos de los generales del ejército del PCCh no son generales por sus méritos.
Después de que el PCCh estableció su poder, el desempeño de combate de la Fuerza Aérea del PCCh fue ligeramente mejor que el de su Armada. La Fuerza Aérea Comunista China participó en operaciones en la Guerra de Corea, en la década de 1950, y luchó directamente contra la Fuerza Aérea de Estados Unidos. Luego, en la confrontación con el gobierno nacionalista chino a través del Estrecho de Taiwán, las dos partes también llevaron a cabo muchas batallas aéreas en la década de 1950 y desde finales de la de 1960 hasta principios de la de 1970. Durante la Guerra de Vietnam, también hubo un conflicto entre aviones militares chinos y aviones estadounidenses.
El historial de la Fuerza Aérea del PCCh en el noreste y en Corea del Norte se desarrolló con el MiG-15 contra el B-26 y el antiguo F-80 estadounidense. No hay registro de que la Fuerza Aérea del PCCh derribara el F-86 estadounidense. En otras palabras, la fuerza aérea del PCCh se concentró principalmente en atacar bombarderos, una de las aeronaves de combate más lentas.
A finales de la década de 1950, la fuerza aérea del PCCh voló flotas de MiG-17, de la Rusia soviética, en combates contra los nacionalistas chinos que luchaban desde Taiwán. En ese momento, Taiwán contraatacó con el avión de combate estadounidense F-86.
Incluso entonces, la fuerza aérea del PCCh perdió la mayoría de sus batallas contra Taiwán. Como resultado, la fuerza aérea del PCCh se contrajo tierra adentro y no se atrevió a luchar en mar abierto.
No volaron sobre el océano hasta la década de 1980.
Lo que quiero enfatizar es que la Fuerza Aérea Comunista China siempre ha existido como una fuerza defensiva, en lugar de una fuerza ofensiva utilizada para el ataque.
Después de 1949, la mayor parte de la armada de la antigua República de China se retiró a Taiwán, huyendo del régimen comunista en China. Aunque los viejos buques de guerra que recibió de Estados Unidos estaban desgastados, todavía les fue mucho mejor que a la marina que el PCCh había establecido apresuradamente en la década de 1950. La armada del PCCh tenía una potencia de fuego reducida. Había pocos buques de guerra de más de 1000 toneladas, y la mayoría consistía en cañoneras y torpederos. Las numerosas batallas navales del PCCh contra Taiwán fueron todas ataques marítimos, que consistían en esconder los buques de guerra en islas costeras, para luego lanzar repentinamente ataques por sorpresa, acercándose a los barcos enemigos a gran velocidad y disparando torpedos antes de huir rápidamente.
La última batalla naval entre los nacionalistas chinos (Taiwán) y el Partido Comunista Chino fue en 1965. En ese momento, el Ejército Nacionalista quería capturar las Islas Pratas. El Ejército Comunista tenía varios torpederos esperando para emboscar a la Armada Nacional. Dos de los tres buques de guerra de la Armada Nacionalista China se hundieron y uno resultó gravemente dañado.
La tecnología es solo uno de los factores
En 1974, la Armada china se apoderó de las Islas Paracel, en el Mar de China Meridional, en una batalla contra Vietnam del Sur. Ahora se conoce como la Batalla de las Islas Paracel, el último intento de Vietnam del Sur por eliminar la presencia militar china en el área.
En ese momento, Estados Unidos ya había retirado sus tropas de Vietnam. Los estadounidenses vendieron varios destructores de la Segunda Guerra Mundial a Vietnam del Sur y proporcionaron entrenamiento. En el momento de la Batalla de las Islas Paracel, Vietnam del Sur acababa de recibir los barcos estadounidenses. El poder de combate no se puede formar solo con armas de alta calidad y determinación. La experiencia es vital.
