El Gobierno del Reino Unido advirtió este viernes de que el régimen de China debe respetar los «derechos y libertades» de Hong Kong, después de que Beijing haya anunciado que aplicará una polémica «ley de seguridad» en la antigua colonia británica.
«Estamos siguiendo la situación de cerca y esperamos que China respete los derechos y libertades de Hong Kong, así como su alto nivel de autonomía», señaló el portavoz oficial del primer ministro británico, Boris Johnson.
Hong Kong regresó a manos de China en 1997 tras siglo y medio de dominación británica, después de que Londres y Beijing firmaron en 1984 una declaración conjunta por la que el Reino Unido renunció a su última colonia asiática.
El pacto estableció el mantenimiento durante 50 años de una serie de libertades en ese territorio que no están garantizadas en la China continental.
«Como una de las partes en esa declaración conjunta, el Reino Unido está comprometido a apoyar la autonomía de Hong Kong y a respetar el modelo de ‘un país, dos sistemas'», agregó el portavoz de Johnson.
Chris Patten, el último gobernador británico de la ciudad (1992-1997), urgió por su parte al ministro de Exteriores, Dominic Raab, a trasladar a China que su propuesta es «indignante» y acusó a Beijing de sacar ventaja política de la crisis del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como nuevo coronavirus.
«Han usado esa preocupación para amedrentar y acosar en otras áreas, y una de ellas es Hong Kong», dijo Patten a la BBC.
La nueva norma que está estudiando Beijing prohibirá «cualquier acto de traición, secesión, sedición, subversión» contra el régimen, además del «robo de secretos de Estado y la organización de actividades en Hong Kong por parte de organizaciones políticas extranjeras».
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