En esa batalla naval, el PCCh usó cuatro lanchas torpederos y dragaminas contra los tres destructores de la Armada de Vietnam del Sur. El lado de Vietnam del Sur tenía la ventaja en potencia de fuego y tonelaje.
Una vez hablé con un general vietnamita que había servido en el Ministerio de Defensa de Vietnam del Sur y que luego se estableció en Estados Unidos. Tenía curiosidad de saber por qué Estados Unidos no tomó ninguna medida contra China durante la Guerra de las islas Paracel. Todavía tenía una alianza militar intacta con Vietnam del Sur. Estados Unidos estaba obligado a brindar asistencia.
El general dijo que después de que comenzó la batalla de las islas Paracel, Vietnam del Sur siguió pidiendo ayuda a Estados Unidos, sin respuesta de principio a fin. Según él, si los estadounidenses hubieran ayudado, solo dos de sus aviones de combate hubieran resuelto el problema. Habrían tardado menos de diez minutos en llegar desde Subic Bay, en Filipinas, hasta donde se estaba desarrollando el conflicto naval. Sin embargo, sus llamadas a Estados Unidos no recibieron respuesta.
Los documentos de Vietnam del Sur registraron que después de que Estados Unidos les entregó los buques de guerra, envió un gran número de consultores navales para entrenar a los marineros de Vietnam del Sur. Sin embargo, en 1974, estos mismos estadounidenses en Vietnam recibieron repentinamente órdenes para abandonar el puerto donde estaban los buques de guerra. Por lo tanto, la batalla naval de las islas Paracel se dejó en manos de un grupo de novatos de Vietnam del Sur que navegaban en buques de guerra estadounidenses contra la marina china.
Así que, creo, que Estados Unidos accedió tácitamente a que el PCCh se hiciera cargo de las islas Paracel. EE.UU. había decidido que Vietnam del Sur caería inevitablemente en manos de Vietnam del Norte. En ese momento, la relación entre Vietnam del Norte y la Unión Soviética se estaba estrechando.
A los ojos de Estados Unidos, las Islas Paracel no deberían caer en manos de la Unión Soviética, porque el Mar de China es un canal estratégico. La estrategia de política exterior prefirió Vietnam en manos de China, sobre Vietnam en manos de la URSS en ese momento.
Nunca se ha hecho público si Estados Unidos y el PCCh llegaron a un acuerdo secreto sobre este tema. Pero sí sé que después de que el PCCh tomó las islas Paracel de Vietnam del Sur, extrañamente no colocó armas y equipo ofensivo allí.
Sólo después de 2008, el PCCh comenzó a colocar misiles en las islas del Mar de China Meridional y a ampliar los aeropuertos, entre otros preparativos militares. Tras la fortificación militar de las islas, EE.UU. tuvo una fuerte reacción contra China, algo que sorprendió a muchos países. ¿Tal vez tuvo que ver con que el PCCh destruyera el acuerdo tácito original con Estados Unidos?
Todo el mundo sabe que mejorar las armas ayuda al resultado de una guerra. Pero el resultado nunca es solo una cuestión de la calidad de las armas. Los métodos de combate y los métodos de liderazgo también deben actualizarse para asegurar la victoria.
La marina y la fuerza aérea modernas del PCCh poseen equipo avanzado, pero esto no significa que el PCCh tenga capacidades de combate avanzadas. En su época, la confianza de Mao Zedong se incrementó al tener un ejército del PCCh que contaba con más de dos décadas de brutal experiencia bélica. Sin embargo, ahora el ejército del PCCh utiliza estrategias militares no probadas para controlar nuevas armas y no tiene experiencia en combate. Más allá de su nueva y llamativa tecnología, todavía existen considerables dudas sobre su capacidad en la guerra real.
Alexander Liao es columnista y reportero de noticias internacionales enfocadas en Estados Unidos, China y el sudeste asiático. Ha publicado numerosos informes, reseñas y programas en periódicos y revistas financieras chinas en Estados Unidos y Hong Kong.
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Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times
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